Una historia que contar

EVA

En el camino, Ellie me contó cuando conoció a Marcos. Me dijo que eran amigos desde pequeños y se llevan my bien. Eran inseparables hasta que ella se mudo a Madrid. Ahí la relación se distancio. Ella se mudo porque su padre encontro un trabajo mejor, aquí no les iba muy bien que digamos.

-¿Has venido desde Madrid hasta aquí para vistarlo?- No es que Madrid este aqui a la veulta. Había mas de 7h en coche.

-Sí. Bueno, era para visitarlo y también para visitar a mi abuelo que está enfermo- Vale lo de su abuelo lo entiendo. La verdad es que me dio un poco de celos que vendria desde my lejos para visitarlo

-No me gusta ni nada, eh- Me puse roja como un tomate de la vergüenza .Joder, la acabo de conocer y ya sabe que me gusta

-¿Qué? Si a mi me da igual que te gsute o no- Vaya mentras mas obvia. Tengo que mejorar en eso

-Eva se te nota qe estas pilladísima por él- Ya no servía mentir

-Sí. No se lo digas porfa- Dudo que se lo diga, pero como son muy amigos

-Tranqui, no sel o voy a decir. ¿Te has dado cueta?- No sabía de que me hablaba

-¿De qué?

-El también esta interesado en ti- Os acordáis de lo de ilusionarme, que no me gusta

-Calro que no. Tiene a muchas de chicas detrás. Tiene a todas del curso. No va a dejarlas todas para elegirme a mí

-Oye,no te desprecies, eres my puapa. Creo que deberias dar tu el primer paso, así no vas conseguir nada con él-- Ojalá fuera tan facil como dice

-No puedo-Iba a consefar lo peor que me podia haber pasado

-¿Porqué?- Quedaba poco para llegar casa, así que me sente en un banco que había cerca

-En mi pueblo anterior me gustaba mucho un chico. Era majo conmigo, también era como el más popular. En resumen, me trataba genial y yo me ilusioné y le dije que me gustaba a través de una carta. A mí me daba vergüenza decírselo a la cara, por eso le escribí una carta anónima. Y ahí ocurrió todo. ¿Sabes? No solo me humilló él, sino también mi amiga. Mi amiga sabía que yo le escribí la carta, entonces cuando el chico la encontró y la leyó, se empezó a reír. Le parecía muy cursi lo que decía. Cuando me di cuenta de eso decidí no decir que era yo la que escribió la carta, pero mi amiga se lo dijo delante de todo el mundo. Imagínate, todo el mundo se enteró de que yo escribí la carta. El chico hizo copias de la carta y las pegó por todo el patio. Él y mi amiga se pasaron toda una semana riendo de mí, por eso no me atrevo a confesarle a Marcos lo que siento por él; tengo miedo a que vuelva a pasar lo mismo o algo parecido. Omití la parte en la que mi amiga recortó una foto mía de la del grupo declase y la pegó por todo el cole. Como era una gorda, todos se rieron de mí.

-Vaya personas. Una amiga de mierda y del chico, ya ni hablar.

-No sé por qué te conté esto. -La única persona que lo sabe es Angy, pero como ya no hablamos, no le conté nada relacionado con Marcos.

-Yo tampoco sé, pero como ya somos amigas, me puedes contar todo lo que quieras y confiar en mí. —Me alegraba tener a una nueva amiga, ahora que estaba sola. —¿Amigas?

-Sí, amigas.