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La mañana siguiente Vega y Remus estaban en el Gran Comedor. Remus le explicaba el mito griego más reciente que Vega había leído; hablaba sobre Artemisa y la constelación de Orión

—Fue un gran trauma —Dijo Vega— Durante todo el relato imaginé a mi papá

Le dieron escalofríos y Remus rió. Vega le robó un beso casto rápido

El Gran Comedor había sido testigo de varios besos de ese tipo desde que el par se apareció por ahí y a pesar de que al inicio los había sorprendido, no era algo que nadie esperaba, más bien, al contrario

—Buenos días —Dijo Remus que aunque se veía cansado y enfermo, también se veía feliz

Los 3 chicos restantes del grupo saludaron con la mano. Vega y Remus apostaron cuánto tardaría Sirius en volver a hablar por lo que no le dirían que la hoja de mandrágora de Vega había terminado en la boca de Remus

—Potter —Llamó Evans y todos en la mesa lograron ver la mirada de sufrimiento en los ojos de su amigo; volteó a verla, pero no le dijo nada— Te estoy hablando

James sufría y de verdad lo hacía pero no dijo palabra alguna

—Como sea, te vengo a dar esto —Le dio un pergamino— Lo manda el capitán de Quidditch, Black —Llamó a Vega, porque Lily Evans no era la mayor fan de Vega Black, en realidad Lily Evans no era la mayor fan de ninguno en el grupo de amigos— Este es para ti

—Gracias —Se le salió a Vega

—Vega! —Reclamó Remus pero cuando se dio cuenta ya era tarde

—Vega Walburga Black —Soltaron los otros tres, indignados

—Tampoco me tienen que decir tan feo —Dijo ella con referencia a su segundo nombre, que al igual que Sirius, tenía la desgracia de compartir con su mamá

Los tres chicos escupieron la hoja de mandrágora

—Ahora tendremos que esperar otra luna llena —Se quejó Sirius

—No grites asno —Le dijo su hermana dándole un golpe en el brazo

—No estoy gritando burra —Le replicó él regresando el golpe

Remus se azotó ligeramente contra la mesa

—Un minuto de paz Blacks, es todo lo que les pido —Dijo con la cabeza entre sus brazos

—Perdón Rem —Murmuraron los dos

—Buena forma de callarlos, ya sabemos quién va a controlar a la familia cuando tú y Vega se casen

Ambos chicos se pusieron rojos y los otros tres rieron con ganas

—Uhh —Dijo Vega revisando su mochila— Olvidé mi tarea de pociones, voy por ella, los veo en la clase

Se levantó de la mesa y se inclinó a darle un beso casto a Remus, los tres amigos abrieron los ojos tanto como pudieron, al igual que la boca

—Vega!!! —Llamó gritando James, que fue el primero en salir del trance— Vega!!! —Vega casi llegaba a la salida del comedor— WALBURGA —Le gritó mientras se paraba y corría tras ella; logró alcanzarla y la cargó sobre su hombro

—Charlus, te juro que como no me bajes te suelto un maleficio

—Acabas de besar a Remus

—Ya se

James la dejó sentada de nuevo, donde saludo con una sonrisa a Remus; James movió a sus otros dos amigos y los hizo reaccionar

—Besaste a mi hermanita —Dijo Sirius

—En realidad ella me besó

—Soy la mayor

Replicaron Remus y Vega al mismo tiempo

—Qué pasó? Cuándo? Cómo? —Comenzó a interrogar James

—Chicos, enserio, tengo que ir por mi tarea

—Yo voy por ella, pero cuando regresé me cuentan todo —Se ofreció Peter— Esta en tu cama?

Asintió y Peter salió del gran comedor

—Pues no hagan como que se sorprenden —Dijo Vega— Todo el mundo sabía

—Entonces... Están juntos? —Preguntó Sirius

—Supongo, algo así —Dijo Remus

Cuando Sirius y James se acomodaron en la mesa, Remus y Vega supieron que tendrían que contar la historia con lujo de detalles

Cuando terminaron, ya iban tarde para pociones

—Si llegamos tarde, les juro que los castro —Amenazó Remus

—A mi no me puedes castrar —Observó Vega

—No te amenazaba a ti Vega, la cosa era contra los chismosos de tus hermanos

Apresuraron el paso y pronto estaban corriendo; para su suerte, llegaron a tiempo a clase, donde cuando terminara, robarían los ingredientes para hacer la poción para la siguiente luna llena, y luego esperarían la siguiente tormenta eléctrica y finalmente, serían animagos y acompañarían a Remus en sus dolorosas transformaciones

Estaban a mitad de la clase, Remus, Vega y Marlenne McKinnon eran equipo y ocupaban la mitad de la mesa, mientras que la otra mitad la ocupaban James, Sirius y Peter

—Eres un maldito Remus Lupin —Dijo Sirius Black de la nada— Por eso nunca te pusiste de mi lado en ninguna discusión, porque te gustaba mi hermana

—SIRIUS —Gritó Vega— No seas idiota, Remus nunca esta de tu lado porque nunca tienes la razón

Ambos gemelos voltearon a ver a Remus, esperando una respuesta

—Mira, siempre creo que tienes la razón —Dijo viendo a Vega, que volteó a ver a Sirius con arrogancia— Pero, no se si creo eso porque me gusta —Volteó a ver a Sirius— Ambos contentos?

Pero ambos Black, que aunque eran inteligentes intentaban encontrar la manera de ganar de las palabras de Remus y cuando no lo lograron, llegaron a la conclusión de que no serviría de nada. Parece que ambos tuvieron la misma idea y voltearon a ver a James al mismo tiempo, él comenzó a negar con la cabeza antes de que sus amigos dijeran algo

—No, no, no, no me voy a meter en eso, diganle a Peter

—Yo tampoco me meto —Dijo él— Si le doy la razón a Vega, Sirius me embruja, si le doy la razón a Sirius, Vega me embruja

Toda la clase parecía disfrutar de la escena que estaban montando, incluso los Slytherins y el profesor Slughorn. La clase entera observaba en silencio a los gemelos que parecían estar pensando en cómo resolver ese problema con las caras enfocadas en la mesa, como si fuera lo más interesante del mundo

Remus simplemente adoraba la sonrisa infantil que se colocaba en el rostro de Vega cuando estaba feliz, aunque en esa ocasión su sonrisa sería de ego, aún así quería verla sonreír, la pateó suavemente y cuando lo volteó a ver, le señaló con la mirada a Slughorn