The Magic World

C38: Resultados

Drake:

El combate acabó. La competencia ha finalizado. Todos los que peleamos curamos nuestras heridas gracias a Lizz. Nos dieron la medalla y certificado de reconocimiento a las seis personas que participaron en la tercera parte. Esto debido a que fuimos escogidos como los estudiantes más habilidosos de su año. Agregado a eso, siete periodistas nos tomaron fotografías con los premios cuando regresamos al hotel. Es seguro que saldremos en las noticias. Bextruz, al ser una de las más exitosas y excelentes escuelas de magos, suele tener mucha fama junto a las personas que la conforman.

Pasó el resto del día donde estuvimos distrayéndonos con diversas actividades que ofrecía el hotel. En el siguiente, nos tocó regresar a la escuela. Así que empaqué mis cosas como el resto lo hacía. Me tomé unos minutos más debido a que Raven buscó tener una conversación importante y seria conmigo. No duró mucho para explicar el engaño y la falsedad que tenía montada en mí. Fue completamente directa. Antes de que comentara algo al respecto, se disculpó rápidamente sin esperar que la perdone.

—Entiendo que no tengas ganas de cruzar ni siquiera una palabra conmigo. —confiesa, pareciendo apenada, parada en la puerta—. Solo me retiraré y mantendré distancia.

—Lo que más me ha molestado fue la hipocresía. —le confieso, sentado en mi cama y con la mirada al suelo—. No sé por qué no siento tristeza.

—Pues... Aunque suene terriblemente mal, tus sentimientos también eran falsos. —me informa con delicadeza—. Eran solo emociones que solían ser manipuladas por mi aroma.

—Esto es impresionante. —opino con total decepción—. Se me es difícil asimilar verdaderamente lo que sucede.

—Tal vez no creas lo que te diga a partir de ahora, pero si me gustaría aclarar que las conversaciones sí las disfrutaba. —admite, viéndome al rostro— Eres un chico interesante, Drake, y no solamente por tu don sino también por esa forma de ser que cautiva.

—¿Cautiva?

—El querer con tantas ganas saber quién eres y de dónde vienes. Agregado al deseo de corregir el pasado que no causaste mientras aguantas cada una de las dificultades que te genera la sociedad de tu entorno... —menciona, y se queda pensante por un segundo—. Es algo que te convierte en tí, y lo vuelve especial.

—Aunque no sepa si estás mintiendo para seguir el engaño, eso sonó muy sincero. —comento con seguridad mientras mantengo contacto visual.

—Solo te aseguro que fue sincero. —dice, y da la vuelta para retirarse, pero se detiene un momento—. Por cierto, no decidí confesarte todo y pedir disculpas solo porque de repente pensé que era malo. En realidad, Boonie fue quien hizo que me diera cuenta.

—Así que fue ella. No me sorprende. —confieso. «Estuvo muy al pendiente de lo que sucedía entre nosotros dos» pienso.

—Tuvo muy buen ojo, presentimiento y percepción como para darse cuenta. Pero creo que lo más increíble es que siempre luchó hasta conseguir ayudar a un amigo. —admite y opina, viendo hacia fuera de la habitación—. Aunque perdiera la oportunidad de ganar algún puesto de reconocimiento y que pasara pena frente a nuestros compañeros por buscar tantos problemas conmigo.

—Si lo dices así, te doy toda la razón. —le digo. «Después de todo, nunca me dí cuenta de ello».

Al final, decidimos no tratarnos del todo a menos que sea necesario, ya que posiblemente tengamos más actividades junto al resto de compañeros. No supe cómo pedirle perdón a Boonie por nunca darme cuenta de lo que hacía por mí. Tampoco tuve la seguridad de expresarle de otra manera mi agradecimiento por la vergüenza que tenía. Así que seguí tratándola como siempre hago. Volví a Bextruz con los demás en la carroza donde vinimos.

La despedida fue bastante bonita. La gente se reunió de nuevo en la plaza central, dándonos buenos deseos. También nos tiraban flores y cantaban de una forma muy dulce. Lucy quedó completamente encantada con las personas de este lugar al igual que Boonie y Leo. Kevin se sintió a gusto como yo. Sin duda alguna, pienso volver algún día siendo un mago mucho más avanzado.

Llegamos a la escuela, y nos dirigimos inmediatamente al comedor luego de dejar nuestro equipaje en las respectivas habitaciones. Allí recibimos otro reconocimiento. Esta vez interno por parte de Prometheus y todo el resto de estudiantes. Después tenemos un discurso corto de él junto a las felicitaciones.

—No esperaba que fuera tan halagada y reconocida una competencia de esas. —confiesa Kevin de brazos cruzados mientras Prometheus sigue con el discurso.

—Waa, estaba a punto de conseguir un reconocimientooo. —berrinchea Boonie, encogiéndose de hombros y poniendo cara de tristeza aunque sea actuada.

—¿De qué tanto te quejas? —le pregunta Leo, fastidiado—. Tú fuiste la que decidió cometer una estupidez.

—Hey, Leo. —lo llama Lucy con expresión y voz de picarona, y lo abraza por los hombros—. Si Zed hubiera sacado unos pocos puntos menos, habríamos tenido que pelear entre tú y yo. ¿Qué comentas al respecto? —le cuenta y pregunta mientras levanta las cejas, picarona. Él se pone tenso.

—No tengo nada que decir. —le responde, quitando el brazo de ella, y apoya ambos puños en su cintura—. De cualquier modo, todos aquí sabemos que yo podría ganarte con algo de facilidad.

—¡Así serás de engreído, Dragon Slayer desgraciado! —exclama con expresión molesta. Él se tapa los oídos con ambas manos.



#2153 en Otros
#128 en Aventura
#1435 en Fantasía
#225 en Magia

En el texto hay: personajes variados, combates epicos, lugares magicos

Editado: 27.10.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.