Capitulo 5

Jake llegó a la escuela con su guitarra colgada al hombro y la pequeña gatita acurrucada en su mochila. Al entrar en el aula, vio a Dave y Carl conversando en un rincón.

—¡Hey, Jake! —saludó Carl—. ¿Qué tienes ahí?

Los ojos de todos se iluminaron al ver la gatita. Jake se sintió un poco abrumado, pero decidió contarles todo.

—Es una larga historia —dijo, tratando de mantener la calma—. La encontré herida y decidí ayudarla. Pero, en realidad, hay algo más de lo que necesito hablar con ustedes.

Sus amigos lo miraron con curiosidad.

—Chicos, ¿creen que me pueden ayudar con algo? —preguntó Jake, sintiendo cómo la ansiedad comenzaba a apoderarse de él.

—¿Con qué? —preguntó Dave, frunciendo el ceño.

—Bueno, el otro día le dije a Aria que tenía una banda llamada *The Roddy's*, pero... —Jake hizo una pausa, sintiendo un nudo en el estómago—. No la tengo. Y ahora necesito formar una, o pareceré un mentiroso.

Carl y Dave se dieron la vuelta, sorprendidos.

—¿En serio? —dijo Carl—. ¿No se te ocurrió pensar en eso antes?

—Lo sé, lo sé —respondió Jake rápidamente—. Pero ahora tengo que hacerlo. ¿Me ayudarían a formar la banda?

Dave lo miró pensativo, mientras Carl sonreía.

—Claro, Jake. ¡Vamos a hacerlo! —dijo Carl, emocionado—. Siempre quise tocar en una banda.

—Pero necesitamos un buen nombre —añadió Dave

—Podríamos hacer una lista de personas que tal vez quieran unirse a la banda —sugirió Dave, pensativo.

—¡Sí! —exclamó Jake—. Eso suena bien.

Carl levantó la mano.

—¡Espera! Yo quiero tocar la guitarra.

Dave asintió, emocionado.

—Y yo quiero tocar el bajo.

Jake sonrió, aliviado de que sus amigos se unieran a la idea.

—Perfecto, yo puedo tocar la guitarra acústica.

Carl lo miró con complicidad.

—Ajá, pero también cantarás. Serás el vocalista.

Jake se quedó boquiabierto.

—¿Quéeeeee?

Dave se rió.

—Cierto, tú nos metiste en este aprieto, así que tendrás que hacer ese trabajo.

Jake sintió cómo su nerviosismo aumentaba, pero sabía que no tenía otra opción. Al final, respiró hondo y asintió.

—Está bien, lo haré. Pero necesitamos empezar a practicar.

Los tres amigos comenzaron a hacer la lista, emocionados por la nueva aventura que les esperaba, aunque Jake no podía evitar sentir un ligero miedo a lo desconocido.

Después de terminar sus clases de guitarra, Jake, Carl y Dave se reunieron en el pasillo. La emoción de formar una banda les llenaba de energía, pero también se dieron cuenta de que aún les faltaban piezas clave.

—Chicos, necesitamos un baterista y un tecladista —dijo Jake, mirando a sus amigos.

—Cierto, sin ellos no podemos hacer mucho —respondió Dave, frunciendo el ceño.

Mientras salían de la escuela, Carl se detuvo de repente.

—Oye, ¿y qué tal ese chico nuevo? Es nuevo en la escuela, ¿no? —sugirió.

Jake asintió, pero se mostró dudoso.

—Sí, puede ser, pero… ¿alguien lo conoce?

Carl se encogió de hombros y, decidido, se acercó al chico nuevo que estaba de pie cerca de la entrada. Con un poco de nerviosismo, le dijo:

—Oye, disculpa… eeeee…