Un Fin es Solo Un Inicio

X

ELIZABETH

El reloj de arena que pensé tenía un contenido bastante grande, parece acabarse a cada minuto que estoy en esta casa, a la espera de que me encuentren y acaben con todo o que yo les haga pagar por todo, me siento encerrada nuevamente, pero esta vez mi salida esta mas que definida, el camino hacia mi destino está listo desde que tome la decisión, ese día que se atrevió a ponerme sus asquerosas manos encima y también que descubriera la verdad de Irene, decidí hacer todo para acabarlos y recuperar todo lo que me pertenece. Jamás pensé tener un aliado adentro que me cuido y por eso sigo con vida, tampoco encontrarme con una familia que me acogió también y se ganaron mi corazón – eso sin duda cambia mis planes – no dejaría que les pasara nada, aria lo que fuera por protegerlos al igual que a Frank. 

  • Eli – me sacan de mis pensamientos - ¿estas bien?
  • Si, solo no puedo dormir – le digo mirándolo a los ojos – ¿tú que haces despierto?
  • Quería hablar contigo – se acomoda a mi lado en la poltrona que está en la ventana- ¿Por qué no te vas conmigo?
  • No volvamos a ese tema
  • Escúchame por favor, sabes que puedo protegerte, se esconderte y puedo llevarte a donde quieras, podemos planear lo que sea que tengas en esa cabeza, yo te cuide todo ese tiempo, no pude evitar – se queda cayado y respira hondo – sabes que hubiera dado todo y todavía lo doy – se acerca y acaricia mi rostro – Eli piénsalo si, es lo mejor en este momento
  • No – me alejo y me levanto- todo lo que hiciste por mí, siempre te lo agradeceré, pero esto es algo que debo hacer o siempre estaré escondiéndome y no es lo que deseo, entiéndelo por favor deseo vivir tranquila
  • Eli ¿es que no fue suficiente todo lo que paso?
  • ¿disculpa? – le digo ya furiosa
  • Espera lo siento yo…- dice con las manos alzadas
  • Dijiste lo que realmente piensas – me le acerco mirándolo que lo mato - ¿crees que deseo vivir todo otra vez? Qué me hace falta ese agujero donde me metían cada vez que se les antojaba o los azotes, las malas palabras, las imposiciones y el ultraje de ese infeliz – le susurro para que nadie escuche, pero mis lagrimas ya se asoman
  • No quise decir eso – me trata de abrazar, pero me alejo 
  • Claro que sí, no me jodas mas con este tema o la próxima te juro que se me olvida lo mucho que me ayudaste en ese infierno

Le escucho llamarme, pero ya estoy tan enojada que no quiero hablarle, me voy a la habitación, pero las lagrimas corren del coraje que me dio al escucharle pensar de esa manera, golpean la puerta en varias ocasiones, pero no deseo ver a nadie, José me dice que baje a comer, le digo que no tengo hambre, me recuesto ya cansada de pensar en todo, pero los recuerdos me persiguen hasta en los sueños.

 

Habían pasado seis meses desde la dichosa cena de compromiso, mis desprecios y desplantes parecían avivar mas la locura que ese hombre sentía hacia mí, Irene se enojaba mas con cada cosa que hacia y sus reprimendas eran cada vez peor – en verdad temía ya por mi vida – me encontraba amordazada en el cuarto de aseo, luego de que me encontraran a tres horas de la mansión, tratando de escapar, sabia que esta vez el castigo iba hacer peor, por que el que me encontró fue él.

Entra y me mira con un enojo que le correspondo, nuestras miradas se retan por un rato, se enoja mas y me golpea, me lleva a su habitación lanzándome a la cama, me trato de soltar, pero me amarra las manos a la cabecera.

  • Jamás te alejaras de mí – me dice quitándome la mordaza – siempre estarás en mi vida y en mi cama desde ahora
  • ¡Suéltame! – le digo dando rodillazos y patadas
  • Entiéndelo de una vez, este es tu futuro y mientras mas lo asimiles menos vas a sufrir – rompe mi ropa y yo entro en pánico
  • ¡déjame! – pero nada funciona - ¡NO!

 

Me levanto sudando y gritando por la pesadilla que nuevamente interrumpe mi sueño, entran en la habitación, Frank, José y Patrick, basta una mirada para que las ultimas dos personas sepan que es  otra pesadilla, se acerca José pasándome un poco de agua que estaba en la mesa de noche, me dice que este tranquila, Patrick intenta acercarse pero le digo que se retire y así lo hace, Frank está en la puerta sin decir nada, pero sus ojos demuestran curiosidad – no va a descansar hasta saber – me dice mi cabeza ya conociendo su necesidad de saberlo todo, en cuanto nos quemados solos me dice José que le cuente, pero me rehúso a decir lo que paso en esa casa, los únicos que lo saben es por que estuvieron conmigo y así seguirá.

No duermo luego de eso – ni en sueños soy libre – estoy sentada en la cama tratando de leer y mantener mi mente ocupada, pero estoy en un bloqueo terrible, tengo ganas de correr y nunca parar, en eso entra Frank todo arreglado y con una maleta.

  • Nos vamos – me dice lanzándome un abrigo y gorro
  • ¿estas loco? – me levanta de la cama y me empieza a poner el abrigo – basta Frank – lo trato de empujar, pero este hombre es una roca
  • Bien, estas planeando algo y eso implica dejarse atrapar – me dice mirándome a los ojos - ¿quieres vivir algo que no sea estudio? ¿no deseas estar tranquila? Vive un tiempo sin esconderte, sin cambiar cada dos días de apartamento, Eli vive libre por un tiempo – me sujeta de los hombros - ¿Qué dices?
  • ¿A dónde vamos? – le digo luego de un rato, me sonríe y me coloca el gorro




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.