Capítulo 24. No quería dañar su imagen

Cristal al ver aquel pueblito muy pintoresco le gustó mucho, además la gente todos la querían saludar, cosa que eso la sorprendió un poco, ya que ella no era ninguna figura pública y tampoco era conocida en ese pueblo, pues era la primera vez que lo visitaba desde que había llegado.

Pero luego las chicas le comentaron, que la gente la trataba de esa forma, porque sus abuelos eran muy queridos en aquel pueblo, ya que ellos los habían ayudado mucho, y por ese motivo la saludaban con mucho cariño, ya que ella era su nieta.

Igual ella les devolvía el saludo a todos, como todo un político en campaña, y con este pensamiento se comenzó a reír un poco, y lo único diferente es que ella sí los saludaba desde el fondo de su corazón, no como aquellos políticos que solo los saludaban porque querían sus votos.

Después de saludar a toda la gente que se le presentaba por el camino, se encontró con Raúl. Ella de inmediato lo saludó con un beso en la mejilla y él la invitó para que se tomaran algo. Pero Cristal, le dijo que sería para otra ocasión, ya que andaba acompañada y al mismo tiempo les señalaba a las chicas que habían salido con ella.

Raúl, al ver a las otras jóvenes, las saludó y luego le dijo: no hay problema, vamos todos y nos tomamos algo, entre más gente mejor, ¿no creen?

Luego de eso preguntó ¿son tus amigas de la ciudad?

Cristal le respondió, con un no, ellas son las chicas que trabajan en la hacienda, enseguida dijo, donde vivía antes tenía una sola amiga, y de inmediato pensó en Paula que para ella.

La cuál sería su única amiga y la que más la había ayudado en su momento, y desde que se había ido con sus abuelos, solo la había llamado una sola vez, e inmediatamente se dijo que al día siguiente la llamaría para saber cómo estaba, y así mismo preguntarle si quería ir a pasar sus vacaciones en la hacienda.

Después de haber reflexionado en esto, escucho a Raúl, que le preguntaba: ¿Sabes por qué, desde que te conocí, me caíste tan bien?

Ella negó con su cabeza, y este de inmediato le dijo, por tu sencillez, eres una persona que no te importa las condiciones sociales de la gente y a todos los tratas por igual.

Ah, sí, le contesto cristal, para seguir diciendo, y tú cómo te diste cuenta de que era una persona sencilla, si no me conoces lo suficiente.

Raúl le respondió, casi de inmediato, la forma en que abandonaste la fiesta el día de tu presentación, ya que no soportaba la hipocresía de la gente. Además, mira, hoy saliste con el servicio de la casa paseándote por todo el pueblo, como si fuesen las mejores amigas, y créeme que eso no lo hace cualquier chica y menos una que venga de una familia como la tuya.

Cristal le dijo, pero ellas son mis amigas, y luego le dijo, por qué no iría a salir con ellas, si son personas como tú, o como yo, y hasta mejores que nosotros dos.

Una de las chicas que los estaba escuchando, de inmediato le dijo: "gracias señorita, por tratarnos como nos trata y gracias, por considerarnos sus verdaderas amigas, para nosotras usted también es nuestra amiga y siempre puede contar con nosotras, para lo que necesite".

Basta de charla y mejor vamos a tomarnos una cerveza que en este pueblo hace calor, comentó Raúl, y de inmediato se fueron a un bar a tomársela y apenas entraron se encontraron con, Mateo, Viviana, pilar y un amigo de Mateo, el cual le habían presentado en su fiesta, pero no recordaba su nombre.

Raúl, cuando los miró, le preguntó a Cristal ¿no te importa que Mateo salga con otra mujer?

Ella en ese momento pensó, porque será que la gente piensa que a mí me importa que Mateo esté con otra, si fui yo que casi lo obligue a que estuviera con Viviana, luego se dio cuenta de que no le había respondido y le contestó con un, ¡No!

Cristal, como Raúl, le había hecho esa pregunta. Le quería preguntar, sobre lo de Pilar con su padre, luego recapacitó y se dijo: —Desde cuándo te gusta tanto un chisme, para meterte en la vida privada de los demás.

Por el lado de Mateo, cuando vio que su prometida estaba en el mismo lugar, maldijo a su amigo por haberlo llevado, ya que él y Viviana no se podían ver en sitios públicos, para que su prometida no le hiciera daño a su novia, pero igual no estaba haciendo nada malo, solo estaba compartiendo con unos amigos, antes de su boda ¿cierto?

Cristal ni siquiera se le acercó, luego Raúl, le preguntó si quería ir a saludarlo, ella solo le había respondido y cómo porque, tendría que yo saludarlo.

Raúl no quiso decir nada más y se sentaron en la mesa más alejada de ellos, ya cuando estaban sentados pidieron cada una su cerveza y comenzaron a tomársela, menos Margarita, que solo estaba tomando agua, ya que le tocaba conducir.

Mateo, al ver que Cristal, no le había dicho nada, se sorprendió mucho, por el hecho de que la última vez que lo amenazó sonaba muy real y en ese momento pensó que quizás era porque ella también, había venido con un hombre y no tenía por qué hacerle reclamo esta vez, ya que él también se lo haría a ella por salir con otro hombre estando a punto de casarse.

Lo que Mateo, no sabía que en la mente de Cristal estaba que ya habían cancelado su compromiso y los que se iban a casar eran él y Viviana.

Mateo, cuando volteo su mirada a la mesa donde estaba su prometida, no le gustó mucho, ya que esta estaba muy cerca de Raúl, y estaba a punto de levantarse de su mesa para marcar territorio.