El fotógrafo Arcángel Gabriel fue contratado para el trabajo más impactante de su vida: Una boda en Jayuya, un estado de la República de Puerto Rico localizado en el área centro montañosa de la isla. En las 24 horas que llevaba en el estado, ha tenido que enfrentarse a situaciones como: una mujer dar a luz en el tranvía y el retratar el parto, estadía en un hotel sin room service, televisión que solo tiene acceso a canales pornográficos, dibujos extraños en las paredes, una puerta cerrada bajo llave, una lámpara que no tiene donde conectarse, una roommate quinceañera sarcástica, un terremoto, jayuyanos que lo quieren fuera del estado, un panadero cantante y bailarín y para cerrar con "broche de oro" el día: dos mujeres que alegan ser las huéspedes oficiales de la habitación.
"¡A mí nadie me dijo que ellas vendrían a quedarse!"- Protestó Arcángel Gabriel
"Morena de la Montaña se hospeda con su madre quien llegó hoy y las dos chicas que ves aquí son mis compañeras de habitación." explicó Kate.
"¿Por qué no me lo dijiste antes?"
"¿A caso yo sabía que tu no lo sabias?"
Las dos mujeres saludaron a Kate y se marcharon rápido porque estaban tarde para el salón de belleza. Tenían que estar regias para la gran boda y tan solo faltan dos horas. ¿Qué hará Arcángel? El seguía discutiendo con Kate sobre la solución cuando su teléfono móvil sonó y era la madre de la novia. La Sra. le pidió que bajara a la habitación 134 para que retrate a la novia mientras la maquillan. Él le mencionó lo sucedido con las chicas y ella le dijo que después hablarían de ello. Mientras preparaba su equipo fotográfico, seguía protestando por lo acabado de suceder. Kate lo ignoró y se fue a bañar.
"Sigan ignorando al fotógrafo, sigan..." se repetía a si mismo mientras se marchaba.
Al llegar a la habitación de la novia encontró a la maquillista haciendo su magia en la joven. Arcángel comenzó a tomar fotos y la novia le comentó a la cosmetologa:
"El me conoce desde chiquita..."
"Desde tus 14...." Le respondió mientras tomaba fotos y la maquillista sonreía haciendo su arte en el rostro de la novia. La maquillista le pidió a Arcángel que le tomara su mejor ángulo que ella después quería ver esas fotos.
Mientras Arcángel le sonreía hipócritamente, la madre y el padre de la novia encendieron la radio en la emisora S-99 FM y comenzaron a bailar Salsa en el medio de la habitación. Era una ocasión para celebrar que su única hija, la más joven de los 4 hijos que tuvieron, se casará. La maquillista se reía de las ocurrencias de los viejos. Arcángel solo respiraba profundo y continuaba tomando fotos mientras la novia les decía que ellos solamente celebran el amor. En ese instante se escucharon unos golpes en la pared y eran los inquilinos de al lado exigiéndoles que bajaran el escándalo. Los padres de la novia continuaron con su celebración mientras la maquillista casi terminaba con su trabajo.
"Este toque y ya la novia está lista para vestirse y desfilar."
La Sra. madre apagó la música y abrazó a su hija exclamando que su princesa estaba hermosa. La novia comenzó a llorar y la maquillista le dijo que dejara las lágrimas para después porque dañaría el maquillaje y le cobraría extra. Se secaron las lágrimas y la madre le dijo que era el momento para su hija vestirse de blanco. Arcángel y el padre de la novia dijeron que se saldrían de la habitación pero la novia dijo que no era necesario. Se puso frente al espejo y exclamó:
"¡Vestida de blanco!"
Con una enorme sonrisa en el rostro, levantó los brazos y dio una pequeña vuelta al mismo tiempo que era cubierta por una enorme luz blanca y se escuchaba la canción "Vestida de Blanco" del cantante cristiano Luis Santiago. ¡Vestida de blanco que hermosa y radiante! Como decía parte de la canción. Su traje de novia blanco largo brillaba como una potente estrella dejando a todos boquiabiertos y a la Sra. madre de la novia con lágrimas.
"¿Cómo es esto posible?" – se preguntaba Arcángel.
La novia suspiro, sonrió, y explicó que el poder del amor más la esencia mágica de los extintos tomates de Jayuya le concedía la habilidad de hacer sus sueños realidad. El joven fotógrafo no entendía que carajo estaba pasando y que tenía que ver los extintos tomates con el juego de luces. Media hora después llegó el momento de partir hacia la iglesia. La madre y el padre de la novia aún no habían terminado de prepararse así que ellos les alcanzarían como en unos 20 minutos. Abordo de un carro Volkswagen ("Volky" como le dicen en Puerto Rico) Arcángel Gabriel y La Novia partieron juntos desde los portones del Hotel Optimus. La novia en el asiento trasero y Arcángel en el asiento delantero tomándole fotos a ella. En el camino hacia la iglesia, varios Jayuyanos se postraron a la orilla de la carretera lanzando confeti y arroz exclamando: