Capítulo 3: Un descanso amistoso

El resto de julio paso lento, Liam y Tom, en especial Tom, esperaban largas horas a qué pasará el tiempo. Entre una actividad y otra a Liam le sorprendió que faltarán solo unos días para agosto, se la paso imaginando que haría con Jack y que clase de vida tendría. El día acordado llegó y Liam fue el primero en levantarse, tomo una buena ducha y cuando bajo el desayuno estaba servido. Al terminar subió rápidamente y tomo su baúl, la jaula de su gata y a su gata, por supuesto, llamada Aura. En el callejón Diagon todo parecía más relajado, la gente pasaba por la calle y miraba estanterías y vitrinas, Liam miraba entre las personas por si veía a alguien familiar. Liam tenía una libreta en donde anotaba listas de objetos, repasaba la lista de título "Hogwarts segundo y agosto" en donde tenía la lista de útiles del año, una lista de pertenencias y de ropa, pasaba la vista por los puntos hasta que de repente alguien lo interrumpió.

-Hola Liam! – dijo Jack enfrente de el

-ah, Jack!

-qué tal? ¿Todo listo?

-sí, tengo todo lo que el colegio

-tu varita también?

-oh, como pude ser tan olvida… - Liam apunto rápidamente a Jack en la nariz con su carita – claro que sí, obvio no?

-wow, eso fue rápido jaja, bien, vamos

-claro, pero… como vamos a tu casa?

-jeje, ven, ya verás – Liam tomo su baúl y Jack le ayudo a cargar la jaula de aura. Caminaron hasta la casi entrada del callejón Diagon por el caldero Chorreante. Pero antes de pasar dieron una vuelta, a la derecha, había grandes chimeneas. Jack se puso enfrente de una y Liam lo vio extrañado.

-bien, ahora toma esto – dijo y saco un saquito con polvos verdes dentro – esta de aquí es una chimenea conectada a la red flu

-red flu?

-sí, es una red que usamos los magos para ir de un lugar a otro, es por chimeneas, está es una común y pública, podemos usarla para ir a mí casa, es mucho más rápido que ir en escoba! – explico Jack emocionado

-wow, pero… como nos aseguramos que ningún mago extraño nos siga?

-oh, no te preocupes por eso, para empezar, tenemos que decir el nombre de la chimenea a la que queremos ir, tiene que ser fuerte y claro, y por los magos extraños ni te alteres

-bueno, supongo que es cosa de… bueno, magia

-sí, bueno, mira – Jack tomo un puño de polvos y los enseño a Liam – estos son polvos flu, tienes que tirarlos con fuerza y decir el nombre de la chimenea, el nombre de la que está por mi casa se llama "Campo Archer" dilo así y arroja los polvos dentro, en un instante estarás ahí

-ok, entiendo

-bien, ten el saco – Jack le dio el saco a Liam y este lo tomo – iré yo primero, hazlo igual que yo y llegarás

-Sí, estoy listo

-perfecto, ahora mira – Jack entro a la chimenea y grito – ¡Campo Archer! – un fuego verde lo cubrió y un segundo después Jack desapareció, Liam quedó asombrado

-increíble… ah, voy yo! – Liam se metió en la chimenea, tomo polvos flu y con la otra mano tomo su baúl, se aclaró la garganta - ¡Campo Archer! – Liam sintió como un fuego lo envolvía, pero no con una sensación de calor, vio como pasaba por un montón de lugares con chimeneas que no podía distinguir, el viaje era turbulento y Liam se sacudía de un lado a otro. Parecía como si hubiera pasado más de un minuto, pero no, 5 segundos después Liam salió disparado hacia delante junto con su baúl

-bien, llegaste – dijo Jack sacudiéndose y con la jaula de aura temblando a un lado

-auch, sí, creo que si – Liam se incorporó y vio a su alrededor, se encontraban en una pequeña caseta de madera con una vela flotando por ahí

-estamos en la caseta de llegada – dijo Jack – mi papá la construyo cuando acabaron la casa, dice que es mejor que este fuera que dentro de casa

-ya veo, solo está la chimenea

-sí, no guardamos nada aquí por qué podríamos chocar con el

-entiendo, ay – dijo Liam sobándose la espalda

-no te preocupes, te acostumbras rápido, ah, claro! Salgamos, ¡ven! – dijo Jack emocionado y abrió la puerta, Liam tomo su baúl y la jaula de aura. Al salir se encontró con un bonito campo verde, había un huerto pequeño y una extensión enorme de plantas, sin duda alguna Liam ahora entendía por qué regarlas era un castigo.

-wow, esto es gigante!

-si, por ahí tenemos una pequeña granja, como ves ahí están los tomates y la flores… ay, son bonitas, pero regarlas no lo es tanto

-pues sí que era un campo

-sí, mis padres eligieron un lugar tranquilo para vivir, además más para el sur hay un pequeño pueblo, es de magos, no hay muchas cosas interesantes que hacer, pero tiene todos los suministros necesarios, ah, y mamá vende leche y verduras los domingos ahí

-increíble, yo vivo en una zona residencial, no es tan interesante como esto – dijo Liam un poco triste

-oh, bueno, algún día iré a tu casa también, seguro que podemos hacer algo por ahí

-claro, me gustaría

-si… oh, claro, vamos, entra, mi casa es esa – Jack señalo a la derecha, enfrente de la huerta se encontraba una casa grande, de dos pisos. Liam veía una gran casa hecha de ladrillo, aún que no le sorprendía eso, le sorprendía que las casas mágicas fueran tan parecidas a las comunes y corrientes casas muggles. Después de caminar un poco llegaron a la casa, Jack abrió la puerta – ven, pasa, pasa

-gracias – Liam metió sus cosas y entro

-puedes dejarlas ahí, las subiremos después

-sí, gracias – Liam dejo las cosas a un lado y vio la casa, era una casa común y corriente, la sala estaba a un lado, la cocina estaba al fondo, el comedor estaba a la vista y las escaleras estaban atrás del todo

-pues, bienvenido a mi hogar! – dijo Jack feliz – mira, aquí está la sala, tiene sillones muy cómodos, tenemos una pequeña estantería para libros aquí, son muy interesantes por si quieres leerlos, ah, y tenemos una radio, hay estaciones para magos! – Jack pasaba de un lado a otro de la habitación, después salto a el comedor – este es el comedor, aquí bueno… comemos jaja, y ahí al fondo está la cocina, ven