Un plan perfectamente imperfecto

Capítulo 7

 

—¿Ella va a estar bien? —le pregunte a Ariana.

Había llevado a Emily a su casa, estaba realmente deprimida, pero no quería que estuviera en mi casa cuando Regina llegue. No le había respondido su último mensaje, pero sin duda lo iba a hacer en persona.

—Yo cuidare de ella —asentí y me fui. Iba a regresar más tarde, pero ahora quería enfrentar al mayor demonio de mi casa y yo iba a hacer una limpia a la fuerza.

Antes de entrar a la casa, y saber que esto iba a hacer un desastre, le mande un mensaje a Axel.

Samantha: ¿Cómo estás?

Me metí a la casa y como esperaba Regina ahí estaba, junto con mi madre, en la sala de estar.

—Te estábamos esperando —dijo mi madre, estaba realmente seria.

Volteé a ver a Regina y vi como sonreía descaradamente. ¿Ahora que hizo esta mujer?

—¿Sucede algo? —vi a mi madre apretar la quijada y se agarro la cabeza mientras soltaba un suspiro.

—¿Todavía lo preguntas? —por lo general mi mamá no se molesta. Se que tiene que ver con mi pelea con Regina, pero el problema es que Regina es una mitómana y cambia las cosas a su manera. A Regina le encanta que yo quede mal y a mi madre, por alguna razón, le encanta creerle—. Siéntate.

Me senté enfrente de ellas dos y cuando mi madre miro a Regina ella cambio su rostro completamente, paso a sonreírme descaradamente a mirar a mamá con cara de cachorrito triste. Como buena perra.

—¿Qué te sucede? —mi madre gritoneo—. No había podido hablar contigo, pero creo que ya es hora de que lo haga. ¿En donde haz estado todo este tiempo? Te desapareces por días—. Fue inevitable no girar los ojos y soltar una pequeña risilla. Desde que tengo uso de memoria he pasado la gran parte de mi vida fuera de casa.

Siempre preferí estar en cualquier lugar que no fuera mi casa, por lo general era irme con mis amigos después de la escuela y si eran vacaciones prefería irme a campamentos o cursos de verano, lo que sea con tal de no estar en casa. Mi madre nunca había tenido problema con eso, claro, hasta que afecto a Regina. Parece que no me doy cuenta de las diferencias que mi mamá hace, per es todo lo contrario, solo que es más fácil ignorar la situación, que enfrentarlo.

—Pasé una situación difícil y fui con Emily para…

—¿Tú tuviste una situación difícil? —mi mamá me interrumpió— No fuiste tu quien recibió golpes de tu hermana. No se que es lo que te esta sucediendo, pero estas castigada.

—¿No quieres saber por qué lo hice? —me quejé.

—¡No te quiero oír!

—¡Tu hija es una hipócrita! —vi a mi madre levantar la mano, esperaba el impacto de su palma, pero no llego. En cambio, empecé a escuchar los llantos de Regina. Las dos volteamos a verla y ella solo tenia la mirada puesta en su celular. Mi madre se le acerco como si acabara de tener un gran accidente.

—¿Qué paso mi amor? —Regina solo giro su celular y logre ver la foto que me había tomado con Axel. Había difuminado el fondo y puso una canción en la historia (The Weeknd-The Hills). Logré disimular la sonrisa de mi cara y subí a mi habitación sin decir una palabra.

Ya adentro me recosté en mi cama sin saber que sentir. Estaba feliz por ver a Regina, pero cada que mi madre hablaba hacia que me sintiera mal.

Solo en mi cuarto reí, no sabía porque lo hacía, pero era lo único que podía hacer. Hay momentos en los que te sientes sedada por tus mismos sentimientos, son esos momentos en los que lo único que puedes hacer es mirar el techo sin sentir absolutamente nada, pero el horrible hueco en el pecho se sigue sintiendo.

Agarre mi celular y marque al teléfono de la casa de Emily.

 

 

Abrí mi computadora y estuve buscando departamentos en Canadá por un largo tiempo. No quería que fueran muy caros, mi papá, él cual falleció antes de que yo naciera, dejo dinero para nuestras universidades. Aunque a Regina jamás la e visto utilizándolo, aun así, necesitaba cuidar ese dinero por si necesitaba más cosas.

Prendí mi celular, que estuvo apagado por horas. Y el primer mensaje que me llego fue el de Axel.

Axel: Bien ¿Y tú?

Dos horas después.

Axel: ¿Todo bien?

Gire los ojos al recordar lo que paso. Me había quedado dormida después de hablar con Emily.

Samantha: Estoy castigada

Samantha: Pero equis. ¡Regina ya vio la foto!

Pasaron apenas unos minutos y Axel ya había respondido.

Axel: ¿Por qué te castigaron? ¿Estas bien?

Axel: ¿Ahora que deberíamos de hacer?

Desde que conozco a Axel siempre fue sobreprotector. Regina amaba eso, claro cuando solo lo era con ella. En cambio, sí era conmigo tenía que hacer una escena de celos, nunca supe por qué. Siempre que estaba con las amigas de Regina estaba bien, pero conmigo era diferente, odiaba la idea de que estuviera con su novio.



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En el texto hay: amor, fingiramor, amor infidelidad

Editado: 29.08.2023

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