Elizabeth>>> "Salí de mi habitación con Eleonora siguiéndome de cerca, nuestras pisadas resonaban en los oscuros pasillos del castillo. Mi mirada se fijó en la alfombra raída y sucia, que había perdido su color original y se había tornado negra como la noche. Mis manos temblorosas palmeaban mi vestido rojo, intentando calmar el temor que me consumía".
"Eleonora caminaba detrás de mí en silencio, respetando mi necesidad de reflexionar. No sabía si ella también estaba aterrada y confundida por las palabras que habíamos intercambiado antes, pero en ese momento no importaba. Lo que importaba era el destino que me esperaba detrás de las enormes puertas de madera que se alzaban ante mí".
"La madera estaba podrida y cubierta de humedad, pero no era eso lo que me hacía sentir escalofríos. Era la sala del trono lo que me esperaba al otro lado. Un frío helado se apoderó de mi cuerpo mientras me acercaba a las puertas. Tragué saliva con dificultad y me pellizqué el brazo pálido para intentar calmar mis pensamientos".
Eleonora>>> "Eleonora me detuvo suavemente, tomándome de los hombros con una mano cálida y gentil. Su voz fue un bálsamo para mis nervios, tranquilizadora y suave". Señorita Elizabeth, no se cause daño. Recuerde las palabras de su padre, la claridad y la sensatez son las armas de un verdadero líder.
"Una sonrisa cálida iluminó su rostro mientras masajeaba mis hombros con un toque suave. Su contacto fue como un bálsamo para mi cuerpo, que había estado tenso y helado. La tensión se disipó gradualmente, y mi temperatura corporal volvió a la normalidad".
"Me miró con ojos llenos de comprensión y apoyo". Usted puede hacerlo, mi señora. Solo necesita confiar en sí misma y en su capacidad para tomar decisiones sabias.
Elizabeth>>> "Respondí a su gesto con una sonrisa débil y suavemente aparté sus manos de mis hombros". Muchas gracias, Eleonora. No sabría cómo proseguir sin ti. "Mis palabras fueron sinceras, pero una voz interior me susurró dudas sobre la verdadera intención detrás de su amabilidad. Sacudí la cabeza para despejar esos pensamientos y me dirigí hacia las puertas".
"Con determinación, empuñé las pesadas puertas y las abrí de par en par. El esfuerzo me dejó jadeante, pero no quería mostrar debilidad ante los que esperaban en la sala". Es hora de decidir cómo enfrentaremos los problemas que afligen a Everia, "declaré con voz firme, aunque mi mirada inicialmente se mantuvo baja".
"Después de unos segundos, levanté la vista y mi mirada recorrió la sala. El polvo cubría todos los muebles, incluido el trono, que una vez había sido el símbolo del poder y la autoridad. La luz tenue que se filtraba por las ventanas sucias y mohosas apenas iluminaba el espacio. El suelo estaba deteriorado y los cuadros que alguna vez habían adornado las paredes ahora yacían despintados o destruidos en el suelo".
Guardia>>> Y bien..."un guardia cuya armadura mostraba signos de desgaste y cuya espada oxidada colgaba a su lado, habló desde la multitud. Su mirada reflejaba el agotamiento y la angustia que parecía haberse apoderado de todos los presentes. dijo con un tono cargado de sarcasmo y desesperanza", ¿cuál es la decisión que su majestad ha tomado?
"Su voz resonó en la sala, llena de un escepticismo que no intentaba ocultar. Los demás guardias, igualmente desgastados y cansados, se movieron incómodos, como si esperaran una respuesta que podría cambiar su destino".
"La atmósfera en la sala se volvió aún más tensa, como si la pregunta del guardia hubiera desatado una serie de expectativas y miedos. Todos esperaban, con la respiración contenida, mis palabras".
Elizabeth>>> "Mi mirada nerviosa recorrió la sala, posándose en los guardias y los plebeyos que me observaban con expectativa. Sus ojos estaban fijos en mí, llenos de esperanza y desesperanza. Las ropas de los plebeyos estaban rotas, malgastadas y cubiertas de polvo. Todos temblaban ligeramente, y sus cuerpos delgados mostraban signos evidentes de desnutrición. Algunos incluso tenían la mandíbula marcada, con los huesos visibles bajo la piel".
"Tomé una profunda respiración y comencé a hablar, tartamudeando ligeramente pero manteniendo la firmeza en mi voz". Muy bien, todos... Esto es lo que he decidido. Dividiremos el total de los guardias en dos grupos, el grupo uno se posicionará en los muros y tirarán flechas para eliminar a cualquier enfermo que se acerque o siga vivo en los campos que se encuentran fuera del castillo. El grupo dos, saldrá a limpiar la zona de infectados, manteniendo una distancia segura.
A los civiles se les proporcionarán ropas protectoras para que puedan limpiar el área contaminada con el líquido de los enfermos. Los médicos les proporcionarán todo el material necesario para que puedan realizar su tarea de manera segura.
"Justo cuando terminé de hablar, un estallido de gritos y quejas surgió de un grupo de plebeyos en el centro del salón. Sus voces se elevaron en protesta, llenando la sala de descontento y frustración".
Plebeyos>>> ¿Cómo espera que limpiemos ese desastre?, "exclamó un civil, con su voz cargada de enojo". ¿Y qué pasa con nuestras vidas? ¿No le importa que estemos en peligro?.
"Otro civil se sumó a la protesta, con un tono hostil y desafiante". ¿Acaso usted no tiene el valor de salir afuera y enfrentar el peligro? ¿Para eso es la reina, no?. "La multitud comenzó a murmurar en acuerdo, sus voces creciendo en intensidad".