The Magic World

C197: Leo vs. Hazel

—¡WAAAAH! —grita Agnes, volando por una explosión generada cerca de ella.

—¡Te dije que te quedaras atrás! —recalca Bibi, molesta. Por poco recibe cortes de las garras de Raiden, pero Zed se interpuso a tiempo con sus puños de hielo.

—¿Pueden dejar de discutir? —pregunta él, bloqueando más y más ataques—. No le están prestando total atención al enemigo.

—Hazel es el único que no está con nosotros. —recuerda Near, flotando desde su nube—. Ese desgraciado hace lo que le apetece.

—¿No recuerdas de qué habla en ocasiones? —le pregunta Hurona—. Dragones, volar, ser libre...

—Me vale que quiera ser libre.

—Nunca has sido de separarte de la gente, ¿cierto?

—No te confundas. Pienso que aumentarán las probabilidades de salir bien si nos mantenemos unidos.

—Aunque parezcas un odioso casca rabia, en realidad, eres muy tierno. —comenta ella, consiguiendo que él se sonroje.

«Las amistades, los vecinos, cualquier allegado y, sobre todo, la familia son lo más importante en nuestras vidas. Siempre cuida de los tuyos, que serán tu mayor tesoro», recuerda Near las palabras de su padre.

—Unidos seremos capaces de mucho más, Hurona.

Ella realiza un movimiento de espiral con las colas de agua mientras sonríe de encanto. Una tumba a Zed. Cuando intenta levantarse, otra lo golpea fuerte, seguida de otra más que lo tira lejos. Bibi logra romper dos, atacando con su bate. Pero recibe una mordida del puma en el antebrazo. Soportando el dolor con un pequeño quejido, gira el bate en su mano y lo golpea desde la cabeza para estamparlo contra el suelo. «¿Qué sucede con sus ataques? ¿Soy yo o se está haciendo más fuerte?», se pregunta Raiden, aguantando el impacto. Ella estuvo a punto de realizar la misma acción, pero una ventisca hace que retroceda y retraiga los músculos por el frío. Near lo salvó a larga distancia. Ambos intercambian miradas, ella fastidiada y él confiado.

¥¥¥

—Me gusta tu don, hace no mucho enfrenté a otro dragon slayer. —confiesa Hazel, sentado en el piso en posición de indio—. Bueno, es una chica cercana a mí. No he podido vencerla, pero tampoco me falta mucho para superarla.

—¿Qué tanto hablas? —le pregunta Leo, irritado, saliendo del humo con ciertas heridas—. No haces más que abrir el pico.

—Oh, ya veo. Tus propias llamas pueden causarte daño. Qué problema. —comenta, y realiza un salto para ponerse de pie—. En fin, escucho bastante ruido allá arriba, deben estar pasándola bien.

«Todos están allá, y nuevamente, me quedaré solo. Pero, si logro vencerlo, iré a por los cristales mientras los demás están ocupados», piensa el dragon slayer.

—Bien, bien. ¿Sabes cuál es la mejor forma de entrenar? —interroga Hazel mientras realiza estiramientos.

—¿Estás jugando conmigo?

—Si fuera una situación real, me la tomaría más en serio. Para mí, esto no es más que un juego. —responde, esquivando por poco una lanza de fuego que fue disparada—. Ouh, ouh. Veo que ya lo estamos retomando.

De inmediato Leo se impulsó con ayuda de sus llamas. Acortando la distancia, realiza un giro e impacta una patada en los brazos del adversario. Al no haberle golpeado donde quería, da otro giro y, esta vez, conecta en el abdomen. Para no dejarlo en una simple patada prendida en llamas, es disparada una bola de fuego a penas lo golpea. Lo mandó a volar hasta impactar en la pared. Sin esperar a que se mueva, crea otras dos lanzas y, de una patada, las manda hacia allá. Cuando entran en contacto, estallan casi desbaratando el suelo. De repente ve de reojo una pierna a centímetros del rostro. Recibe un fuerte golpe que lo mandó a volar unos metros. Pero es detenido al recibir un puñetazo en el abdomen. Lo que hace que se estampe contra el piso no fue el puñetazo, sino una carga de energía que vino después. Una potencia suficiente para hacerlo botar sangre por la boca.

—Bien, como te decía. Lo mejor de un entrenamiento es conocer tu manera de aprender, porque no todos lo hacemos de la misma manera. —le habla mientras Leo yace tirado. Él toma respiraciones profundas, preguntándose cómo sucedió eso.

»Esto fue algo de lo que yo no me había dado cuenta. Por eso ahora estoy en desacuerdo con la forma de enseñar en ciertas escuelas actualmente. Bextruz está bien, pero le falta salir de la ambigüedad.

«¿Esa energía soltada fue por su don?», se pregunta Leo con los brazos y piernas extendidos. «"Contraataque". Quizás pudo hacerlo porque le causé buen daño, exceptuando las lanzas, ya que las evitó».

Un tornado es generado, distanciando al enemigo para a preparar el próximo ataque. Bolas de fuego son disparadas hacia Hazel, quien las esquiva sin problemas. Salta, se detiene, luego se agacha y alza su pierna lo más alto para evitar otra. Al notar que continúa ejerciéndole presión, las empieza a bloquear y devolver con el diente de tiburón. Usando la habilidad "Contraataque" y el arma mágica, puede hacer esto. Parece que se deshacen al entrar en el tornado. Pero no tomó una acción importante en cuenta: Leo estaba preparando algo mucho más grande. De repente sale con un puño de gran tamaño hecho de llamas super ardientes. Hazel no tuvo tiempo suficiente para reaccionar, recibe el tremendo puñetazo de fuego. Estaba cargado de tanta potencia que hizo temblar la torre nuevamente.



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En el texto hay: personajes variados, combates epicos, lugares magicos

Editado: 27.10.2022

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