Capítulo II: Un trabajo de ensueño

Era algo evidente, Sebastián no era alguien de quién me pudiera enamorar , ni siquiera me podía dar el lujo de que me gustara, era el verdadero " hombre equivocado". Así fue como decidí que me alejaría lo más que pudiera de Sebastián, hasta me cambié de asiento en el salón.
•••
-Papá, papá quiero hablar contigo( le grité antes de que saliera de la casa)
- ok dime rápido que quiero ir a ver a tu abuela antes de mediodía
- mira lo que pasa es que...
- ya dime no des tantos rodeos, que quieres
- quiero que me dejes buscar trabajo, de medio tiempo y los finés de semana
- no, para qué , cual es la necesidad?
- ninguna sólo quiero trabajar para ... tú sabes salir de la casa y tener algo que hacer en mis tiempos libres, aparte de ganar algo de dinero a la vez
- a ver y qué vas a hacer con ese dinero? Para qué te hace falta el dinero? Yo te puedo ayudar
- no no no, no hace falta, es más para pasar el tiempo, el dinero lo quiero coger para comprar algunas cosas que me hacen falta para mis diseños, tú sabes, telas, encajes y eso
- ok, has lo que quieras, pero primero me dices dónde está ese trabajo y que vas a hacer
- está bien papá, eres el mejor - me acerco y le doy un beso en la mejilla-
Salí junto con Sonia a ver si encontraba algún lugar que me acomodara para trabajar ; pasé por una cafetería, y nada; luego fue un restaurante, y nada; también fuí a una pizzería, y tampoco contrataban; y así fuí a tiendas de ropa, perfumes , incluso a una joyería, y no encontré nada. Pasamos por casualidad por la tienda " Aires de Moda" y tenía un cartel que decía " contratamos costurera"
- Nathaly mira - me dijo Sonia-
- Ay Sonia ahí menos que menos me van a contratar, seguro quieren costureras que cuenten con experiencia laboral o algún título de costura, yo sólo tengo mis vestidos
- pero no tienes nada que perder. Dale vamos sólo preguntemos, no tienes nada que perder
- está bien, entremos a ver
Al entrar a aquella tienda me sentí súper emocionada, habían tantos diseños pegados por todas las paredes , a parte de los vestidos que ya estaban a la venta, todo era realmente bello. Llegamos a donde estaba la muchacha de la recepción, quién con mucha amabilidad nos preguntó en qué nos podía ayudar:
- vimos el cartel que busca costurera. Todavía están contratando?
- aah sí claro, espere un momento ( coge el teléfono para hacer una llamada). Señora aquí hay unas muchachas preguntando por el puesto de costurera,¿ qué les digo? Aah ok ( cuelga y se dirige hacia nosotras). Por favor síganme.
Nos llevó hacia la parte de atrás de la tienda donde estaban las máquinas de coser y habían dos costureras, más adelante estaba la oficina de la señora Smith. Entramos en su oficina y ella nos recibió con una sonrisa muy encantadora
- Buenas, me dice mi secretaria que están preguntando por el puesto de costurera
- aaah sí, soy yo, pero... ( Por un momento la voz se me puso temblorosa , no sabía cómo explicarle )
- tranquila no te pongas nerviosa ( sonrió de forma amistosa y eso me hizo coger un poco de confianza)
- Lo que pasa es que no tengo ningún tipo de título de costura y tampoco experiencia laboral
-Aaah ya veo. Pero sí sabes coser no? Y seguir trazos?
- Si sí yo sé coser
- Y cose muy bien, incluso hace sus propios vestidos ( interrumpió Sonia tratando de destacar mis habilidades en la costura)
- mmmm ya veo. Hagamos esto, me vas a enseñar qué sabes hacer ok?
- si sí claro cómo usted diga
- ven conmigo
Salimos de su oficina y ella preguntó que máquina de coser no se estaba utilizando, una de las costureras le indicó.
- mira tienes dos días para terminar este vestido (puso sobre la máquina de coser un boceto de un vestido, muy lindo por cierto, aunque se veía que me podía dar trabajo)
- ok , lo haré
- estás segura de que lo terminarás a tiempo?
- por supuesto (le respondí aunque en el fondo creía que quizás no podría
Sonia se fue, yo me quedé allí trabajo en aquel vestido, me quedé hasta muy tarde, cuando ya se iba la última persona entonces me fuí también. Al otro día llegué súper temprano y seguí trabajando sin descanso, sólo quería terminar a tiempo, aparte me emocionaba bastante trabajar en lo que me gustaba, e incluso podía aprender bastante de la señora Smith. Ese día también terminé súper tarde, pero ya casi lo tenía listo , sólo me faltaban unos pequeños detalles. Al día siguiente, estaba trabajando en esos pequeños detalles y una costurera se me acercó y me dijo : tengo que ser sincera no creí que pudieras terminar a tiempo. Eso me llenó de orgullo y emoción por enseñarle el vestido a la señora. Cuando llegó la Sr Smith ya había terminado el vestido. Terminaste? Preguntó con cara de satisfacción.
- sí- respondí-
- ok , tráelo a mi oficina
Entramos a su oficina y le mostré el vestido, le expliqué que material había utilizado e incluso porqué me atreví a hacerle algunos cambios al diseño original
- ooohhh , quedó espectacular. Está bien estás contratada , empiezas mañana, pero ojo estás a prueba
- muchas gracias
- ni lo menciones, yo soy la que está sin palabras, no creía que pudieras terminarlo tan rápido