Un Largo Viaje

-Último llamado para el vuelo a Inglaterra.

-Fer, te voy a extrañar, pero te prometo que te llamaré todos los días-creo que se me salieron unas cuantas lágrimas.

-Cam yo también te voy a extrañar y te iré a visitar en las vacaciones así que no llores porque me haces llorrar y muevete que te va a dejar el vuelo.

-Te quiero!!, dile a Carlos que también lo llamaré y que si deja que te pase algo me vengo de donde sea y le doy su buen golpe.

-Jajajaja, Camila estas loca.

-Y así todo me amas, adiós.

Luego caminé, subí al avión y creo que lo demás es historia...no, es broma. Luego de estar en Inglaterra me enviaron la dirección de la propiedad, lo bueno era que quedaba en la ciudad en la que habia aterrizado, Londres, era hermoso todo a mi alrededor, así que caminé por un largo rato hasta que me perdí y como ya habian pasado unas horas opté por pedir un uber.

-OMG!!!!!! es hermoso ¿seguro no se equivocó?.

-No señorita esta es la dirección.

-Muchas gracias-dije y le pagué al señor.

Caminé a la entrada y toqué el timbre, me abrió una empleada y en el recibidor me esperaba el abogado.

-Un placer conocerla por fin señorita Camila.

-Muchisimas gracias, sineramente no esperaba todo esto.

-Su bisabuelo era un gran empresario y usted era su única familia, por lo tanto siempre la tuvo en cuenta. 

-Yo por el contrario no sabía de su existencia y la verdad me hubiera encantado conocerlo. 

-Fue un gran hombre, pero bueno la dejo, María le mostrará la casa y la atenderá para lo que necesite. 

-Muchísimas gracias y que pase una buena noche. 

Luego de que el abogado se fue María me enseño la propiedad que era como la de un cuento, perfecta, era elegante, sofisticada, pero principalmente acogedora se sentía como un verdadero hogar. 

Finalmente decidí ir a mi habitación y desempacar mi maleta pero me lleve una gran sorpresa con tremenda hermosura, estaba decorada con un clásico pero con detalles modernos y luego recordé que no había llamado aún a Fer así que hicimos una videollamada por un largo rato mientras María organizaba lo que había traído y creo que eso fue suficiente ya que aquí había de todo, hasta Fer se quería venir a vivir conmigo y le dije obviamente que era bienvenida cuando quisiera y ya siendo muy tarde caí en un profundo sueño.