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INICIO DE FLASH BACK

En una noche de verano con una sensación térmica de cerca de 43 grados, salimos a jugar fútbol mixto como solíamos hacer algunos fines de semana. Cristina una amante del fútbol le encantaba jugar de defensa y distraerse para olvidar todo por un momento.

-. No puedo creer que pueda jugar – aquí venía Leyla con su sequito de nuevo a molestar a pesar de haber sido vecinas ya por más de diez años ella siempre tenía algo en su contra.

--. No será que estas – se aclaró la garganta - celosa porque nunca la puedes pasar y siempre les ganamos – esa era Luz como siempre sacando cara por su mejor amiga.

-. Ja ya veremos – eso no era bueno y Cristina sabía que algo planeaba y bueno apareció aquel chico que le gustaba, sin embargo, no sabía porque ya que no era muy agraciado simplemente era amable y muy carismático; pero había jurado que nunca volvería a repetir su nombre y lo cumpliría a pesar de todo.

-. Se formaron equipos como siempre y Luz estaba con ella en la defensa en el arco colocaron a aun varón ya que muchas veces los tiros en realidad fuertes y empezó el juego el hermano menor de alguien que iba era quien controlaba el tiempo. Ya estaban en el segundo tiempo y faltarían no más de cinco minutos cuando Leyla fue directo a Cristina quien de inmediato le dio pase a Luz para que siguiera la jugada ya que estaban ganando 2 a 0, pero no había tercero malo.

Leyla, sin embargo, tenía la mirada fija en ella y Cristina la esperaba mirándola con detenimiento para poder evitar su golpe o al menos intentarlo en una fracción de segundo ella vio que la iba a patear el lado izquierdo salto y a evito; pero con la fuerza que ella venía termino por chocarse con su cuerpo y rodaron al levantarse Cristina tenia raspones en los brazo y rodillas ya que no llevaba protección mientras Leyla simplemente se sacudía el polvo.

-. Maldita lo hiciste a propósito –Luz se apresuró a ayudar a su amiga – eres una mala perdedora – iba a irse contra ella, pero Cristina la detuvo.

-. No vale la pena, igual ganamos – Cristina no deseaba armar una pelea por algo que en realidad ella ya veía venir.

-. Pero… -Cristina negó y Luz se resignó a pesar de esta muy molesta.

-. Bien vámonos – Cristina debía darse un duchazo y hacer algo con esos raspones.

-. Este partido aún no ha terminado – Leyla refuto de manera altanera.

-. Faltan 2 minutos – gritó el niño con inocencia.

-. De acuerdo – Cristina sabía que Leyla intentaría lastimar de nuevo y esta vez estaría preparada porque ya no se dejaría humillar una vez más por ella.

El juego siguió y Leyla de nuevo iba con el balón, pero esta vez Cristina metió cuerpo haciendo que ella cayera de nalgas y devolviendo la jugada a su delantero, le dolía su cuerpo; pero no iba a dejar que ella se saliera con la suya y fue gol, y un segundo después el grito de que el tiempo había terminado.

-. Te dije que ganaríamos – Cristina le dijo al pasar por su lado ya que se había quedado en el suelo.

-. Como siempre – Luz llegó al lado de su amiga para ayudarla a llegar a su casa.

-. Bebé – aquel chico llego al lado de Leyla y ella recordó porque es que lo había eliminado de su memoria, le coqueteo simplemente para que Leyla se burlara de ella; y lamentablemente ella no se dio cuenta a tiempo - ¿Te encuentras bien?

-. No amor – Leyla pensaba seguir usándolo para lastimarla, pero ella ya había decidió olvidarlo y sin mirar atrás siguió su camino lo que hizo enfurecer a Leyla que se levantó dispuesta a atacarla por la espalda y apareció él.

-. Eso es de cobarde – dijo interponiéndose en su camino – la señorita se está retirando sin decirte nada después de semejante falta.

-. ¿Quién te crees tú para meterte? – él no era del barrio, pero si había jugado en el equipo de Leyla.

-. Alguien a quien le encanta el juego justo y limpio – le refuto.

-. ¿Por qué la defiendes? – Leyla se ponía cada vez más furiosa – acaso te gusta la gorda – otra puñalada más que no era novedad para Cristina.

-. Me gusta, por la excelente defensa que es y claro por su manera de ser porque ni siquiera reacciona a tus provocaciones eso demuestra lo buena que é – y se dio media vuelta para alcanzar a Luz y Cristina – permíteme ayudarte porque se te nota que ya te duele mucho y la herida de tu rodilla esta que sangra mucho – ellas asintieron sin decir nada.

Al llegar a la puerta de Cristina ella le dio las llaves a Lucero para que abra su puerta.

-. Jesús- extendió su mano después de presentarse.

-. Cristina – le dio la mano y él la apretó con delicadeza.

-. Espero que te recuperes y verte más seguido – se despidió sin más.

-. Otro admirador – Cristina miro mal a su amiga.

-. No tengo ganas de discutir, chau- le dio un beso en la mejilla y se metió a casa.

FIN DEL FLASH BACK

Frank estaba estacionando el auto en ese momento Y Cristina bajo apresurada para ir a la habitación de Jesús. Encontró al doctor y a una enfermera en elintrior al parecer retirándole el tubo y poniéndole oxígeno.

-. ¿Cómo se encuentra? – Cristina intentaba controlarse, pero ella sabía bien que la emoción la invadía.

-. Estable – respondió el doctor algo descortés – no lo hagan hablar mucho – se retiro

“Que genio, para eso no debía estudiar esta carrera si no le gusta tratar con personas”

-. Gracias – ella se adelantó a verlo, pero parecía sedado - ¿Jesús, puedes hablarme por favor? – era una pregunta cargada de ansiedad y temor, pero no había respuesta – FRANK – llamó urgente

-. Dígame – él estaba a los segundos en la puerta

-. Ve por un doctor, ya – dijo muy angustiada. Él salió ya los pocos minutos regreso con un doctor un poco mayor.

-. ¿Qué sucede? – pregunto mirándola con paciencia o algo así.

-. Doctor él despertó – Cristina le señalo a Jesús – cuando llegamos había un doctor y una enfermera; pero ahora él ya no responde – el doctor lo examinaba y Cristina sentía que lo hacía demasiado lento para su gusto.