EROS BLACK.
Los alcances de los vampiros se han visto en auje, no solo han vigilado mi manada, se han hecho de aliados, su unión con los cazadores no es más que un intento en vano de poder terminar conmigo, cualquiera quisiera poder jactarse de haber vencido a un Black, más uno como yo.
Camino en dirección a los campos de entrenamiento donde los nuevos miembros entrenan, aprendiendo lo esencial en batalla, obteniendo lo que necesitan para enfrentarse con los peligros que trae consigo ser parte de Black Moon.
-Que tal los nuevos? - Alex mi beta y mejor amigo mantiene su rostro cerio, vigilando y llevando el trabajo de entrenar a los niños y jóvenes de la manada.
-Van muy bien, puedo decir que excelente.
-Que avances tienen? - detallo a todos los nuevos que trabajan por conseguir un puesto en la guardia.
-Son fuertes, los mas pequeños han mostrado un poco del tipo de lobo que podrian llegar a ser- detalla alex mientras tomo atención en la práctica que hacen los más pequeños de la manada, de un rango de 7 a 12 años, quienes solo se preparan para resibir a su lobo en un futuro.
-¿Quien es el? - señaló a un pequeño que sin duda tiene la misma edad de Katy.
-Es Omar, hermano de un delta de la guardia
-Me hizo recordar al regordete que eras de pequeño- rio mirando su cara tornarse molesta.
-Eros- señala a un pequeño que es muy delgado- ese niño se parece a ti- comienza a reir a carcajadas mientras yo lo sigo.
-No se parece nada a mi, era mucho más alto y regordete que ese niño.
-Que no deberías de estar preparándote para la visita de el alfa de la manada White- me recuerda la estúpida reunión que tengo con ese alfa, insistente alfa.
-No me lo recuerdes- suspiro.
-Sigue con lo mismo- afirma.
-Si y lo peor de todo es que Alexa no deja de insistir, es una garrapata- lo miro, este solo niega, sabe el fastidio que realmente son esa familia.
-Y no descansará hasta conseguirlo - le doy la razón, ambos padre e hija son insoportables.
-Bien me voy me tengo que preparar para un martirio.
Lo oigo reír y voy a casa, ya dentro miro a mi madre llevar un delantal.
-Madre que haces- pregunto observandola.
- Preparo pan de naranja pensé que quizá podíamos pasar tiempo juntos- sonríe.
Ahora odio más a esa familia.
-Creo que no será posible, lo siento hoy tengo reunión con los White- la miro, su semblante muestra el desacuerdo qué tiene a que ellos sigan viniendo.
-Está bien hijo será otro día- se acerca y me abraza, amo a mi madre, es lo único que me queda aparte de Katy- primero los compromisos después lo demás- sonríe y se marcha.
Pasan las horas llegando el tiempo de recibir a los White, Alex viene a mi encuentro informandome que ya se encuntran aqui, me dirijo a la puerta de la mansión para recibirlos.
-Un gusto volver a verlo alfa Connor- saludo con educación .
-El gusto es mío alfa Eros- sonríe- siempre es bueno ver a viejos amigos.
-Claro- lo miro inexpresivo- pasen por favor- hago el indicio para que pasen, ya dentro de la casa les pido que tomen asiento, mi madre se presenta en el lugar luciendo fresca y cordial .
-Buenas tardes- sonríe- es un gusto tenerlos con nosotros.
-El gusto es nuestro- sonríe la luna White.
-Bien se les ofrece algo de beber, ¿vino quizá?- ofrezco de manera amable aunque su presencia no me agrade en lo absoluto, pido a una encargada que les proporcione una copa quien enseguida acata lo pedido- bien alfa Connor a que debo su visita.
-El trato del que te he hablado, ¿Has pensado en ello? - va directo al grano eso me agrada- el juntar las manadas, la Black con la White, sería una oportunidad para poner fin a los ataques de los neofitos- y ahí está de nuevo, la propuesta de convertir a su hija mi luna.
-Alfa Connor usted sabe lo que pienso acerca de que su hija se convierta en la luna de mi manada- lo miro serio- además que de igual modo sabe que para un Alfa es necesario encontrar a su mate para volverse más fuerte.- Termino de hablar.
-Lo se Eros, pero en realidad mi hija te quiere- pero yo no- piénsalo no te quita nada, y te beneficiaria mucho.
-Concidero qué nuestra unión más que beneficiar a mi manada lo hará con la suya, mi posición es más que suficiente para acabar con los ataques, le agradezco su oferta pero tendré que rechazarla- lo miro decidido, se que mi molestia puede notarla, sabe de igual manera lo que trata de hacer pero a olvidado con quien se dirige.
-Si cambias de opinión no dudes en buscarnos, no hay nadie mejor que mi pequeña Alexa para ser la luna de esta manada.
-Como siempre se adelanta a los hechos Connor- mi madre toma mi hombro - le recomiendo que envíe los informes de los últimos meses, de mi manada y mi vida puedo encargarme perfectamente.
El miedo surca su rostro, sabe que ha cruzado los límites, al igual que no va poder hacer nada para que pase desapercibido la falta que ha hecho a los acuerdos.
-Bien creo que eso es todo ya no tenemos nada que hacer aquí- se levanta y se dirige a la salida, los acompaño de cerca- ha sido un gusto verle alfa.
-Igualmente, espero que lo que le he dicho sea acatado lo antes posible.
Sin decir nada se marchan. Espero que por su bien y el de su manada no pase por alto mi orden.
-Pensé que después de este tiempo por fin desitiria de su plan
-Sigue siendo igual de insistente madre- observó a la mujer que me dio la vida, mi padre protegió lo que tanto quería, y así espero hacerlo yo algún día.
-Alexa es muy bonita tengo que admitirlo- nuestras miradas se encuentran - Solo espero que nuestra madre te premie con una buena mujer.
No respondo, se que mi madre igual que cualquier otra se preocupa por mi futuro, al igual que se que de mi depende el futuro que le espere a la manada y no puedo ni debo dar paso en falso.
Aprovecho mi tiempo en el despacho, los deberes son muchos, siendo el líder de los lobos tengo aun más trabajo que cualquier alfa.