Es un día llovioso en la hermosa y pequeña ciudad de Boston, es un día perfecto para estar en la cama; tomar una taza de chocolate y malvaviscos, me gustaría hacer eso, pero en este momento no puedo, ya que me estoy preparando para un viaje que cambiara mi vida. Me iré de esta bella ciudad y de este hermoso país, para comenzar de cero en un ambiente nuevo, viajare a Canadá con mis padres y mi novia Brittany. Mi nombre es Colín Brown y tengo 17 años, nací en la ciudad de Boston, Estados Unidos. Mi madre es Canadiense y mi padre Estadounidense, mi madre quiere que haga mi último año escolar en Canadá, su ciudad natal. Para que conozca más esa ciudad, ella dijo que nos quedaríamos viviendo ahí por al menos unos 3 años, espero acostumbrarme rápido. Cuando mi novia se enteró de esto, decidió ir con nosotros, ya que según ella, no quiere que estar lejos de mí. Me gustaría mucho quedarme en Boston, no me gusta la idea de dejar mi casa, mis amigos y mis lugares favoritos, pero esto no lo decido yo, sino mis padres.
-¡¡Colín!! ¿¡Ya terminaste de empacar!? –Grito mi madre desde su habitación.
-¡¡Ya casi termino!! ¡¡Solo me faltan unas cosas!!
Mi madre entro a mi cuarto un poco agitada –Apúrate, tu padre nos está esperando, Britanny está esperando en el auto con tu padre, todas las maletas están listas, solo faltan las tuyas.
-En 5 minutos bajo, te lo prometo –Le roge –Ya falta poco...
-Está bien, bajare esta maleta, espero no te tardes –Asentí.
Mi madre salió de mi habitación, cerré la puerta para asegurarme de que no entrara, me acerque a mi cama y me agache, debajo de ella saque un libro, luego lo guarde en mi maleta, la cerré y la baje de la cama, Salí de mi cuarto con ella, mi casa se veía muy vacía, aun no podía creer que me iría, baje las escaleras, intentando bajar poco a poco mi maleta que estaba un poco pesada, no la agarre bien y esta cayo hasta llegar al primer piso .
-Ten más cuidado, te podrías lastimar –Comento mi padre. –La subiré al auto.
-Sí, si, como digas –Salí de casa, para subirme al auto.
Mi novia no se había dado cuenta de mi presencia por estar en su teléfono, mi padre subió la última maleta, que era la mía, para luego entrar al auto y empezar a manejar. Tome mi teléfono para buscar en internet, fotos de Canadá, quería saber cómo era ese lugar, solo fui cuando tenía 6 años y no me acuerdo de mucho.
Por lo visto, Canadá era bonito en fotos, pero aun así no se me iba la decepción de no poder quedarme en mi país natal. Estaba tan concentrado en mi teléfono que no me había dado cuenta que ya habíamos llegado al aeropuerto, baje del auto y tome mi maleta, espere a que mi novia bajara del auto para dirigirnos a la entrada del aeropuerto. Una azafata nos dirigió hacia nuestro vuelo.
-¡Estoy tan emocionada por conocer Canadá! Debe ser hermoso. –Giro a verme la cara –Y ¿Esa cara? ¿No estas feliz de ir a Canadá? ¿Es porque viajare con ustedes?
-No, no, claro que no, solo que ando un poco distraído, estoy feliz de que vinieras...
Ya en el avión buscamos nuestros asientos, a mis padres les toco juntos, mi novia y yo tenemos asientos un poco alejados de los asientos de mis padres, nos sentamos en nuestros asientos, mi novia saca un libro mientras que yo trato de dormir y no pensar tanto en el viaje.