Leo:
Trato de hallar al enemigo con mi olfato, pero no percibo nada, no hay un olor emitido por él. Me parece extraño, ¿cómo puede hacer eso? Siento claramente su presencia aquí dentro casi junto a mí. Es invisible e imperceptible. Tengo que buscar la forma de ubicarlo.
—La oscuridad forma parte de nuestra realidad. Siempre está con nosotros, siempre nos sigue hasta en nuestros sueños más profundos. —habla el hombre con voz tenebrosa. Comienzo a encender mi cuerpo en llamas, pero Mara abre la puerta bruscamente.
—¡Collette! ¡Sabía que eras tú! —exclama la niña vampira que tiene muchos más años que yo.
—Si eres aguafiestas, lo tenía dominado. —La voz se vuelve cada vez más femenina, y menos intimidante. —Estaba por hacerse pis en sus shorts. —De repente, percibo el olor de otra vampira, y se abre un agujero negro donde sale ella.
—A ellos no los puedes asustar, son quienes ayudarán en el caso de esas brujas y sacerdotes. —le informa Mara al estar frente a ella, alzando su mirada por lo baja que es.
—Ouh, ¡lamento haberte vuelto mi presa! —se disculpa, y enseguida comienza a tocar mis brazos descaradamente—. Uuh, tienes algo de musculatura, aunque te falta mucho todavía.
—¿Qué rayos te sucede? —pregunto, fastidiado, quitándomela de encima.
—Soy Collette, la segunda hija de la familia Miracle, y quiero ayudarles a resolver este caso. —confiesa con mucho ánimo. Se ve muy enérgica.
Debe ser la que tiene 112 años, parece una adolescente de tal vez unos 15 apenas. Mide 1,68, tiene el cabello completamente blanco, corto por encima de los hombros, y la piel pálida como es usual entre vampiros. Su vestimenta... bueno, no se ve tan atractivo para cualquiera. Desde mi perspectiva, es la apariencia de un payaso sin maquillaje, ya que hay variedad de colores que no combinan. Lo único aceptable son las botas negras. Lleva consigo un libro de diseño raro, capaz ella lo decoró.
Me ha llamado mucho la atención sus dientes, estos son todos colmillos. En cambio, los vampiros suelen tener dos para subcionar la sangre con facilidad. Ella tiene cada uno de sus dientes como colmillos. Además, acabo de darme cuenta que posee ojos color morado mientras que toda su familia lleva el color rojo. Comienzo a dudar de si en verdad es hija de los Miracles.
—¿Me estabas siguiendo? —le pregunto a Mara, ignorando la petición de Collette para ayudarnos.
—Nop, sentí su magia, supuse que buscaba fastidiarte.
—¿Sentiste... su magia?
Volvemos al comedor donde ya todos han terminado de comer. Kyriel estaba justo hablando acerca de que podíamos quedarnos unas cuantas noches mientras realizamos la misión. Esta mansión es lo suficientemente grande como para que todos nos hospedamos.
En eso, Kevin se alarma al ver a Collette, y advierte a los demás de que ella posee ojos morados. No entiendo qué sucede, pero me pongo frente a esta por si tengo que defenderme.
—¡¡AAAAHH!! —grita ella, asustada—. ¡Hay visita y estoy en pijama! —Me confundo, creí que pensaba que iba a ser atacada por nosotros.
—Te dije que había visita. —recalca Mara con voz aburrida.
—Tranquilos, ella nació así, con los ojos morados. —informa Alex.
—Pareciera que fuese la maldición de esos lobos, son casi idénticos. —comenta Kevin.
—Ouhh, claro. Todos creen que tengo una maldición, jejeje, no... —Dura unos cuantos segundos, y continúa. —Pero sí puedo hacerlos brillar como esos hombres lobo. —confiesa, e inmediatamente lo hace, abriéndolos en grande frente a Boonie, la cual se espanta.
—¡¡AAAAAHH!! ¡¿Por qué siempre a mí?! —berrinchea con mucho miedo, tirada en el sofá.
—Ejem, bueno, soy Collette, y quiero ayudarlos a resolver este caso.
—¿Una compañera más para esta misión? —pregunta Lucy, ayudando a Oghma a recoger los platos—. ¿Podemos hacer eso?
—Bueno, en este caso, deberán tomar la decisión siempre manteniendo en cuenta los riesgos. —responde Alator, sentado cómodamente junto a Boonie—. Además, deben tener el permiso de los pa...
—Puede sumergirse a la aventura que le dé la gana. —informa Samantha, sin pensarlo dos veces.
—Como deseen mientras cumplan con su cometido. —opina Kyriel.
—Aegh, eso fue rápido. —comenta Drake—. Bueno, los vampiros se han debilitado por la magia de la bruja líder. ¿Tienes alguna forma de ayudarnos?
—Puedo usar la magia negra y controlarla. —confiesa con una gran sonrisa que muestra confianza y entusiasmo.
—Bien, entonces tendrás que mostrarnos el uso que le das.
—Okay, síganme, camaradas.
—¡No somos aún camaradas! —aclaro, aún fastidiado.
La seguimos hasta entrar a una gran biblioteca. Es bastante amplia y tiene muchas estanterías de libros, mesas y sillas por todas partes. Podemos escuchar el eco de nuestras voces. Collette se sienta en el suelo en posición de Indio, y abre el libro mal decorado que tiene. Ella esperaba que sucediera algo para mostranos, pero no ha sido el caso. Nos quedamos cerca de ella, esperando ver su habilidad. Cierra el libro, y lo abre nuevamente. Este libera una bola de energía negra que sale lentamente, y ella la toma con cuidado.