The Magic World

C55: Razón de los deseos

Boonie:

—Te mataré si no me la entregas, plasta de mierda. —declara Dynamo, alzando a Jason por el cuello.

Los pueblerinos que aún pueden seguir luchando salen y lo apuntan con sus armas. Sin embargo, no parece que lo estén intimidado. Jason necesita ayuda. Intento ir para allá, pero Rubí me lo impide, sujetándome fuerte por los brazos. A pesar de eso, consigo zafarme y plantarle cara a mi peor enemigo.

—Aquí estoy, ¡Dynamo! —le informo. Este voltea y suelta a Jason.

—¡No, Booni..! —exclama él, pero se le dificulta por lo fuerte que apretaba Dynamo su cuello.

—Si me quiere a mí, tendrá que llevarme a la fuerza. —digo, preparada para usar mi don.

Cuando él llega a estar unos pocos metros cerca, Kevin se pone en medio con una espada. Me llama la atención eso, que posea un arma blanca. Dynamo lo mira con fastidio mientras se detiene.

—No le pondrás ni un dedo encima. —declara Kevin.

Luego Dynamo intenta patearlo, pero Kevin bloquea con su espada. En seguida disminuyo el poder mágico que tiene, el cual no parece mucho. Sin embargo, se desplaza a gran velocidad para golpearlo con su codo por la espalda, y tomarme a mí por los brazos. Realizo un fosejeo. A pesar de eso, consigue llevarme, impulsándose con ambos pies para usar de nuevo esa rapidez. De repente recibe un tremendo balazo en el rostro, y cae al suelo conmigo. Fue el disparo del rifle que tiene Kevin ahora mismo.

—Había dicho que no la tocarías, pero no contaba con esa velocidad.

«Qué buena puntería tiene. Me pregunto dónde se encuentran el resto de mis compañeros, estoy solo en esto» piensa.

—¡¡¡DYNAMOOOOO!!! —grita, con mucha fuerza, Drake desde la dirección contraria, todo ensangrentado y golpeado—. ¡¡NO HEMOS TERMINADO ESTO!!

«¿Hace poco no te encontrabas inmóvil? Qué molestia, debo recurrir a otra opción pronto» dice Dynamo mentalmente.

Luego se desplaza rápido hacia la casa para usar a los que estén dentro como rehén. Sin embargo, Kevin le atina de nuevo en el rostro, deteniéndole. Este retrocede, y se pone en posición de combate, subiendo la guardia.

—No parará hasta vencerlo. Está convencido de llevarse a Boonie, sin importar lo que cueste. —dice Kevin.

—¡Dynamo! ¡Yo soy tu oponente! —exclama Drake, desde lejos.

Después se apoya de sus rodillas, tratando de aguantar las heridas. Escupe sangre por la boca, cabizbajo y libera cierta cantidad de fuego azul de sus extremidades. Dynamo va hacia él velozmente, preparando un puñetazo de acero. Drake sube la cabeza, abriendo los ojos en grande, y se impulsa con ambos pies y una mano como propulsores. Luego levanta el otro brazo para darle un buen golpe. Puedo notar que lo ha cubierto de algo extraño... ¡Parece piel dura! Es de color vinotinto, y se encuentra adherida a la carne humana.

«Lo acabaré. Todo por cumplir con mi justicia» determina Dynamo.

«Le daré su paliza para que no vuelva más. ¡Esto es por Boonie y su gente!» se dice Drake.

Ambos chocan puños. Dynamo es de acero, y Draiky tiene la piel dura junto a las llamas azules. Duran varios segundos tratando de superar el uno al otro en un duelo definitivo. Al cabo de poco tiempo, Drake ejerce más potencia, debido a que sigue impulsándose. De esta forma, su puño resbala, y termina conectando un muy fuerte golpe en el pecho. Lo manda a volar hasta el otro extremo con las llamas por el cuerpo aún. El líder de los asesinos ha quedado inconsciente.

—¡Bien! Ahora tenemos que buscar a Lucy y Leo. Tal vez necesiten ayu... —dice Kevin, pero se calla al ver a Drako caminar hacia nosotros.

—Lo que faltaba... Ya no puedo continuar usando mi magia. —informa Drake, mientras lo tomo para cargarlo de hombros y llevarlo a la casa de Rubí.

—Así que derrotaron a cada uno de mis compañeros. —comenta Drako. Aún herido, pero suficientemente recuperado como para caminar.

—Se recuperó bastante bien sin atención médica. ¿De que se trató eso? —digo, sorprendida.

—Si es necesario seguir peleando contra otro más, entonces aquí estoy de pie, ¡listo para darlo todo! —aclara Kevin, subiendo la guardia con su espada.

—No estoy para continuar con esta batalla. Si me lo permiten, recogeré a cada uno de ellos. —confiesa, dejando de acercarse. Todos nos sorprendimos y confundimos al no esperar eso—. Ha sido suficiente destrucción. Me iré junto a mis colegas. En dado caso de que no quieran permitirlo, actuaré a la fuerz...

—Llévatelos. —lo interrumpo—. Y jamás regresen.

Drake:

Nadie se opuso a las palabras de ella. Los pueblerinos están alegres y nostálgicos, debido a que se fueron, pero dejando el camino de sangre por detrás. Tuvimos pocas bajas, comparado a la cantidad de personas que viven en Lastres. Acabaron más con casas y negocios que gente.

Tuvimos una extraordinaria y larga noche. Lucy se quedó atendiendo a los heridos con la ayuda de los demás y Bookie. Mientras tanto, Kevin, Leo y yo nos recuperábamos. Al día siguiente, decidimos enterrar a las personas que dieron la vida por su gente. Aún me siento adolorido, pero los acompaño a pesar de eso.

—Que descansen en paz. —dice el sacerdote.



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En el texto hay: personajes variados, combates epicos, lugares magicos

Editado: 27.10.2022

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