XXVII

10 de septiembre, 2015

Bradley

Después de imprimir algunos folletos que nos habían pedido, regrese nuevamente al salón. Pase antes por la cafetería, hoy me había saltado el desayuno y estaba un poco hambriento. Ingresé al curso y me senté en mi puesto. El maestro estaba comenzando hacer grupos de trabajo, fue una suerte que me tocara con Colton.

Una vez terminado el trabajo que mando a realizar, lo entregamos y pudimos salir de clases antes que terminara la hora. Junto con mi mejor amigo caminamos hasta donde era el polideportivo y nos sentamos en las gradas.

– Te noto ausente –dije bostezando mientras me acostaba.

–No lo sé –se miró las manos –Todo parecía ir tan bien.

Lo mire sin entender sin saber a qué se refería.

– ¿De qué hablas? –pregunte.

–Charlie –respondió mirándome por un momento –Estaba bien, realmente pensé que estaba volviendo hacer la persona que era antes, pero me equivoqué. –se pasó las manos por el cabello frustrado –No sé qué hacer para ayudarla. Ella está bajo mi cuidado, mi responsabilidad –espetó.

– ¿A quién te refieres con ella? –fruncí el ceño.

Cuando iba a responderme apareció Erick junto con Alejandro para invitarnos a jugar un partido de futbol. Olvidando el tema, aceptamos y fuimos a la cancha. Era divertido cuando nos tocaba en equipos separados. Nos gusta competir entre nosotros, así como lo hacíamos mi hermano y yo. Me preguntaba dónde estaría James a esta hora, lo más seguro es que estaría en clases. Aun faltaba para que terminaran sus clases. Me encogí de hombros, y seguí con el partido.

Después de casi una hora, con la victoria de equipo de Colton me fui hacia los banquillos a tomar un poco de agua y secaba mi sudor.

– ¡Wells! –escuche un grito sobresaltándome haciendo que derramara un poco de agua encima de mi camisa.

Mire por donde había provenido el grito encontrándome con un tipo fornido avanzando a grandes zancadas hasta Colton. Limpiando el desastre camine hacia mi amigo, el tipo parecia que quería matarlo.

–Mierda –escuche la maldición de Colton cuando me acerque a él.

– ¿Qué pasa? –lo mire preocupado – ¿Quién es él?

–Jadeen, maldición –gruño –Tengo todo el maldito día buscándote –escupió cabreado. Alce una ceja mirándolo mal.

¿Quién se suponía que era este para hablarle de esa forma a Colton?

–Estaba aquí, como siempre –respondió.

–Ya me di cuenta –ironizo el tipo – ¿Donde esta Charlie? –pregunto o siseo.

Cada vez entendía menos sobre lo que estaba pasando.

– ¿Dónde está? –Colton frunció el ceño –Esta en el departamento. Ella estaba ahí cuando me vine a la universidad.

–No lo está –gruño. Respiro hondo como si estuviera conteniéndose

«Llevo más de una semana queriendo hablar con ella. –se masajeo la sien –Pero la busco y no la encuentro. Nadie sabe dónde o con quien está –expreso apretando los puños fuertemente levantando la mirada de nuevo hacia mi amigo –Es mi hermana de quien estamos hablando –espera... ¿Qué? ¿Charlie es una mujer? –La niña que le rompieron el corazón. A la que vi cambiando de una manera tan horrible que me hizo sentir de una manera tan de miserable por no saber qué hacer –cerro los ojos –Solo quiero verla y saber que está bien.»

–Lo sé, Drew –desvió la mirada –Yo también quiero que todo vuelva hacer como antes, pero lamentablemente es imposible –se pasó las manos por el cabello –Es mi prima y quiero protegerla de todo y todos que quieran dañarla.

–Tienes que buscarla Colton, estaba bajo tu cuidado –dictamino serio. –Necesito verla, pasado mañana me regreso a Mánchester y quiero ver que todo esté en orden con ella –alce mis cejas cada vez más sorprendido con todo lo que me acaba de enterar.

– ¿Te vas? –pregunto pasando las manos por su rostro. Este asintió –Ya terminaron mis clases –murmuro –Voy a buscarla hasta bajo de las piedras si es necesario –afirmo – ¿Le has dicho algo de esto a Elliot o a Marie? –pregunto un poco preocupado.

–No –negó –No lo creo conveniente.

–Bien –suspiro cansado —No sería buena idea preocupar a Elliot o peor a Marie.

–Voy a terminar ahora las maletas para que mamá no sospeche que está pasando algo con mi hermana –dijo –Igual voy a verte más tarde.

–Está bien, tranquilo.

–Cuento contigo –Colton asintió –Me voy –se despido abrazándolo haciendo típico despido de chicos.

Relamí mis labios recapitulando todo lo que había sucedió. Charlie, el que yo creí que era el primo varón de mi amigo no era el primo sino su prima. Mujer. Demonios, sí que estaba sordo y eso que era joven. Ahora entendía porque me miraba raro cada vez que decía primo.

–Prima –dije silbando a su lado. Él se giró a verme con el ceño fruncido mirando si entender. –Ha sido prima y no primo.

–Nunca te dije lo contrario –levanto una ceja –Se llama Charlotte, pero le decimos Charlie de cariño –rodo lo ojos.

Que idiota que era.










 

11 de septiembre, 2015

Bradley

Ya eran más de la una de la mañana y no encontrábamos por ningún lado a su prima. A Charlie. Demonios, que habrá sucedido con ella. En este momento nos encontrábamos revisando uno de los tanto bar de Londres a ver si se encontraba aquí, pero nada.

Hice una mueca, con solo recordar nuestro encuentro con el hermano de ella me hacía tener escalofríos. El realmente quería asesinara a cualquier que se pusiera en camino. Como no habíamos encontrado por ningún sitio a su hermana él se puso como una furia y nos mandó o mejor dicho ordeno que buscáramos por un lado de Londres mientras que él lo hacía por el otro.

Cuando ya me estaba dando por vencido entramos al último bar que encontramos en esta zona. Colton comenzó a mirar a su alrededor mientras que yo iba a los baños por si acaso no estaba por ahí. Llamando por su nombre entre a cada baño, pero nada. No estaba.