XXIV

(…) Damián lanzó un golpe sobre Karlie… – te tengo – pronuncia ella al crear una barrera; deteniendo el golpe y levantándose pateando el hombro de Damián

– eres ruda cuando quieres – pronuncia Damián

– ¿vas a seguir hablando? –

– qué ser tan insoportable –

(…) decidida a vencer a Damián, Karlie atacó saltando desde el sillón directo hacia él… Antes que ella llegara a tocarlo; Damián extendió su garra y sujeto en el aire con su fuerza espiritual comprimiéndola poco a poco – tramposo – reclama ella mientras trata de librarse… – pronto te desmayaras – pronuncia Damián al seguir sujetándola… Karlie comenzó a enfurecerse, y poco a poco su energía se manifestaba por todo su cuerpo; Damián al notarlo presionó más fuerte, pero no fue suficiente. El poder de Karlie comenzaba a descontrolarse y de un gran estallido se libero pronunciando  – te venceré –

– me alegra que hayas despertado todo tu poder niña –

– te voy aplastar – menciona sonriendo

– basta eso es todo  – exclama serio

– no – expresa sonriente

(…) antes que Damián pudiera dar una respuesta ella se abalanzó con un veloz ataque sobre él. Esquivando el movimiento de Karlie él pronunció – dije: “basta” – para luego invocar el mal ¡TINIEBLAS!

(…) mientras la habitación se llenaba del mal tinieblas Karlie movía los brazos desesperadamente hasta que cayó al piso. Enseguida Damián fue a levantarla del piso, la tomó en sus garras y… – eso ya no funciona conmigo – susurro Karlie dejando sorprendido a Damián

– ¿me engañaste? –

– me afecto un poco al principio, pero me temo que eso no volverá a pasar – aclara Karlie

– de pie entonces – menciona Damián al querer bajarla

– espera no me bajes ¿me llevas a mi cama por favor? –

– de acuerdo, pero debes descansar enseguida –

(…) luego de dejar a Karlie en su cama Damián regresó a la sala, vio alrededor y pensó – que desastre hizo esa niña –

Tomando en cuenta lo tarde que era y que pronto llegaría Ana, Damián se apresuró en arreglar la sala para que no se notará que allí hubo una pelea.

[mientras tanto en otra ciudad]

(…) Treidsek había registrado casi todo lugar, y asesinado a quien se negaba a darle información. Estando de pie sobre unos cuerpos inertes pronunció – he tardado mucho en recuperar esos objetos y aún hay mucho terreno por recorrer –

(…) Treidsek, Desmond, Arkanieth: tres seres buscando desesperadamente los objetos sagrados. Cada uno desconociendo los métodos del otro para acercarse más hacia ellos.

(…) pasaron las horas y para entonces Karlie había liberado el poder contenido en el espejo. Claro luego de que Damián se lo pidiera de favor

– nos hubiéramos evitado la pelea si de principio hubieras dicho “por favor” – comentó recostada en su cama

– comprende que mi paciencia se agota muy rápido en ciertos escenarios –

– supongo que ahora eres más fuerte. Y yo que estaba a punto de vencer te –

– no estabas ni cerca de hacerlo. Aunque admito que fuiste un fastidio –

– oye soy mas que eso –

– tienes razón, eres un verdadero fastidio –

– no quieres admitir que casi te ganó –

– no hay nada que admitir. Tuviste un gran avance no lo niego, pero ahora tienes que aprender controlar tu fuerza espiritual. De esa manera no terminaras exhausta –

– si me canse un poco luego de luchar contigo –

– es por eso que debes aprender a controlar la energía. De otro modo no durarás ni cinco minutos en la pelea – pronunció pensado que en algún momento tendría que enfrentar a Treidsek o Emma –

– ¿Pelear?... Te pedí entrenarme para defenderme de ser necesario. Yo jamás busco pelear, de hecho las evitó

– debo irme –

– ¿Por qué? ¿Hay algo que no me has dicho? –

– trata de dormir temprano – comenta al dirigirse a la ventana  

– no te puedes ir sin… se fue de todos modos –

(…) era claro que Damián ocultaba algo, sin embargo Karlie no tenía idea de lo que era; después de todo quien puede saber todo lo que pasa a su alrededor.

[al siguiente día]

(…) Emma había despertado muy temprano por la mañana pero de otra forma poco habitual. Emma logro dominar la proyección astral, así su proyección se manifestó fuera de ella; dándole tiempo de descansar a su cuerpo mientras puede seguir aprendiendo del “libro negro”

(…) en ese momento Karlie salía de la ducha; regresando a su habitación. Una vez entró se despojo de la única toalla que la cubría dejando en evidencia la sutil figura que ella poseía. Mientras poco a poco se vestía, de un costado de su cama salía Damián, viéndola fijamente por unos segundos pronunció – creo que llegarás tarde si no te apresuras –… un frío recorrió de pies a cabeza por el cuerpo de Karlie; dando un salto del susto grito – ¿Qué haces ahí?

– descansaba un momento –

– ¡Me estabas espiando pervertido! –

– cuando entre no había nadie – se justificaba Damián

– ¿Entonces esperaste a que regresará y me quitara la toalla? – reclamo

– me quede dormido un momento  en el piso – comenta al erguirse –

– pero tienes el armario para descansar –

– es incómodo, además está lleno –

– ¡PERVERTIDO! –

– volveré a acostarme en el piso –

(…) viendo que el tiempo estaba en su contra, Karlie continuó vistiéndose sin darle importancia que Damián estuviera en la misma habitación. 
Esa misma mañana alguien visitaba a la señora Julie. El visitante se anunció a la puerta como Dennis. Los amigos que una vez se dejaron de hablar y ver desde hace años poco a poco desempolvaban su vieja amistad.

– ¿Qué haces aquí? – pregunta sorprendida

– antes que nada se dice “buenos días, que gusto verte” –

– pues verte aquí no me da gusto verte y por eso no son buenos días –

– te has vuelto gruñona – expresó sonriente –

– ver a uno de ustedes aquí me amarga. Primero  llegó Joseph ahora tú –

– es bueno saber que Joseph esta bien. Te parece seguir con la platica dentro de tu casa –