The Witch

Capitulo 9

Elizabeth

Anoche le pedí a Stefan que se encargara de todo sobre el cuerpo de Susana e hizo un excelente trabajo, esta mañana apenas me levante fue lo primero que fui a revisar y todo estaba perfecto la velaron toda la noche en el salón principal del castillo permitiendo la entrada de todos, sé que a pesar de todo susana fue justa con el pueblo solo que su hija la supo manipular, en la tarde será su sepultura con todo lo necesario para una bruja como ella.

Stefan es un muy buen soldado y buen líder, diría que aparte de mi madre él es la única persona que significa algo especial en mi vida, crecimos juntos, a los dos nos enseñaron combate cuerpo a cuerpo y manejo de armas, él fue lo único parecido a un amigo que tuve.

Recuerdo que solíamos escaparnos a pasear por el bosque el me trataba bien, con cariño pero después de un tiempo nos separaron el debía seguir su entrenamiento para capitán de la guardia y del ejército de la nación, y yo para ser la futura reina.

Fue duro estar sola pero eso me enseño muchas cosas aunque el de vez en cuando se escapaba a saludarme y en cierto modo eso logro que tuviera un pequeño espacio en mi corazón, aparte de mamá es el único que puede tratarme de tu y llamarme por mi nombre aunque esto solo pasa cuando estamos solos o con pocas personas y yo se lo pido, el conoce cuál es su puesto pero también sabe que le tengo gran aprecio, es uno de mis mejores aliados y en el fondo sé que mi madre lo considera un buen candidato para ser mi esposo más adelante cuando se requiera empezar a buscar una heredera a mi puesto lo bueno es que la idea no me desagrada es un buen hombre.

Después de arreglar unos documentos en el despacho de susana salgo a ver a las niñas y a darme una pasada por el salón donde velan a Susana, la verdad a mí su muerte no me afecta porque no tenía ninguna empatía hacia ella, pero de igual forma respeto lo que hizo en sus buenos años.

Antes de entrar al salón le pregunto a una de las empleadas donde están las niñas y me dijo que en salón trasero así que primero entrare y luego voy con ellas.

Doy un saludo a los presentes, estoy unos minutos conversando con algunas personas y ya decido retirarme aún faltan unas horas para el entierro por ende tengo tiempo para compartir con las chiquillas, la historia de Sofia me dio tristeza, es una nena muy linda y amorosa que no merecía sufrir tanto, es increíble cómo solo con ellas y con Stefan puedo ser más cálida y sonreír sinceramente.

Para mañana tengo que reunir a las personas que ayudaban a Susana a administrar el aquelarre necesito mirar quien ocupará su puesto esa reunión será extensa y cansada pero bueno no me puedo quedar todo el tiempo acá.

Llego al jardín donde veo a las niñas jugando con Adam están muy contentas, él aun no me da mucha confianza, pero bueno a mostrado estar calmado y le ha puesto interés a su entrenamiento con la guardia.

-Princesaaa. -Gritan las niñas cuando me ven haciendo que Adam levante la cabeza para verme, es realmente guapo y sus ojos a decir verdad aun me cautivan.

-Hola niñas a que juegan que no las he visto en todo el día. -Les digo dando les una sonrisa

-Princesa mi hermano nos enseñaba como golpear a los demás. -Me dice Natalie haciendo que yo habrá los ojos un poco desorientada por lo que dijo.

-Como que a golpear a los demás ustedes aun están muy chiquitas para eso. -Digo mirando severamente a Adam.

-No princesa no malentienda las cosas les estaba enseñando como defenderse nada más. 

-Igual tú no tienes por qué hacer eso para esto hay profesores y personas que les pueden enseñar ellas aun están pequeñas no crees que tu hermana debería disfrutar su infancia antes de estar pensando en cómo golpear gente. -Le digo duramente logrando que me dé una mirada llena de furia y que su mandíbula se tense notablemente.

-Si su alteza tiene razón no volverá a pasar, niñas olviden lo que les dije. -Les dice mirándolas de reojo.

-Niñas suban al cuarto para que las arreglen para el funeral. -Ellas asienten con la cabeza le dan un abrazo a Adam y se van.

-Tú también ve a cambiarte vas a estar con la guardia, que el capitán te ponga un puesto y Adam tu hermana va a estar bien déjala ser feliz por ahora en su momento aprenderá a defenderse de eso me encargare personalmente. -Le digo un poco más calmada, pero con el mismo tono frío de siempre.

-Lo se princesa, pero el mundo de hoy está más peligroso que antes y más aún para nosotros los humanos así que yo quiero que ella sea autosuficiente que pueda valerse por sí misma quiero su bienestar es lo único que me queda de mi familia y la verdad no la quiero ofender pero sé que yo le puedo enseñar mejor incluso que usted misma, se ve que es muy buena con la magia pero de combate cuerpo a cuerpo lo dudo y es lo que ellas deben aprender no porque magia no poseen.

No debo mentir que me sorprende su atrevimiento, es bueno que confié en sí mismo aun así ser orgullo es otra cosa.

-Uumm mire Adam creo que usted está llegando demasiado lejos con su cómo le digo sinceridad, no me conoce en lo absoluto así que le pido que no diga cosas sin sentido, sin embargo quiero que se dé cuenta de con quien está tratando porque parece que aún no lo tiene del todo claro, mañana vamos a ver cuál de los dos es el más apto para enseñarle a las niñas a luchar, nos veremos en la sala de entrenamiento. -Lo dejo con la palabra en la boca y me voy odio que la gente crea que porque soy una princesa soy delicada y que no se pelear, pero ya vera mañana.

Llega la hora del funeral y como es costumbre todos visten trajes oscuros y llevan consigo regalos que dejaran en la tumba, por mi parte voy con un vestido negro hasta las rodillas serio pero a la vez acorde a mi edad acompañado con un abrigo del mismo color y zapatos de tacón; a mi lado las niñas ambas con vestidos azul oscuro.
Todos están reunidos en el salón principal del castillo esperando a que yo de la orden de poder empezar, el capitán va a mi lado y con el tres guardias más entre ellos Adam, me paro al frente de todos al lado del ataúd y me dispongo a dirigirme al pueblo.
-El día de hoy le daremos la despedida a Susana Walter una gran líder que cuido este aquelarre por 30 años con responsabilidad y honestidad, lastimosamente fue el amor que sentía por su hija lo que la cegó y la llevo a su propia destrucción dejando a un lado su deber para con el pueblo y defraudando así la confianza que la reina había impuesto en ella pues por más amor que sientas el deber y lo correcto van primero es lo que siempre se les solicita a las personas que ayudan con el manejo de esta nación, aun así el día de hoy recordaremos esas buenas acciones y los buenos años de este pueblo,  les pido por favor que olviden lo malo y la honren con total sinceridad.
Con esto me encamino a la salida para encabezar la marcha al salir del salón se me une el capitán con los guardias y las niñas detrás de nosotros vienen otros guardias cargando el ataúd y así el resto de las personas hoy es un día de luto por eso todos pueden asistir al funeral; llegamos al cementerio y en la cripta de la familia Walter es sepultada Susana al lado de su madre, de Camila no quedo nada así que no se le puede enterrar las personas terminan de despedirse del cuerpo y se van alejando, al final con mi poder pongo un sello de protección y nos vamos.
Todo el castillo está en silencio y todos aun visten oscuro es su forma de honrar la muerte de Susana, mando a informar al consejo del pueblo que mañana los requiero temprano para una reunión y así escoger quien se quedara al mando cuidando este aquelarre.




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