Capítulo 10: Destrucción del parásito

Capítulo 10: Destrucción del parásito

Alucard se asombró y asusto cuando uno de sus tentáculos de magia logró sacar un parásito parecido a una larva con la cabeza de un humano.

La cosa asquerosa y repugnante fue escarbada del intestino de Bextril y ahora con un agujero en el abdomen la prima de Alucard despertó de manera lenta.

Bextril abrió los ojos y vio al príncipe Alucard con una magia extraña conectada en su estómago y se alarmó por el miedo, no tardó en gritar — ¡Ahhh! ¡No me mates primo!— grita la niña del miedo al no saber la situación.

Alucard miró la reacción de Bextril y no se sintió desconcertado. Ya había esperado algo como esto desde hace tiempo, de manera lenta habló —Bextril, esta cosa fue sacada de tu abdomen. Parece que estabas siendo controlada— dijo explicando la situación a la asustada Bextril que al ver la criatura repugnante se asustó mucho y no tenía fuerzas para gritar, solo miró a Alucard con una cara llena de horror y una piel pálida.

Alucard asintió y habló— Tranquila, esta cosa es un parásito o más bien un mago que se convirtió en parásito, el propósito de este malvado mago es vengarse de tu padre y destruir a la familia cuando logre tomar control total de tu cuerpo y te coma— dijo de manera lenta para así lograr controlar la ansiedad de la niña.

Bextril seguía sin calmarse, pero entendió que fue salvada por Alucard y ella lloró. Al llorar del miedo se acurrucó en una bola y eso hizo que la herida grande del abdomen se abriera un poco más.

Alucard vio la situación. No tardó mucho para liberar su magia y así cerrar la herida, funciono en poco tiempo esa herida fue cerrada como por arte de magia y Alucard respiro aliviado al ver que todo está bajo control. Pero miró a la criatura repugnante que tiene en la mano y se sintió disgustado.

Alucard habló— Voy a tratar con esta cosa— dijo y se acercó a la mesa para volver donde está Bextril con la criatura en un frasco de vidrio.

La niña hermosa de cabello rojo y ojos amarillos se levantó del suelo para revisar las heridas curadas, entonces habló— Gracias por salvarme, eres mi héroe. Yo tenía mucho miedo cuando dormía, siempre veía a ese gusano feo en mis sueños que se comía a toda mi familia y reía— dijo con una cara llena de horror al recordar esos sueños.

Alucard sabía que había logrado proteger al reino amarillo de una destrucción total y también salvo a su hermosa villana, aun así no espero nada a cambio. Después de todo este asunto se arreglo, pero por alguna razón Bextril lo miraba con esos ojos brillantes llenos de emociones indescriptibles.

Bextril se acercó al quieto Alucard que tiene el frasco en la mano y acercó su rostro al fracaso de vidrio par ver mejor a la cosa fea, ella dijo — Alucard, hay que matar a esta cosa, recuerdo todo lo que hizo con mi cuerpo. Solo podía ver con miedo y no podía moverme, era un espectador en mi propio cuerpo. Quiero quemar y torturar a esta cosa por todo lo que me hizo hacer— dijo con una cara fría llena de intenciones asesinas.

Alucard vio esto y no dijo nada, solo pensó.

Miró de nuevo al gusano con cara de humano y viceversa ese gusano le regreso la mirada con unos ojos llenos de miedo. Alucard no dudo más, repentinamente un papel arrugado fue prendido y puesto adentro del fracaso, los gritos de la criatura fueron muy humanos.

Ambos se quedaron viendo como la criatura era consumida por las llamas y asfixiado por el humo.

Alucard miró de reojo la carita de Bextril y se sintió feliz de que no estuviera riendo por la tortura, al contrario,, ella llora del alivio para derrumbarse y llorar más fuerte.