❆|CAPÍTULO 5: POR PRIMERA VEZ

Diecisiete Años

ACCIÓN DE GRACIAS. NOVIEMBRE, 2013.

Desde que estaban en el instituto Faith y Brant asistían a la fiesta de acción de gracias que organizaban los alumnos de último año y pese a que ella no era fanática de las fiestas acompañaba a su mejor amigo, aunque para esos momentos ya era difícil descifrar si eran solo mejores amigos.

 Ambos habían sido muy unidos desde pequeños y con el tiempo su amistad se había ido fortaleciendo más y un nuevo sentimiento para ambos se hizo presente con el paso de los años.

Faith ya no era solo una niña con coletas y vestidos floreados, se convirtió en una adolescente muy guapa y madura, en su cuerpo aparecieron algunas curvas, su cabello lacio siempre lo llevaba suelto y a la hora de vestir su sentido de la moda destacaba siempre, pero, aunque ya no era una niña seguía siendo el copito de Brant, apodo que le puso años atrás y que ella amaba, era algo solo de ambos.

En cuanto a Brant, ya no era un niño delgado y debilucho, su cuerpo cada vez se notaba más definido, sus brazos, aunque no en exceso tenían bastantes músculos, era un joven maduro y bastante atractivo lo suficiente para atraer la atención de todas las chicas del instituto, pero tristemente para ellas los ojos y la atención del muchacho siempre estuvieron en una sola persona, Faith.

No solo sus cuerpos cambiaron, también sus sentimientos, al principio eran algo confusos ¿estaban enamorados el uno del otro? ¿o era el cariño de amigos que siempre habían tenído? Pese a sus dudas ninguno se habían atrevido a dar un paso tan grande como tener una relación entre ellos, solo una vez intentaron estar con otras personas y en realidad no funcionó así que volvieron a ese limbo en el que se encontraba su relación por miedo a dañar su amistad.

Mientras que para todos ellos solo eran mejores amigos, Faith y Brant sabían que había algo más, pero ¿qué significaba la primera vez que sintieron ese cosquilleo particular en el estómago por unas palabras lindas del otro, la primera vez que se sonrojaron por una acción, la primera vez que se enamoraron, la primera cita o su primer beso? Fueron los dueños de las primeras veces del otro y pretendían mantenerse así por mucho tiempo o eso era lo que querían hasta aquella noche de la fiesta.

 Las cosas no siempre salen como uno las planea y sobre todo no siempre la vida nos trae algo bueno...

—Copito, solo un trago más — Brant le acercó un vaso rojo con un líquido marrón dentro.

—Sabes que no me gusta beber — La chica apretó los labios negando con la cabeza. Su amigo la miro con ojos de perro triste y ella no pudo evitar soltar una risita, suspiró un momento y después tomó el vaso para darle un gran trago. El líquido recorrió su garganta, la cual sintió arder gracias la bebida. —Sabe horrible — Hizo una mueca.

—Ya te acostumbrarás. — Pronunció.

“Perfect” de Ed Sheeran comenzó a sonar por los altavoces y Brant dejó su vaso sobre la barra, admirando como su mejor amiga se emocionaba al escuchar a su cantante favorito, pero no sabía que más allá de Ed ella consideraba esa canción perfecta pues a su parecer describía muy bien su relación con Brant.

Su mejor amigo la tomó de la mano y la llevó al centro de la estancia. —Vamos a disfrutar de esta noche, si me concedes esta pieza — Sonrojada Faith asintió.

Brant la tomó de la cintura acercándola a su cuerpo mientras ella pasaba sus brazos alrededor de su cuello y colocando su frente en la de él. Se llenó con su aroma tan familiar, sintiendo el calor que le proporcionaba su cercanía y ese cosquilleo que aparecía siempre que estaba con él.

En algún momento de la canción Brant depositó un beso en el cuello de Faith, deslizando su boca hasta la oreja de la chica para comenzar a cantar la canción que sonaba.

Faith adoraba el sonido de su voz, algo ronca, pero suave a la vez, tan sexy. Su piel se erizo mientras el chico acariciaba su oreja con la nariz y disfrutaba del dulce aroma de la joven. Nunca eran tan demostrativos en público, pero en aquel momento no les importaba, querían que todos se dieran cuenta de que ambos se pertenecían.

Estuvieron bailando lo que parecieron ser horas, sin percatarse de quien estaba a su alrededor o si la música seguía sonando, solo disfrutaban de ellos, aun cuando se encontraron besándose mientras subían algunas escaleras. No habían bebido mucho, pero si lo suficiente para armarse de valor y olvidarse de todos los miedos en cuanto a su relación.

Así como en la fiesta Brant llevó sus besos hasta el cuello de Faith, que suspiró cuando sus suaves y cálidos labios hicieron contacto con su piel. Caminaron de espaldas con el aun sosteniéndola de la cintura hasta entrar a una habitación, la chica puso el seguro antes de saltar a aquellos brazos que tanto le gustaban, hundiéndose nuevamente en un profundo y ansioso beso.

 Las sensaciones que sentían en ese momento eran inexplicables.

Al llegar a la cama Brant depositó con sumo cuidado a su copito, como si fuese a deshacerse en sus brazos en cualquier momento, dejó cálidos besos sobre su rostro, finalizando de nuevo en sus labios, Faith por su parte acarició los brazos de su chico dejándose llevar por el momento. Ambos comenzaron a desnudarse hasta que no quedara ninguna prenda interponiéndose.

—¿Estás segura de esto? — Titubeó un poco el joven al preguntarlo pues, aunque para algunos aquello sería algo insignificante para ellos lo sería todo. Por primera vez se entregarían en cuerpo, porque su corazón hace años que se lo habían entregado al otro.