Stop This

𝑾𝒉𝒂𝒕 𝒂𝒓𝒆 𝒚𝒐𝒖 𝒅𝒐𝒊𝒏𝒈?
𝒀𝒐𝒖 𝒂𝒓𝒆 𝒈𝒆𝒕𝒕𝒊𝒏𝒈 𝒄𝒓𝒂𝒛𝒚?

Hongjoong todavía estaba procesando lo ocurrido, no había caído en cuenta de lo que había hecho, hasta hace unos minutos; tenía a aquel extraño abajo, sentado en el sofá de la sala. ¿Cómo habían llegado a eso? Hasta él parecía no recordar. Tampoco era como si llevará siempre extraños a su casa, no era así, nunca fué así, ¿Entonces porque él había si do la excepción?, No lo comprendía pero sabía que no podría haberlo dejado en aquel oscuro camino y solo. Caminaba en círculos al rededor de su habitación, decía le ayudaba a pensar mejor, solo buscaba ordenar sus ideas; y es que no lo entendía, tenía la cabeza hecha un lío con la situación, en su interior parecía llevarse un debate. Había pensado en tomar el teléfono y alertar a las autoridades para que actuarán al respecto, ellos sabrían manejar la situación ¿No?. Dormir bajo el mismo techo con alguien que apenas conoció no era opción, desconocía las intenciones del contrario. Pensado todo esto decidió ir a la sala y hablar con él, podrían llegarían a un acuerdo sobre que hacer con su situación y así ayudarlo.

—Mira, yo, he pensado y creo que deberíamos... -—Las palabras quedaron ahí cuando dirigido la mirada a dónde se suponía lo había dejado sentado, pero no estaba, entrar en pánico no era opción—.

Grandioso, ahora tenía a un desconocido jugando a las escondidas en su casa.

Ya había registrado toda la casa, se aseguro también que todas sus pertenencias estuvieran en su lugar, no se habían robado nada.

¿Cuánto tiempo y que tanto se había sumergido en sus pensamientos?, No sabía con exactitud pero incluso le había dado el suficiente tiempo para que huyera, se escondiera o alguna otra opción, comenzaba a dudar si incluso habían estado en el mismo lugar pues no había escuchado el ruido de la puerta al ser abierta, por lo antigua de casa el sonido era escandaloso. Pensaba mientras bajaba las escaleras cuando escucho una puerta abrirse, pero no ser cerrada, entonces apresuró el paso. Miro primero a la puerta principal, intacta, y se dirigió a la cocina, a la puerta trasera, y talvez para su buena suerte estaba abierta. Al parecer el extraño había huido, no tenía más explicación. Busco la linterna que guardaba en el estante a un costado de la puerta, pero no la encuentro.

—Se la llevó —pronunció por lo bajo al no tener éxito su búsqueda—.

Definitivamente no la había perdido, no podía ser eso, nunca perdía las cosas, salvo el control remoto del televisor pero vamos ¿Quién no lo ha perdido por lo menos una vez?; También uno de sus anillos, en ese tiempo estaba realmente molesto consigo mismo pues era de sus favoritos; o su pala de mano, aún recuerda cuando había comprado aquella lluvia de estrellas que necesitaba replantar, la planta casi se muere en lo que Hongjoong encontraba la pala,  y las llaves de su auto, tuve que ir caminando al pueblo para hacer sus compras, viéndolo así, talvez si era algo distraído y perdía muchas cosas.

Pero no era momento de hablar de Hongjoong, no en esta ocasión.