Una historia depresiva para gente depresiva

Capítulo 25: 2 semanas Después

El tiempo se fue volando y los problemas con ellos, Nick y Elena vivían su vida de solo salir y ver que hacer, mientras por primera vez (1) Nick le hace una pregunta a Elena de la nada en una cena entre los dos luego de haber salido toda la tarde. 
-Elena, dime ¿Qué planeas para el futuro? 
Elena se sorprende, pero luego le dice. 
-Sabes Nick, yo salí de mi país para conocer el mundo, para sentirme bien conmigo y encontrar la verdadera paz. 
-¿Y ….la encontraste?. 
-Si, si la encontré. 
-Y como así. 
-Bueno, una vez cuando estaba en una catarata en la selva central de tu país, vi cómo la gente era feliz, nadie renegaba en ese momento y nadie se hacía problemas, solo era alegría y diversión, en ese momento entendí que los momentos más agradables son los que compartes con los que quieres, porque si no son solo recuerdos de ti mismo; los especiales, son especiales por una razón ¿no? Bueno, por otro lado, el día que te conocí ese día tenía que salir de la ciudad a las 12 de la madrugada, pero, aunque parezca raro, paso algo con el que nos llevaría que al final se canceló, luego vería como me iría, pero en ese momento gracias a un amigo que te conocía, supe un poco más de ti y ……. no lo sé, pero sentía que debía de ayudarte, tal vez me hubieses rechazado o me darías por loca, pero vi algo en ti, que me dio mucha confianza, y me decía que tu no harías eso. 
-Muy raro …. 
-Si, muy raro, confiaste en mi ese día sin temer que pudiera pasar algo. 
-Mm si lo pones así, ese día también sentí en ti que podía confiar, si, muy raro.
-Nick, tienes que saber que no me quedare mucho tiempo, también debo de regresar a mi país, aquí no tengo …. Lugar estable. 
-Si, entiendo. ¿Y en tu país estudias o que haces? 
-Estudio Ingeniería ambiental. 
-Ah enserio, ¿Y porque no lo comentaste? 
-Tu nunca me preguntaste. 
-Jaja, si, tiene mucho sentido. 
-Bueno y Nick, ¿Qué piensas hacer ahora? 
-Ah, no lo sé, supongo que seguir con mi vida, que más me queda. 
En ese momento ella sonrió y se acercó a él, lo miro a los ojos y lo abrazo, luego de unos momentos le dice: 
-Te voy a extrañar. 
El chico solo hizo lo que debía de hacer en ese momento, la abrazo y se quedaron así por unos segundos, segundos hermosos para los dos, luego reirían y con miradas mutuas él le diría: 
-Si es que ya no nos queda tanto tiempo, entonces hagamos de lo que nos resta inolvidables. 
-Como lo harás? 
-Es una sorpresa. 
Las horas pasaron y Nick ahora se encontraba en un supermercado comprando cada tipo de alcohol, nadie lo acompañaba, Elena se había ido a la playa con sus amigas y el aprovecho para salir sin decirle nada. Mucho alcohol y algunas golosinas, y para él, dos cervezas de lata, lo que más le gustaba a parte del vino. Al salir y empezar a guardar las cosas en el auto una chica se le acerca a lo lejos sin que él se dé cuenta , ya cerca le diría si podía darle su autógrafo , el no tenía tanto tiempo ,pero aun así sonríe y le dice: “Claro” , da la firma  que siempre da , le entrega el libro que le había dado y así la chica feliz le da las gracias y lo abraza y le dice unas últimas palabras antes de marcharse, palabras que tal vez , el nunca olvidara “No vuelvas a desaparecer , hay gente que te quiere y no toleraría perderte de nuevo “.El no supo que decir y viendo como la chica , de tal ves unos 16 o 14 años se alejaba al coche con sus padres y su hermana , niña que al ver lo que tenía su hermana en la mano se alegró y mostro una expresión de sorpresa , entonces él sonrió y antes de sentir un sentimiento fuerte , entro al auto , bajo las lunas y puso la radio , en el volante , una palabra nadaba  por su mente “Perderte , perderte , perderte “ se repetían muchas veces hasta que el chico prendió el auto y se alejó del lugar , un poco de rock y cautelosamente una botella escondida de vino , que llevaba un envase que hacía que todos creyeran que estaba tomando algo normal y no vino . 
Cuando llego a su departamento , puso todas sus cosas en la mesa y se echó en el mueble de su sala , trato de calmar su mente y tocando sus hombros y sus piernas noto como se arrugaba una hoja de papel dentro de su bolsillo izquierdo , la carta que encontró en su antiguo departamento , esa hermosa letra y al final de terminar la carta unas gotas que quedaron como marca de lo triste que fue para el que la escribió , el sentimiento muerto esta ves había regresado y con ellas sus grandes garras que destrozaban el interior del chico, el único sentimiento que nunca desaparece , el único sentimiento que no se olvida , ese , que aun que te da muchos gratos momentos también puede darte los peores , si ,el amor ; pero , hermanos míos esta vez fue distinta , esta vez no hubieron lágrimas , solo dolor , solo ese dolor penetrante y luego de eso , una sonrisa , más luego una risa , y para terminar un último respiro ,él se echaría de nuevo en el mueble para mirar la sala y tratar de cesar ese fuego interno, cuando de repente un sonido mueve todo de él , su celular , sonaba por un mensaje (1) que hizo que el regresara en sí , que al contestar , regresara en él el sentido , y aun que ese sentimiento siguia presente, el lucho contra ella y gano . ¿por qué?, porque lo había prometido. 
Cuando Elena llego todo su rostro estaba rojo, indicativo que estuvo expuesta al sol. Nick en la cocina no la vio entrar , pues ella entraría a bañarse directamente, Nick aprovecha esto y acomoda todo en la mesa con tanta rapidez que cuando termina es en el momento cuando ella sale de la recamara, se escucha unas palabras detrás de la puerta y él se acerca a la puerta junto con una botella que llevaba un listón rojo amarrado en él, y cuando ella sale lo mira y luego ve lo que tiene en las manos , sorprendida pregunta ¿Qué es , esto? , a lo que da unos pasos y cerca a ella le dice: -Es mi sorpresa , una cena honorable , ¿Qué te parece? -. Ella mira la mesa que estaba decorada hermosa mente con un mantel blanco, en medio un florero de vidrio que llevaba dos girasoles tan amarillos y hermosos y varias rosas, rojas y amarillas, tan hermosas que decoraban la mesa perfectamente; a cada lado de la mesa se encontraban dos platos perfectamente acomodados, y a ambos lados también unas sillas perfectamente acomodadas que a la vista se mostraban muy suaves y cómodas. El la invito a sentarse y ella acepta. La botella de vino entonces fue abierta por el chico que delicadamente sirve en cada copa. Una comida deliciosa, comprada claro (2), que dejo mucho más que perfecta la noche, una noche que después se volvería en un recuerdo, un recuerdo hermoso y cálido de esos momentos de verano cuando nada más importa mas que vivir. 
-No pensé que sería así, pensé que sería algo distinto -Dijo Elena -. 
-Bueno, quería que fuera especial. 
La chica miro al chico que ya se había sentado y que frente a ella movía un poco la copa, ella tomaría su mano y diría: -Gracias -. Entonces dejo su mano y tomo también su copa y brindaron por los momentos fantásticos, aquellos momentos que serían más que inolvidables. Muchas risas y varias palabras, y aun que recién eran las 5 ninguno de los dos había almorzado y a pesar del error del chico al nombrarlo cena, no importaba, pues el momento, era grato. 
Cuando terminaron de comer, siguieron tomando vino, contándose cada anécdota; risas juntas de la mano con historias y relatos únicos de ella y de él, entonces ella le diría: 
-Sabes Nick, no me arrepiento de haber venido a este país, al principio mi destino era más al sur y no tenía planeado quedarme, pero hice muchos amigos y eso es lo que importa, desde el primer día, conocí gente muy agradable y, además, por cosa del destino, te conocí a ti. 
-Si, cosa rara, la vida está llena de misterios. 
-Ahora que regrese a mi país llegare con una gran sonrisa y muchas historias, y un recuerdo tan hermoso, que nunca olvidare -. Dicho esto, de ella brotaron unas lágrimas y el chico que se mantenía sentado miro como ella sollozaba, entonces se levantó, se agacho a su lado y mirándola a los ojos le dijo - ¿Sabes qué es lo bonito de los recuerdos?, Es que se pueden volver hacer nuevos siempre -. Un abrazo y la oscuridad callo lentamente después de la puesta de sol, y para eso ellos aún seguían abrazados.




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