Capítulo 11

Marzo

Emma 

Las últimas semanas fueron caóticas, pero con el pasar de los días, las cosas se calmaron. Por mi paz mental, decidí que era mejor descansar de las redes sociales. Me conozco, sé que si no lo hacía estaría ahora lamentándose y sintiéndome  avergonzada por mi reacción. 

Al menos pude aclarar las cosas con Alexandro y espero que después del concierto de mañana no lo vuelva a ver más, y así evitar nuevos conflictos.

Hoy, viernes me lo tomo como un día para relajarme y dejar de pensar en él. Aprovecho para hacer las cosas que me gustan, y  las que no.

Mejor un poco de the weeknd, para subir los ánimos

-odio limpiar -suspiro frustrada.- max, tengo que enseñarte a limpiar tus porquerías, así no se puede. Esta relación tiene que ser  50 /50. 

Igual y parezco imbécil hablando con un perro qué solo se dedica a ignorarme. Pero no puedo ignorar la presencia de tanta preciosura. Además Sarah ya salió a quién sabe dónde, casi podría jurar que ya empezó la fiesta previa al concierto.

Mi habitación es de buen tamaño, pero tengo muchas cosas y la hace ver desordenada. Claro, no me puedo quejar si lo que más me gusta de esta es que tiene una increíble ventana de esquina sobre mi cama. (y por la que nos peleamos con mi querida amiga)

Puedes ver los otros edificios con todas las luces de noche que te hacen replantearte la vida.

Y estos son los momentos en que se van mis ánimos.

No puedo evitar pensar en todos los recuerdos perdidos, y las cosas que he hecho en el pasado. Cosas qué mi cerebro se empeñó en bloquear luego del accidente.

-Tal vez, antes de eso mi vida era divertida o  tal vez tuve un amor y no lo recuerdo. ¿Tu qué piensas? - Max simplemente inclina su cabeza de lado, y solo se queda mirando. Lo que interpretó como un “Nadie te cree eso, si ni sales.”

-si mejor no digas nada. - me acerco a él y le rascó detrás de las orejas antes de empezar a limpiar 

***

-¡emm! -grita Sarah desde su habitación.

-que?! -Estaba terminando de hacerme un semi recogido cuando Sarah me llamó. 

-¡ven!

-¿Puedes hacerme el delineado? -pregunta cuando cruzó la puerta de su habitación, completamente desordenada por toda la ropa que se estuvo probando hace una hora.

Yo había optado por algo casual, pero lindo.

— Dioss,  ¿ Y para eso gritas como loca?

-sip - resaltando el final para parecer tierna.

-siéntate y dame el delineador. - me acerco y hago el dichoso delineado.  No salió  tan mal, debo decir. Tener dotes artísticos sirve para el maquillaje.

-Faltan 15 para las 10 así que apresúrate, no quiero tener que pelearme con fans en la entrada. 

- me recordaste que falta una hora para tu cumpleaños, si - lo dice levantándose, para dirigirse a su armario y sacar su bolso.

- si, que divertido. - respondo con un falso entusiasmo. Aunque en realidad lo único triste es que Denise no pudo acompañarnos hoy, tuvo unos problemas en casa y prefiere no hostigarla con preguntas sobre qué sucedió.

El viaje en el metro a esta hora suele ser algo solitario. Pero los días como hoy, sábado y por el concierto, está desbordando. 

Puedo jurar que la mayoría de estás chicas, se dirigen al mismo lugar que nosotras.

Y ahora que las veo, pienso en lo mucho que están desencajados. Ellas utilizan ropas oscuras y reveladoras.

Tiene sentido es una banda de rock, no un picnic 

Tu calla, que voy preciosa 

Claro está que ese tipo de vestimenta no es mi mismo estilo. Yo opté por una falda verde clara pegada al cuerpo con un estampado floreado muy delicado, y una chaqueta negra de jeans y una camiseta del mismo color.

Pero no me arrepiento, me gusta mucho y va a ser mi cumpleaños, quiero sentirme bonita.

-Toma, debes poner el collar de vip. Pasaremos por otra puerta, sígueme. - me lo pasó y me lo colocó alrededor del cuello.

-Prefiero no preguntar cómo es que lo conseguiste, o como sabes por dónde ahí que pasar.

-si estás tranquila, ya verás que será el mejor cumpleaños que hayas tenido hasta ahora.

Nos acercamos a una puerta grande, que hasta parece que es del servicio, sino fuera por el gigante hombre que está a su lado con una libreta en su mano.

-nombres -habla el orangután con voz muy gruesa, cuando nos situamos frente a él.

Sarah le dice nuestros nombres y pasamos por un pasillo grande, que parece estar detrás del escenario.

-Emm, hay una cosa que no te comente antes.- ya por el tono que utilizo, tengo miedo de lo que puede pasar. - la cosa está así, primero vamos a entrar al Backstage donde esta la banda. -habla rápido, pero lo entendí todo perfectamente y la voy a matar.

- Estás loca o te caíste y golpeaste cuando eras una cría. Inmediatamente me llevas a mi asiento, porque esto no entraba en el trato.