The Magic World

C162: Un trato

Estruendos tormentosos. El edificio inclinándose. Lluvia de escombros. Si no salen pronto de allí, quedarán enterrados bajo toneladas inmensas de la estructura destruida. La historia tallada en ese templo se aproxima a su tumba. Época de el rey demonio, el imperio, la esclavitud de otras razas, los fieles sirvientes, el ente misterioso que está a su lado, los mandamientos creados por el dios Luna, el Inframundo y demás. Rebeca y Drake quedaron en un posible acuerdo, pero sería el fin para ambos si no cooperan en la salida. Ella lo ve de una manera más suave y calmada. Él le ofrece su mano. De un jalón comienzan la retirada, aunque no se iba a quedar con las manos vacías. Mientras la llevaba consigo, dos smilers recibieron la orden de recuperar esa gema. Obtener el mandamiento y dejarlo resguardado continúa siendo la misión principal.

«Vaya, todo se ha vuelto un desastre», asume Boonie, completamente tirada en el suelo del segundo piso. Los pelos quedan de punta al ver el montón de escombros caer en una línea hacia ella. «¡WAAAAHH! ¡Con que el templo entero se está desmoronando!», se alarma con los ojos bien abiertos y la lengua super estirada. Corre varios metros a una escalera que aún está lejos mientras plantea: «No sé si habrá alguien más por aquí. Los Nomos, Leo, Kevin... el hombre de túnica espantosa. Podría usar la habilidad de Andrei, pero no puedo calcular cuántas toneladas volvería blandas». A la vez, Lucy ignora un llamado de Collette, seguido de Kevin, mientras vuela a toda velocidad hacia el gran templo.

—¡¿Estás loca?! —interroga Leo, muy agotado.

—A la distancia que estamos nos vemos a salvo, pero nunca vio al resto salir. —informa Mael, preocupado.

«No van a caer. No lo permitiré», asegura Lucy con una velocidad asombrosa, superándose a sí misma. «Boonie, Drake, ustedes dos son los que faltan. ¡Vivan junto al resto del equipo!».

La antena de buen tamaño cae cerca de ella, segundos que le toma evitarla y seguir avanzando. Un tiempo reducido que, para cualquier doctor y salvavidas, es de lo más importante. Boonie cierra los ojos como una dulce doncella a punto de dormir. Toma ambas manos y las deja sobre su pecho. Drake destroza los escombros con el uso de sus tres dones. Los Smilers ríen de preocupación mientras tratan de protegerlo junto a Rebeca, quien lo da todo por sobrevivir. De repente un poder alucinante muestra presencia en esa destrucción. El equipo observa con pleno asombro. Ni siquiera Lucy puede creer lo que sucedió. Los hechiceros se movilizan rápido para el auxilio hasta detenerse por lo que observan.

Gran parte del templo destruido se vuelve una masa blanda. Toneladas de escombros y estructura estaban a nada de aplastarlos, pero todo cae encima de la masa. Luego ven cómo se mueve y moldea para tirar la mayor parte a un lado. Estruendos fuertes aturden a Lucy junto a los hechiceros presentes. Consiguen evitar sin problemas el desastre. Tierra y polvo son levantados creando así una nube que tapa varios kilómetros del pueblo. Preocupada con el corazón latiendo a millón, Lucy desciende a lo primero que nota salir del material blando. Son Drake y Rebeca. Los toman rápidamente para apartarlos pronto. Ambos quedaron en shock durante unos minutos mientras los auxiliaban. Después salen los smilers. Por último Andrei.

—¡¿Dónde está Boonie?! —pregunta Lucy a gritos.

—Tranquila. Se encuentra bien, pero debemos sacarla enseguida. —le comunica un hechicero. Entre 5 usan la magia mística para mover la masa y tratar de abrir un camino donde puedan sacarla.

—Está bastante débil, pero a salvo dentro de lo que cabe. —asegura Mael a su lado.

—¡¿Cómo que dentro de lo que cabe?! —interroga, tomándolo por la túnica bruscamente—. ¡Debe estar bien! ¡Tenemos que salvarla o no me lo perdonaré!

—Guao, en comparación al resto, ella parece una vela tratando de mantenerse encendida bajo una ventisca. —opina Collette, llegando a donde están—. Su energía mágica es muy poca.

—¡BOONIEEE! —grita Drake al recordarla después del shock, y se acerca para ametrallar a golpes la masa y abrir paso.

«Se preocupa por sus compañeros», piensa Rebeca, observadora y ahora más calmada. «¿Mencionaste a mi grupo de bandidos para saber si me importaban? Así cambiaste de parecer y quisiste ayudarme».

—¡Está convida! —informa un hechicero mientras la sacan rápidamente—. ¡Hay que llevarla al hospital de inmediato!

Drake se devuelve y asoma su cabeza para verla. Está inconsciente. Lucy soltó lágrimas de dolor al encontrarla en ese estado. Mientras tanto, otros hechiceros toman a los bandidos faltantes, consiguiéndose la sorpresa del montón de cazadores vencidos. Mael explicó lo que había sucedido a sus colegas. Le pusieron esposas anuladoras de poderes a Rebeca y Andrei, los más peligrosos de ese bando. Pero, antes de separarse, ella decidió preguntarle algo inquietante a su fiel amigo; quien anda cabizbajo y desanimado.

—Volver la estructura blanda no era suficiente. Igual nos hubieran aplastado esas toneladas. Pero lograste volverlas una cueva para nosotros y así protegernos. —analiza Rebeca, sin recibir respuesta de él—. Lo que no entiendo es... ¿por qué nos salvaste a todos, hasta tus propios enemigos?

—Yo... no lo hice. —confiesa, momento en que Lucy empieza a escuchar la conversación a sus espaldas.

—¡¿Qué?! ¡¿Quién o qué lo hizo?! —interroga Rebeca, confundida y sin poder creerlo, mientras los ponen de rodillas.



#20159 en Otros
#2589 en Aventura
#14780 en Fantasía
#3201 en Magia

En el texto hay: personajes variados, combates epicos, lugares magicos

Editado: 27.10.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.