Tú decides dónde está el límite

Capítulo 1

Siempre he pensado que debes perseguir tus sueños, que no debes rendirte por nada, porque si lo quieres y luchas por ello llegarás donde tu quieras. Siempre, también he dicho que eres tu quién pone los límites, no tus familiares ni tus amigos, tan solo tu eres el culpable de lo bueno y lo malo que pasa en tu vida, aunque muchas veces queramos culpar a los otros por miedo ha aceptar que no somos perfectos, miedo aceptar que nos equivocamos.

Es algo que llevo pensando mucho tiempo, pero cuando se trata de “aplicarlo” a mi vida es todo lo contrario. Mi sueño siempre ha sido cantar y ahora que ha llegado el momento, ¿que debería hacer?, ¿hacerle caso a mi familia? , ¿o seguir mi sueño?.

***

Mi nombre es Paula. Vivo en Francia, en Touluse. Tengo 18 años y quiero estudiar en “le Conservatoire de Paris”, pero mi familia no me apoya, mi madre dice que debo ser una señorita y una buena ama de casa, mi padre que es perder el tiempo y mi abuela que debería centrarme en encontrar un buen marido para que pueda vivir una buena vida. Mi hermana, que ya tiene veinticinco años me ha dicho que lo mejor que puedo hacer es no estudiar y hacerle caso a mi madre y a mi abuela, y a veces pienso que quizás tenga razón, que quizás lo que ella ha hecho sea lo más sencillo, pero no quiero ser como ella, a ella la miras y ves que no es feliz, yo no quiero acabar así. Quiero casarme pero porque de verdad encuentre a alguien que me quiera y al que yo quiera no porque me haga vivir una buena vida, a veces pienso que mi hermana se fue por el camino más sencillo y yo creo que es el peor camino que puedes escoger, mi bisabuela siempre me decía: “Vale la pena luchar, por lo que vale la pena tener, petite”.

- ¿En que piensas, Paula? - mi abuela, siempre me pregunta lo mismo

- En que voy a hacer ahora que me he graduado – a ver que opina – yo sigo queriendo estudiar canto, es mi sueño

- Bueno chérie, ya sabes lo que opino yo al respeto – siempre decía lo mismo – pero, estas segura de que quieres estudiar eso?

- Claro, usted no hubiera querido hacer lo que quisiese, quiero decir, no hubiera querido estudiar algo que le gustara? - su cara decía de todo

- Pero si hubiera estudiado no estarías tu hoy aquí – tiene razón – así que se podría decir que no me arrepiento

-Ya pero imagine conseguir su sueño, no le hubiera gustado? - en sus ojos podías ver rabia, tristeza.

- ¡Basta! Ya te he dicho que no me arrepiento de nada, no me intentes convencer

- Pardon Madame – no sabía que se iba a poner así

No sabía que hacer, pero el tiempo corría en mi contra debía decidirme cuanto antes.

- Maman, ¿te puedo decir una cosa?

- Sí, claro – quería decir algo pero no me salían las palabras

- Que te gustaría que estudiara? - quizás decía algo coherente

- Mon amour, ya sabes que yo no quiero que estudies nada – porque

- Pe… pero porque? - estaba mal, no esperaba que mi propia madre me dijera eso

- No tenemos mucho dinero, pero no es solo por eso, si no estudiaras podrías dedicar ese tiempo a buscar un buen marido y ser una buena ama de casa

- Pero yo no quiero eso, yo quiero estudiar ya habrá tiempo para buscar un marido y casarme, no hay prisa – sabía que estas palabras a ella le dolerían, pero era lo que yo sentía.

- Esta bien, si quieres estudiar, nosotros no te lo vamos a pagar

- ¿¡¿Cómo?!?, ¿no lo dirás en serio? - de repente desapareció, ya no estaba allí era como si se hubiera esfumado.



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En el texto hay: amor, amor adolescente, canto

Editado: 22.02.2019

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