C17: Lucy vs. Arius

Lucy:

Nos encontramos en el tejado del edificio que está al lado del principal donde irrumpimos. Ahora mismo, estamos parados frente a frente. Guardo mis alas para no gastar tanta energía mágica. Él solo me observa fijamente.

—Así que tienes el don del fénix, ese fue el que yo hubiera preferido como magia zoan. En vez de la serpiente. —confiesa, sacando sus colmillos y mostrándolos con una sonrisa.

—Serpiente, eh, no se ve tan mal. —comento, tomando posición para correr y atacar.

—Esa es magia zoan mitológica, lo que es mejor que la mía. En cambio, yo tengo la de un animal común. —me explica, realizando gestos con las manos.

Corro hacia él para atacarle, del cual este solo se queda parado sin siquiera moverse. Cuando estoy cerca, lanzo una patada en el aire que va hacia el rostro; pero él lo esquiva con facilidad doblando completamente su columna para atrás, como si no tuviera huesos. Me sorprendo, pero no permito que me distraiga; así que realizo otra con giro que él detiene con ambas manos al reincorporarse, y usa el peso de su cuerpo para alzarme y tirarme un poco lejos.

Me levanto rápidamente, y convierto mis brazos en alas de fénix, del cual es así como puedo sacarlas. Me elevo, y vuelo por unos segundos, pensando cómo atacarlo. Él solo se queda allí sin moverse, viendo lo que hago. Al ver que no hace nada, voy hacia su espalda a gran velocidad como si fuese un proyectil. Este se voltea, mostrando una sonrisa que refleja seguridad, y lanza un puñetazo izquierdo que logro esquivar. Luego, paso por encima de él, guardo mis alas para sacar los brazos; tomo sus hombros, y lo tiro al suelo, usando mi peso e impulso.

Al soltarlo, se queja por el impacto. Luego, se gira, y me tira al suelo de lado, dando una patada en la parte baja de mis piernas. Al estar tirada en el piso, me toma por el cuello con una mano, y pone su rodilla en mi abdomen incorporando casi todo su peso. Está haciendo que me asfixie. Sé que con mis brazos débiles no podré defenderme bien, así que los convierto en las alas de fénix. Después, golpeo con fuerza el piso tres veces para desmoronarse y caer en el interior.

—¡¡AAAHHH!! ¡¡MALVADA SEA!! —grita el tipo mientras caemos sin poder sostenerse de nada.

Es una caída algo larga, ya que estábamos en el centro del edificio, y el nivel inferior es la planta baja. Yo abro mis alas para mantenerme en el aire, y luego quedarme en el piso tres. Él, en cambio, ha caído completamente hasta lo más bajo, dándose un gran impacto. Después de unos segundos, veo que se levanta adolorido, tocándose la cabeza que está sangrando con una mano. Le tengo fobia a las alturas, pero no cuando estoy segura de que puedo mantenerme en el aire.

—Algo positivo y ventajoso de los dones zoan es que te dan la capacidad de tener buena resistencia y regeneración. —dice cuando ya está levantado.

—Eso no funciona igual con todos los dones, ya que unos cuantos son diferentes. —contesto, recordando las clases de Alba, profesora especialista en Magia Zoan.

Salto dejándome caer, y doy varios giros de 360 grados estirando una pierna. Él nota lo que intento hacer, y se cubre con ambos brazos; del cual la patada aplastante conecta en ellos ejerciendo mucha presión. Siento como le tiemblan los ambos brazos intentando resistir, parte del suelo se rompe por el impacto, consiguiendo como consecuencia que sus pies se entierren. Finalmente, logra empujar mi pierna haciendo que toque el suelo retrocediendo, e intenta golpearme lanzando varios puñetazos.

Bloqueo absolutamente todos sus golpes con mis alas. Siento algo de dolor, pero es soportable debido a mi resistencia. Así que lo empujo con fuerza para desequilibrarlo, y lo golpeo con ambas alas impactando con mucha fuerza en su abdomen. Sale disparado como un proyectil, e impacta con varias cajas grandes de madera. Al levantarse, muestra unos ojos acechantes que me hacen sentir miedo y vulnerabilidad.

Corre directamente hacia mí, y no logro mover mi cuerpo. Me siento extraña, estoy paralizada del miedo. No había sentido esto antes al comenzar la pelea, ¿y ahora tengo tantos nervios? Estoy sintiendo inseguridad también, como si no pudiese defenderme ante este enemigo. Me veo como una presa indefensa que no tiene posibilidad de salvarse. Estoy en problemas, no esperaba algo así de su don.

Cuando logra acercarse hasta mí, me toma por ambos brazos, y muerde mi cuello, pasándome veneno que viene de sus colmillos. No pude moverme para evitarlo, ahora sí puedo hacerlo después de que me atacó. El veneno hace que sienta dolor, pero le bajó a la preocupación, así que continúo peleando. Tomo corta distancia con él, me elevo un poco, y convierto mis piernas en garras. Luego, le doy varios garrazos que rajan y cortan su camisa manga larga y brazos, del cual bloquea con estos.

Ambos intercambiamos golpes, del cual unos cuantos han conectado en mi cabeza y pecho; en cuanto a él, he logrado generarle más cortadas en distintas partes de su cuerpo. He estado bloqueando muchos ataques con mis alas, esto hace que tome ventaja; ya que mi cuerpo de fénix se cura mucho más rápido que el de humano. A pesar de eso, de repente, comienzo a sentir mareo, pierdo el equilibrio, y caigo al suelo de lado confundida.

—Por fin te ha hecho efecto mi veneno. —dice parado en frente mío, y toma un respiro—. Me estabas dando problemas con esas alas grandes, brillantes y molestas.

—Agh, creí que no pasaría nada. —confieso decepcionándome por confiarme tanto aún tirada en el suelo.