Un nuevo mundo

Capitulo 206

Ni siquiera tiene una prenda de vestir con él. ¿Winston no usaba ropa cuando estaba en Camel Hump Valley?

  Aunque es perfectamente normal que los machos anden desnudos de vez en cuando, si un macho sigue haciéndolo, será etiquetado como bárbaro. Si Winston no tiene ropa, ¿cómo salió de su casa para asar carne cuando estaba en Camel Hump Valley? ¿Ha estado comiendo su carne cruda?

  Sacudida por este pensamiento, Bai Qingqing negó con la cabeza violentamente. De ninguna manera, Winston no es un hombre bestia serpiente que le teme al calor. ¿Por qué comería su carne cruda?

  La actuación de Winston luego disipó las sospechas de Bai Qingqing. Winston era muy hábil para asar carne; probablemente lo hacía a menudo.

  Bai Qingqing miró los condimentos junto a la pared y preguntó después de dudar un momento: "¿Te gusta la carne que Parker asó anteriormente?"

  Winston miró a Bai Qingqing. "Me gusta."

  Bai Qingqing luego sonrió y dijo: “Eso es porque agregó esos condimentos. ¿Quieres comerlo? Yo te lo arreglaré ". Bai Qingqing luego se puso de pie. Pero debido a que había ejercido demasiada fuerza, le dolía un poco la barriga. Con una mano sobre su barriga, exhaló dos veces antes de que el dolor desapareciera.

  Dicen que un niño era como un trozo de carne que se le había caído a la madre. Ahora que había dado a luz, se dio cuenta de que efectivamente era así.

  Winston se levantó instantáneamente y la abrazó. Extendió sus largos brazos y la levantó, antes de dejarla sobre un trozo de piel de animal que había sido puesto en el suelo. "Los traeré".

  "Mm."

  Winston llevó todas las botellas y frascos. Bai Qingqing pela de manera eficiente algunos trozos de ajo y luego selecciona varios condimentos. Ella levantó la cabeza y le preguntó: "¿Toma alimentos picantes?"

  "¿Mm?" Winston miró a Bai Qingqing inquisitivamente.

  "Estoy hablando de este". Bai Qingqing sacó un chile rojo seco y lo agitó con una sonrisa en su rostro.

  La mirada de Winston se posó sobre el chile. Lo tomó de la mano de Bai Qingqing de inmediato. "No lo toques".

  Bai Qingqing sonrió. "¿Puedes comer esto?"

  "Sí." Winston dio una respuesta afirmativa, impávido. Llevaba sal a las aldeas de otros lugares para cambiarla por hembras todos los años, y las hembras a menudo se enfermaban. Por lo tanto, las medicinas como las puntas rojas eran necesarias. Debido a que el sabor de las espigas rojas no era agradable, con frecuencia comía algunas para convencer a las hembras de que las comieran.

  Bai Qingqing rápidamente agarró algunos chiles y los arrojó al tazón de condimentos antes de que Winston pudiera detenerla. “Muy bien, sal y lava esto. Te enseñaré cómo manejarlos después de que lo hagas ".

  Winston miró la mano de Bai Qingqing con preocupación, antes de salir con los condimentos. Para cuando terminó de lavar los condimentos, Bai Qingqing ya había preparado el bloque para picar y la hoja de piedra. Winston se negó a dejarla tocar los chiles y manipuló los diversos condimentos de acuerdo con las instrucciones de Bai Qingqing.

  La carne se estaba asando ahora y aún no era el momento de agregar los condimentos. Por lo tanto, Bai Qingqing empapó los condimentos en aceite y luego untó la mezcla sobre la carne con un trozo de bambú.

  La carne asada de color marrón dorado chisporroteó cuando fue cepillada con una capa de aceite, instantáneamente volviéndose tentadora, como si alguien hubiera lanzado un hechizo mágico sobre ella.

  Bajo el fuego, las pupilas plateadas verticales de Winston se volvieron ligeramente redondas, luciendo asombradas. Su garganta vibró.

  Bai Qingqing chasqueó los labios, sintiendo hambre. "¿Puedo comerlo?"

  "Claro", respondió Winston de inmediato e inmediatamente rasgó una rebanada de carne glaseada y fragante.

  Bai Qingqing se dio la vuelta y recuperó dos tazones de la plataforma de piedra que había detrás. Le entregó uno a Winston y recibió la carne con el otro cuenco.

  "Usted debe comer también. Este trozo de carne es suficiente para llenar mi estómago ".

  Winston miró la carne en el tazón de Bai Qingqing y preguntó con el ceño fruncido: "¿Tan pequeña?"

  En realidad, no era muy poco, esta rebanada de carne pesaba un poco más de 250 gramos. Además, la carne era mucho más abundante que el arroz. Cuando Bai Qingqing llegó por primera vez a este mundo, ni siquiera podía terminar esta porción para una comida.

  "Acabo de comer", dijo Bai Qingqing. Cogió la carne con palillos y la sumergió en sal en polvo, antes de darle un mordisco.

 




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