Capítulo 2

Me desperté de golpe al escuchar la alarma sonar, eran las 5 de la mañana. Me dirigí al baño a ducharme, luego me arregle e hice la mochila de las clases que me tocaban ese día, la verdad eran muy aburridas. Salí de mi casa y la parada del autobús quedaba muy cerca. Ya eran las 5:30 cuando el autobús llegó, me subí y después de 1 hora y 15 ya estaba en la universidad. 

Aún faltaban 15 minutos para mi primera clase y me puse a escuchar música recostada en el campo. Al cabo de unos minutos me levanté y dirigí a mis clases. Eran las 7 de la tarde y había quedado de verme con un dueño de un piso cerca de la universidad. 

Al llegar era un lugar agradable y muy silencioso, me había gustado el piso y entonces el dueño y yo acordamos que me mudaría el viernes en la tarde. Me despedí del dueño y dirigía al ascensor cuando escuche que alguien grito.

─¡Hola chica!, ¿Vas a vivir aquí? ─me grito con una voz un poco chillona.

─Hola, eh sí ─le sonreí.

─Soy Jenna Brekke, ¿Y tú?

Me volteé a mirarla y era pelinegra, con el cabello entre ondulado y liso, pálida, con muy pocas pecas y sus ojos eran verdes.

─Janeth Mcdowell

─Escuche que una chica se iba a mudar al edificio y moría de ganas de conocerla─me sonrió ampliamente ─¿Eres de por aquí?

─Yo no soy de aquí, vivo a 1 hora y 15 minutos.

─Lo bueno que queda algo cerca, me imagino que te tenías que levantar temprano para llegar a la universidad─aseguró enseguida

─Un poco, me urgía conseguir un piso cerca de la universidad

─¿Cuándo te mudas?

─El viernes en la tarde ─admití algo nerviosa

─Te puedes quedar en mi casa si quieres, ya está oscuro como para que vayas a la parada de autobús y aparte ya no hay autobuses saliendo a esta hora

─¿De verdad? Oh diablos, no creí que fuera tan tarde

─Te presto mi móvil para que la llames y así no se preocupe, puedes confiar en mí

Estaba algo confundida y no sabía que me diría mi madre. Jenna me invito a pasar a su piso y entre.

Llame al número de mi madre y contestó enojada, le explique que ya no había autobuses para el pueblo y después de varios regaños me dejo quedarme.

─Lo siento si escuchaste gritos de mi madre ─admití algo avergonzada.

─No te preocupes y espero que podamos ser amigas

─De hecho, ya te considero una amiga ─admití sonriendo.

Jenna recibió una llamada tras unos minutos colgó el móvil y me volteo a mirar

─Mi novio y sus amigos están festejando su triunfo en una competencia de natación y me preguntaba si querías acompañarme a su casa

─¿Yo?

─Si duende, pues quien más

─P-pero mira como estoy vestida. Aparte no se va a molestar tu novio y sus amigos por ir yo

─No Janeth de hecho les pregunté si tenían algún problema y dijeron que no. Vas genial de vestimenta, incluso mejor que yo ─admitió Jenna sonriendo.

Apenas termino de decirme eso y me hizo una seña de que la siguiera y claro que la seguí. Le seguí preguntando si de verdad no se iban a molestar porque iba a ir yo y me lo siguió negando hasta que llegó su novio.

─¡MI VIDA! ─gritó Jenna cuando rodeo con la cintura a su novio

Estaba muy sorprendida cuando se giraron hacia mí

─No los he presentado, ella es Janeth ─se dirigió a su novio y se volteó a mí rápidamente ─ Él es Math

─Un gusto Math

Pasamos los siguientes 30 minutos en la carretera hacia la casa de Math. Iba a escuchando música en mi móvil cuando de repente me dice Jenna que ya habíamos llegado.

Seguí a ambos hacia la entrada a un edificio grande y se veía muy lujoso. Estábamos esperando el ascensor y ellos platicaban al parecer de planes futuros. Llegó el ascensor y nos subimos y apretó el botón al piso 20

¿20 PISOS? ¿POR QUÉ HAY TANTOS PISOS?

Era mi primera vez en un edificio tan grande. Estaba sorprendida y a la vez nerviosa.