CAPÍTULO 24

—Perdón...—levantó la vista y vi la sorpresa en sus ojos—Alma... —si, al parecer estaba igual o más sorprendido que yo 

—Ehh, no importa, la cosa es que no pasó nada malo. Ahora si me disculpas —intenté irme, pero él me agarró del brazo 

—¿Ni siquiera un "Hola ¿como estas?" o algo? —¿y a éste qué? 

—Hola Drake, hola. ¿Cómo estás? ¿Bien? Que bueno, me alegro por ti, si me disculpas quiero ir a buscarme una bebida —le dediqué mi mejor sonrisa posible, pero él seguía sin soltarme 

—Vamos Alma, no seas tosca conmigo, perdón ¿si? Sé que te lastimé y... —ah no, esto si que no, no le iba a permitir que me arruine la fiesta, así que no dejé que siguiera 

—Drake, sí es verdad, todavía no te perdono del todo, pero estoy en eso. Así qué, por favor, no me arruines la fiesta con estas cosas del diablo que harán que me ponga triste, por que de hecho la estoy pasando muy bien aquí. Si quieres, hablamos luego, otro día, no sé, pero te pido que ahora no —él soltó mi brazo, y levantó sus manos en señal de rendición 

—Epa, veo que estos meses te han cambiado para bien, ¿he?. Está bien, está bien, acepto eso sí.. Bailas conmigo, aunque sea una canción— me dedicó su sonrisa, esa en la que algún tiempo atrás me había enamorado 

—Está bien, sólo para que veas que no soy una persona rencorosa y hasta a las personas, esas como diría Paquita la del barrio "Ratas inmundas" puedo perdonar —me miró incrédulo, y cuando vio que me empecé a reír, automáticamente su cara de preocupación desapareció 

—Veo que lo gentil no se te ha ido —le sonreí 

—Jamás cariño —le guiñé el ojo y nos reímos —bien, emm tengo que ir a buscar mi bebida, porque en serio muero de sed y luego regresar con mis amigas —señalé a las chicas que estaban riendo a lo loco en una mesa 

—Ve, yo voy a buscar tú bebida —ahora yo lo miré incrédulo —¿Qué? Fuimos amigos bastante tiempo, como también hemos salido bastante tiempo, aunque lo dudes algo te conozco. Así que, jugo de frutilla ¿verdad? —le sonreí satisfecha y asentí con la cabeza

Me dirigí hacía dónde se encontraban las chicas, y estas cuando me vieron se taparon la boca y empezaron a reírse

—¿Qué sucede? —les pregunté 

—Jijiji hice algo que no te va a gustar —respondió Emma medio ebria 

—¿Qué hiciste Emma?

—Invité a mi hermano jijiji —se tapó la boca mientras se reía, parecía una niña

—¿Y qué tiene eso de malo?

—Pues que vino con la pendeja de Savana —dijo Maya y explotaron en carcajadas con Emma

Ambas señalaron hacía la mesa dónde estábamos sentadas, y ahí estaban ellos dos, besándose... creo que se estaban besando, aunque la verdad parecía que Savana se había convertido en zombie y se lo estaba comiendo. Estoy impactada por esta escena, y porque cuando estaba con Drake, no los había visto. Pero bueno, ahora tengo un poquito de asquito, iugh. Nunca me gustaron estas demostraciones de afecto en público.

Emma me agarró de la mano y me llevó hasta la mesa, pero ellos ni se percataron de nuestra presencia

—Aquí tienes Alma —dijo Drake dándome el jugo de frutilla por atrás mío. 

Quedando en una posición que pareciera que me estuviera abrazando, así que me corrí un poco

Savana y Samuel, al escuchar la voz de Drake automáticamente se separaron. Samuel me miraba confundido, y Savana puedo jurar de que no se separaron, que ella lo empujó a él y hasta se separó un poco de su asiento

—¿Drake? —preguntó Savana

La mirada de Samuel pasó de confundido a furioso. Lo que no sé, es si es conmigo o con ella, ooo también está la posibilidad de que sea con él. Aunque que va, ¿conmigo por qué? Seguramente con ella, por lo que acaba de hacer y ahora le cuadraba todo.

—Ezperem ezperem... ¿Tu ex.. Drake? —me preguntó Emma a lo que yo asentí con la cabeza. Ahora la mirada furiosa de Samuel, estaba en mi.

Emma se acercó a Drake y le dio una cachetada, todos nos quedamos sorprendidos, exceptuando Maya, que grito "Eso Emma, ¡dale con la silla!"

—Essso, ess por tooodoooos hip —genial, ya le dio hipo a Emma. Se tapó la boca —perdonen mi hip, ¿en dónde me quede? Ah si sí, por todo el daño que le ocssiionaste a essta niña —y me señaló— passso musho tiempo, lo sé, pero essso no quita que hayas sido un canasha. ¿Okkk? No lo vuelvas a hacer. Besito —y le tiró un beso sonoro. 

Mientras que Drake aún con su mano en la cara, asintió con la cabeza

—Estem, ¿vamos a bailar? —me preguntó Drake