CAP 6 UNA VISITA INESPERADA

Van a pensar que no me dolió la traición y estoy feliz de haber descubierto el engaño para librarme del compromiso,pero no todo es así, siento que el mundo esta en mi contra, y todos conspiran a mi alrededor, primero el compromiso por conveniencia, después la traición y humillación por parte de mi supuesto prometido y ahora lastiman a mi amigo de la peor manera, es como si el destino no soportara verme feliz a mi y a los que me rodean y por ello le gustara complicar mi vida, siento que no puedo mas, siento un vacío en el pecho por el simple hecho de saber que mi amigo sufre y yo no puedo hacer algo para ayudarlo,aparte de dejarlo estar solo, lo único que sé es que tiene heridas que sanar y a veces es mejor vivir circunstancias como estas en soledad, lejos del rechazo y los comentarios desagradables que nunca faltan, solo espero que el sol salga antes de que la tormenta se agrande, de lo contrario mi vida no  será mas que apariencias,sonrisas falsas y engaños.

-Me sentia tan perdida y ahogada por los recientes acontecimientos que no me di cuenta cuando llamaron a la puerta,solo hasta que golparon mas fuerte de lo normal,cai en cuenta y repondi inmediatamente,pues era de mala educacion hacer esperar a los demas.

-Toc, toc.Princesa,soy Lauren,¿puedo entrar?tocaron la puerta antes de entrar

-Buenos días princesa Arianne, vine a traerle el desayuno y a avisarle que alguien muy importante la espera en el jardín-dijo una de mis damas de compañía

-Gracias, dile que espere, que en un momento voy

Lo cierto era que en estos momentos no quería ver a nadie, a excepción de Luc,todas mis esperanzas de que el fuera aquel misterioso invitado se disolvieron en cuanto Lauren ,mi dama de compañía entró, pues Luc nunca me esperaba afuera, sino venía a buscarme, lo cual quería decir que  con quienquiera que fuera mi invitado sorpresa tendría que aparentar estar bien, solo por no demostrar debilidad ante alguien exterior de la realeza, solo esperaba que aquel invitado no perturbara mi vida aún más.-pensé en voz alta, suspirando al mismo tiempo en que terminaba de comer.

Cuando llegué al jardín me encontré con que mi invitado sorpresa era Madeline, mi mejor amigo después de Luc, nos conocemos desde la primaria, pues fuimos juntas a la misma escuela y desde ese día la llamo Maddie y ella a mi Ari, pues nos hace sentir especial llamarnos la una a la otra con apodos. Ella es hija del Duque Lebetti, ella era muy extrovertida y bonita, es alta, cuerpo atlético, cabello castaño claro y largo, ojos como la miel, tez clara, le encanta leer y es muy enamoradiza, cosa que siempre le había costado muy caro, pues la mayoría de veces que estaba en una relación, siempre ella era la que salía lastimada, y por la cara que traía pude suponer que esta no era la excepción.

-Hola, Ari, ¿cómo te encuentras en este bello día? -Dijo Maddie, con una sonrisa fingida

-Maddie, que gusto verte, cuando me dijeron que había llegado alguien pensé que era uno de los molestos nobles que tratan de fingir amabilidad, para volverse mis amigos, pero claramente era una visita muy agradable-dije con una honesta sonrisa. -Pero cuéntame, ¿a qué debo esta grandiosa visita?

-Bueno la verdad, es que ayer vi a Luc muy triste en un parque y cuando le trate de hablar solo me ignoro, y me dijo que quería estar solo y como su prima me preocupo, así que vine a ti, porque me duele verlo así, tú sabes que lo quiero como un hermano y no me gusta verlo así.

-Bueno Maddie, aunque sé que no tengo el derecho de contarte lo que paso, y que puede que Luc se moleste por hacerlo, tengo que hacerlo, porque desde hace días que no lo veo y siento que debemos apoyarlo, para sacarlo del abismo profundo en el que se estancó-Dije y seguidamente le Conte todo lo ocurrido en aquel baile.

Después de hacerlo, Maddie quedo en shock, pues no sabía nada de los problemas que había tenido recientemente Luc, y enterarse de esta forma la ponía aún peor, puesto que lo que ella quería era que tuviera un poco de confianza en ella, ya que eran familia y ella lo apreciaba como a un hermano.

-Ay Ari, y ¿ahora que vamos a hacer?

-Bueno, pues seguir adelante y apoyarlo para sacarlo de esta situación, solo espero que no vuelva con esa perra de Amy, porque si lo hace la estaría poniendo delante de su amor propio y salud mental

-Ay, pues ojala no, porque no hay nada mejor que quererse y amarse a sí mismo, y sobre todo solucionando y parando las cosas a tiempo, antes de sumirse en una profunda oscuridad y desvanecerse en olvido y perder la esencia de nuestro ser.

Después de la charla sobre Luc, nos pusimos al corriente sobre nuestra vida, pues hacia semanas no hablábamos y  no sabíamos nada la una de la otra, luego tomamos el té y ella se marchó, sin embargo me dejo con una intranquilidad en mi corazón y con una idea en mente, visitar a Luc a pesar de que necesitara estar solo, porque a veces era mejor interferir que quedarse sentado viendo caer en desgracia a tus seres queridos y eso era lo que iba a hacer.