Tú, Yo y los Besos

20-Azul

¡Hoy es el gran día! Los árboles cantan, bailan, se mueven…

¡¡¡Esperen...!!! ¿Eso es normal?

A menos que me haya metido en un ropero y haya aterrizado en Narnia, creo que estoy bastante alejada de la realidad.

Hmmm va a ser que no estuvo bien ponerle ron al café (1) pero entiéndanme; de ese modo maté dos pájaros de un tiro, o mejor dicho… de un “trago”

Necesitaba estar despierta y relajada; me pasé tooooda la noche perfeccionando mi maqueta para el trabajo de diseño pero; como mujer previsora, sabiendo que la cafeína me pondría a temblar como chiguagua, pues, lo mezclé con ron para relajarme; en fin, que ahora no sé si quien tiembla soy yo o los árboles…

¡¡Pero no importa!! mi maqueta es… perfecta, no puedo dejar de mirarla...

— ¡¡A que es super linda, Ana!!

Respuesta: nada…

Vaya, solo a mí se me ocurre preguntarle opinión a la frígida de mi compañera de cuarto, esa niñita necesita ser menos reprimida y estirada...

¿Por qué me mira de ese modo?

Upsi, parece que hablé en voz alta…

Mejor me voy marchando; ven con Mamá, preciosa Maqueta perfecta…

***

10 minutos después, el corazón me martillea en las sienes pero al menos todo ha dejado de dar vueltas, la boca espesa me sabe a café y alcohol… “gástricamente procesado”.

Siento un horrible pinchazo de dolor en el costado y justo ahora boqueo como pez león fuera del agua intentando recuperarme de la carrera.

Sin embargo, todo/sigue/estando/perfecto… sí…

Que posiblemente me haya ganado de enemigo al chico más popular de la Universidad no es nada con las puertas que me abrirá el éxito de mi “perfecta maqueta”

No me juzguen, no es mi culpa que sus zapatos estuvieran justo al lado, y bien visto, culpa suya por tener ese intenso olor a cloro...

No fue a propósito, en serio; el olor a cloro me revolvió el estómago y yo claro que no iba a vomitar arriba de mi “sublime maqueta” así que, lamentablemente, los pies de Adán Durán (la estrella del equipo de natación de la escuela) se pusieron en la trayectoria de mi… rocío de gallo (1) “procesado”

No hay que ser muy genio para saber que estaba en problemas, así que corrí por la salvación de mi alma, que diga, de mi maqueta, que está…

¡¡Oh no!! ¡¡Ya no está perfecta!!

Tranquila, Azul, tienes hasta las 11 para entregarla, estás a tiempo… solo tienes que ir a la fábrica de ladrillos y conseguir el pequeñísimo, pero importante, trocito que le falta a la cerca de mi parque temático.

Sí, puedo hacerlo.

***

49 minutos después.

Vale, ya he empezado a asustarme.

¿Habré pasado hoy por debajo de una escalera? ¿Roto algún espejo?

De camino a la fábrica se me rompió el zapato por lo que ahora soy la loca de los pies descalzos —era eso o cojear hasta la escuela —vaya, quizá me hubieran dado un asiento y a la vuelta no hubiera besado el piso de la guagua con mis nalgas por un frenazo del chofer para no atropellar a un gato ¡¡que el muy maldito, de seguro era negro!!

No quiero averiguarlo, pero siento un leve olor a popó de pájaro y algo un poco… húmedo en el centro de mi cabeza

¡¡Esto parece una pésima comedia!!

Pero yo, como Bruce Lee, saldré adelante; porque mi maqueta ahora sí está impecable.

Toma ya, Karma bendito, no puedes conmigo, Soy “Kim Posible”

Miro mi reloj, 10:50…  ¡¡he llegado justo a tiempo!! Ya puedo ver la oficina del profesor de Diseño…

Solo 50 pasos, 30…

— ¡¡¡Nooooo!!!

Díganme por favor que eso que veo alejándose por los aires no es mi maquetaaaa.

Mis nalgas otra vez contra el suelo me confirman que esto no es un sueño...

— ¡¡¡Mi bebé!!! —sí, estoy gritando en medio del pasillo ¡¿Y qué?!

Me levanto rápidamente y corro esperando que hoy sea el día en el que descubra que algo allá arriba existe y reciba un milagro; pero no, mi maqueta está… muertaaaa.

No, no no, esto no puede estar pasándome, esto no puede ser cierto

Los alumnos han hecho un círculo a mi alrededor y me arde la cara de vergüenza, al menos ninguno se está riendo. Observo a Dania y a Celia mirarme preocupadas pero no se acercan, hasta Pablo se ha quedado pasmado...

Vaya, les agradezco que no se rían; pero me molesta aún más su mirada de condescendencia...

Esperen… ¿cómo me caí?

Miro a mi alrededor ¡¡¡y juro que mi sangre se me va volviendo fuego!!!

Tiene que haber sido él; pero ay, de que lo mato y no lo pago ¡¡¡lo hago!!!

—¡¡Tú!! ¡¡Adán Durán!! Estás muertooo

Veo la cara de perplejidad en "Adán pos-manzana" mientras corro hacia él como demonio de Tasmania.

Hace bien en salir huyendo, Ya casi lo alc…

Pero ¿qué? ¿Por qué mis pies no se están moviendo? ¿Por qué lo que veo ahora es un trasero?

Alguien me ha levantado en vuelo y me está sacando del docente sobre su hombro.

Empiezo a chillar y a patalear hasta que… ¡¡el muy… hijo de su madre me golpea las pompis!!

—¡¡Oye, tú!! ¡¡Mal nacido!! —empiezo a gritar y a removerme hasta que me suelta.

Por el forcejeo termino sentada en el piso y sí, bingo, todos los estudiantes ahora sí que se están riendo.

Mateo está agachado frente a mí, rojo de rabia

— ¡¡Azul!! Nadie te puso un traspiés, resbalaste porque acababan de limpiar; pero tú, por estar mirando tu maqueta no viste el letrero y pasaste “descalza” por el medio del pasillo —sisea entre dientes remarcando mi condición de “Nemesia la de los pies descalzos”(2)

De repente todo se me viene encima. Oh no, mi trabajo, mi maqueta, la vergüenza, todos riendo, Martinez…

Me zafo arisca del agarre de Mateo cuando vuelve luego de recoger los trozos de mi maqueta, no quiero verlo, no quiero que me vea…

Necesito resolverlo, tengo que ser fuerte… yo sola puedo, no me ganará ni Martínez, ni Dania, ni Celia, ni Mateo...

— Por favor, ¿podrías dejar de ser tan chula al menos una vez? Déjame ayudarte de una maldita vez; porque atiende, lo voy a hacer a las malas o a las buenas... Tú eliges.




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