CAPITULO XIV

KATHRYN

Estoy realmente sorprendida, o puedo dar crédito a lo que escuchó, pero sobretodo que el muy idiota sea tan descarado de decirlo en voz alta y estando yo presente, él simplemente decidió catalogarme desde el primer día sin siquiera tomarse la molestia de tratar de conocerme, para el sencillamente soy solo una jovencita que su mayor aspiracion es pasar el dia divirtiéndose y ¿de que creé que vivo? ¿del aire? aunque lo mas probable es que piense que mis ingresos los persibo de lo que consigo gracias a mi explendida y amplia sonrisa y el encanto de mis curvas.

Evidentemente es un completo imbécil con mayúsculas y todo incluído, pienso mastico el trozo de panqueques que me llevo a la boca mientras lo miro fijamente y solo lo escuchó mover su boca para decir que no es un proyecto simple e insinuar que no tengo la suficiente capacidad para ser parte de algo asi tan grande y supongo que ni siquiera puedo soñar con pensar estar al frente, quiero voltearle mi desayuno en la cara mientras trata de arreglar su metida de pata para quedar como el caballero que no es.

Pero que se busque a otra porque esta cabeza hueca según su concepto, no se la va a poner fácil, ni una célula de mi cuerpo está dispuesta a dejarselo pasar por lo que lo interrumpo y le pido que me explique de manera simple y sencilla que es lo que no quiere decir es su discurso patético porque para mi está mas que claro lo que si está insinuando sin ningún rodeo, pero entre más lo escuchó enredarse con lo que sea que quiera decir mi ira va en crecimiento exponencial y su última respuesta lo empeora todo.

Por Gala me enteré que ese proyecto lo consiguió gracias a mi, que gracias a mi el hombre que tenía meses ignorando sus intentos de tener una reunión le ofreció una sociedad sin contar que el concepto a desarrollar es mio, que la idea también es mia y el muy cretino la va a usar para llevarse todos los beneficios y también el crédito como si fuera su idea, porque evidentemente según el no tengo la capacidad para llevar a cabo mi propia idea, porque el la desarrollaria mejor seguramente.

Siento que de seguír alli le voy a enterrar el cuchillo de mesa con el que estoy cortando mis panqueques así que por mi propio bien porque aún recuerdo que el homicidio es un delito y desgraciadamente para mi es penado por la ley aunque sea por el bien de la humanidad, me levanto dejando mi plato con apenas unos bocados consumidos antes de que la idea de pasarme encerrarla el resto de mi vida sea mas atractiva que dejar que continúe respirando y siga diciendo estupideces y salgo de aquel lugar sin mirar atras extremadamente furiosa y esta vez si se lo hice saber.

De verdad no entiendo ese concepto tan pésimo que tiene de mi, no hemos pasado ni 72 horas juntos como para decir que hice o dije algo que justificará su manera de pensar pero claro él ya cree que soy merecedora del título de mujerzuela y de paso una tonta sin cerebro que no sabe nada de negocios. Me contengo para no gritar y volver alli y cometer con gusto un homicidio del cuál llamaría yo misma a la policía para entregarme feliz por haber librado al mundo de un ser como ese.

El es un completo idiota con retraso mental y un ego que definitivamente no se de donde lo saco o quien lo alimenta, porque por lo poco que he visto en los negocios no es tan hábil y maravilloso como todos dicen porque si para obtener el contrato de su vida se tuvo que valer de mi intervención no quiero saber cómo obtiene el resto o peor aún los métodos que uso para llegar a donde se encuentra hoy.

Trato de respirar y calmarme porque asi como estoy mi mente está completamente nublada y necesito despejarla para poder ubicarme, quiero decirle tantas cosas y ninguna de las que cruzan por mi mente son dignas de una señorita dirían Adahya y mi abuelo, pero en mi defensa el no es un caballero por lo que no tengo que ser una dama frente a él.

Y me enfurece mas no tener idea de dónde estoy y menos saber cómo llegar a mi auto, estos últimas 48 horas no son mis días, mira que de todos los lugares llegar justamente a su propiedad y tanto que me gustaba el mirador y es de ese cretino insoportable, me quedo parada una vez que me he alejado lo suficiente de la casa para darme cuenta que solo hay montañas y árboles a mi alrededor y regresar a pedir indicaciones no es una opción, preferiria ser tragada por una anaconda aqui mismo.

• De verdad que cuando decides ponerla lo haces en grande princesa - me digo en voz alta a mi misma - tenías que dejar hasta tu teléfono en el auto y ahora mirate perdidisima y sin poder llamar a nadie que te rescate.

De aqui saldre pero en los periódicos como persona desaparecida y seguramente jamás encontrarán mi cuerpo y aunque suelo ubicarme muy bien todo se parece, lo único que hay es verde por donde se mire. Asi que decido bajar por el camino que tengo enfrente que por la manera que esta diseñado debe ser la salida, por lo menos se me ocurrió ponerme unos tennis, pienso mientras voy colina abajo y ruego no conseguir subidas.

• Kathryn - escucho gritar mi nombre.

Y por un momento sopesó la idea de fingir que no escuché y caminar mas rápido para que no me alcance pero se que la idea es infantil y tal como supongo al voltear veo a la chica de Maximiliano caminando hacia mi, lo que me faltaba pienso para mi misma pero empiezo a acostumbrarme a estar envuelta en este tipo de situaciónes incomodas pero se que sin su ayuda no saldré de aqui y el otro ser que puede hacerme el favor de orientarme definitivamente no pienso ni pedírsela y aceptarsela muchísimo menos.

• ¿Un poco perdida? - me pregunta, y de verdad me preguntó si debería contestarle eso y estoy a punto de salirle con uno de mis sarcasmos característicos pero no tiene caso porque realmente lo estoy y no se si este es realmente el camino que me llevara a la salida.
• Nunca había estado aqui y solo se ven montañas y árboles todo es verde y la verdad no se cómo llegar a mi auto - al final decido responder con la verdad.
• Y no llegarás por este camino - me dice algo divertida - este camino va al lago. Ven volvamos y no tienes que entrar a casa - aclara - y te llevo a tu auto.
• Te lo agradecería porque si entro a esa casa lo más probable es saldre pero esposada - suelto con toda sinceridad sonriendo, disfrutando de la idea.