Liz
Tres años...
No puedo creer que transcurrieron tres años desde la preparatoria...
Aunque quizá no solo desde la preparatoria, si recuerdo bien (lo cual es casi imposible) fue hace tres años que comenzó a desatarse este caos, tres años son los que llevo en un estado complicado, o al menos más de lo normal
La universidad es muy difícil y estresante, todo cuenta y absolutamente nada cuenta al mismo tiempo, por un lado es como tratar de mover un edificio, pones todo de ti para lograr tu meta mientras que no parece suceder nada, pero si bajas mínimamente la guardia o siquiera piensas en descansar tu esfuerzo se lleva tu vida como una cadena de dominós, pero estoy sobre analizando de nuevo...
Hay muchas cosas que podría describir o pensar, pero enfoquémonos en el momento de ahora y solo lo básico para entenderlo, eso sí logro no divagar
Estoy estudiando administración, me gusta, la escuela está del otro lado de la cuidad, así que Ayelen y yo estamos rentando un apartamento, el lugar es lindo al igual que el vecindario, queda mucho más cerca de la universidad que mi casa, está a unos minutos de los chicos y Nicolás (amigo mio desde hace años) vive en el piso de arriba
No vivimos aquí de tiempo completo, tanto en días libres como en las vacaciones estamos en nuestras respectivas casas, aunque es lindo estar juntas
Fueron años tan rápidos y ajetreados que no tengo idea de cómo llegue a aquí, pasaron muchas cosas muy de golpe. Es por eso que hasta ahora, un jueves en la tarde cerca de terminar mi penúltimo año de universidad, en la azotea del edificio, es cuando puedo sentarme por un momento a analizar y procesar que paso tiempo mucho tiempo
Paso demasiado tiempo desde que pude vivir del todo el momento, hubo días en los que pude disfrutar instantes, pero la mayoría del tiempo lo pase viviendo de manera tan circular que hice de todo... aunque siento que no hice nada, que desperdicie este tiempo, que no lo viví
-Me siento como ya sabes quién acompañándote a fumar aquí- Habla Ayelen, volteo a verla mientras me esfuerzo por sonreír un poco
-Lo sé, lo siento- Me disculpo – De hecho, ya deberíamos entrar- Asiente con la cabeza, apago el cigarrillo antes de comenzar bajar juntas por las escaleras
-No creo que sea bueno que hagamos esto todos los jueves por la tarde, no es saludable-
-No lo hacemos todos los jueves- Me excuso
-No, pero dos veces seguidas, ¿Pasa algo en especial?-
-Solo me preparo para mañana-Mi acompañante me mira extrañada
-¿Qué hay con mañana? Creo que no había visto a nadie preparase así para su cumpleaños-
-Tampoco a nadie de nuestra edad que se esconda para fumar... ¿Enserio paso tanto tiempo?- Puedo saber que entiende a que me refiero mediante su respuesta
-En realidad tampoco sentí fuera tanto- Suelta abriendo la puerta, ambas entramos, hablamos un poco sobre lo que tenemos que hacer en la universidad y después vamos a nuestras habitaciones, aún es temprano y nos quedan algunas tareas después de las cuales cenamos algo ligero
Anochece por fin
Mi único pendiente es darme un baño para ir a dormir temprano así que me apresuro a completarlo. Ya en pijamas me acuesto entre las cobijas sin poder conciliar el sueño
Mis parpados pesan, mi cuerpo punza, pero no puedo cerrar los ojos
Cada vez que lo hago comienzo a tener cosas en la mente, pienso en mi familia, en mi edad, en lo que ellos pensarían si supieran lo que soy realmente, en mis terribles calificaciones, tengo... esta especie de recuerdos, cosas distorsionadas, censuradas o desconocidas
De pronto veo una imagen, soy yo en alguno de mis cumpleaños pasados, estoy sentada a la mesa luciendo feliz, pero sin entender lo que nadie dice, es un segundo pequeño, pero es suficiente para traerme pensamientos invasivos
Los recuerdos vienen a mi ahora que no los necesito, vienen para atormentarme. Recuerdo mis desventuras cumpleañeras, todas las veces en las que mis planes de todo un año se arruinaron por el clima, la presión, lo que crecer significa para mamá, las cosas que me arrebataron... recuerdo ese catastrófico cumpleaños que había sido borrado por partes de mi memoria
La verdad entiendo pocas palabras,pero se que aunque no las entienda son terribles, trato de negarme a abrir esos malos ratos, pero me es tarde, se cierra mi garganta, mis manos sudan y pronto estoy paralizada recordando
Comienzan a proyectarse las imágenes de entonces, la primera vez que llore al despertarme, lo que significó para mí ese día, la manera en la que me vieron, el cómo me criticaron, mi solitaria comida, mis solitarios llantos... soy solo yo en una habitación, escondida de mi familia para llorar
Ellos son muy duros con todos
Conforme crecí me di cuenta de muchas cosas, pero apenas decidía ignorarlas las olvidaba
Para ellos llorar es hacer berrinche
Enojarte está mal
Estar cansado es ser flojo
Y muchas cosas son pecado
Ellos siempre han hablado mal de mi
Pero siempre lo ignore...
Cuando hablaban no entendía
Solo escuchaba, como si de otro idioma se tratase
Siempre esperaron demasiado de mi...
Yo a veces no sabía en donde estaba
Querían que creciera, yo solo quería entender porque no sabía lo que paso esta mañana
Ellos aun quieren mucho, siguen esperando demasiado...
21 años, Liz, mañana te enfrentaras al reto de aparentar una vida adulta y ojala sepas lo que viene
Entre llanto ahogado y prácticamente en silencio salgo de ahí, escapo de la escena del crimen directo al peor lugar posible, pero al único que me da escape a veces