11. San Horror

14 de febrero del 2023

No es que odiara San Valentín, simplemente no me gustaba, supongo porque veía a todas esas parejas teniendo una cita romántica, incluso la televisión estaba en mi contra porque casi siempre, por no decir siempre, había algo relacionado.

Ahora que tenía pareja no sabía ni cómo sentirme al respecto. Era una relación a distancia, así que mucho no se podía hacer para celebrarlo juntos. Además, estaba demasiado segura de que aún seguía durmiendo, así que esperaría a que me hablara.

Por mientras me puse a preparar lo que iba a repasar hoy, porque sí, me había propuesto estudiar con tiempo, no quería fallar en mis exámenes, porque de verdad quería entrar a mi carrera.

Estaba demasiado preocupada por todo, quería que todo estuviera perfecto, sin ningún imprevisto a la vista. Supongo que en estos momentos, mi perfeccionismo me estaba ganando y afectando un poco.

—¡Cielo! —salí de mi escondite, ya que me había tapado entera con la sábana porque me molestaba la luz— Pareces un vampiro cariño —dijo mi madre divertida, logrando que volteara los ojos mientras ella soltaba una pequeña risa.

—Gracias mamá, eres tan encantadora como siempre —me costó demasiado levantarme de la cama, ayer me había dormido a las tres de la mañana por estar hablando con Luke, porque eras una de las horas donde más podía hablar, según había descubierto.

—Son las ocho de la mañana, creo recordar que me dijiste que te levantara —asentí mientras me levantaba para hacer la cama, mi madre se fue a la cocina y una vez lista fui hacia allí para hacerme un café.

Mi madre ya estaba sentada tomando su café mientras fumaba, odiaba que tanto ella como mi padre lo hicieran. No era bueno para su salud, pero yo no le diría nada, si ellos querían seguir fumando, estaban en su derecho.

Una vez que tomé mi café, fui al salón y le di un beso en la frente a mi hermana, para luego sentarme y encender mi ordenador. Hoy debía escribir bastantes cosas, y hacer otras cosas más que no sentía que no me daría tiempo hacerlas todas, así que rezaba para que sí.

Lo bueno es que era martes, bueno, no sabía que tenía de bueno, lo único claro es que estaba corrigiendo uno de mis libros para mandarlo a la última editorial que abría su convocatoria y acababa el jueves.

Estaba demasiado aterrada, no lo iba a negar, nunca pensé que llegaría a tiempo con alguna, pero al final si pude y estaba demasiado feliz al respecto.

—¿Dormiste bien? —le pregunté a mi hermana pequeña, era lo más importante que tenía junto a mis padres.

Recuerdo que cuando me dijeron que mi madre estaba embarazada, me alegré demasiado. Porque sí estaba demasiado ilusionada con tener una personita que amar. A pesar de todo, siempre sería una de mis personas favoritas, pasara lo que pasara.

Mi hermana y yo teníamos nuestras diferencias, pero siempre que necesitará a alguien, yo ahí estaría para ella, es cierto que nos llevábamos unos cuantos años y que no era lo mismo, pero siempre que ella quisiera hablar de algo, ella sabía que conmigo podría hacerlo.

La quería demasiado, era un rayo de luz, aunque con carácter fuerte no lo iba a negar, era igualita a mi padre, no iba a negarlo, pero tenía un gran corazón, de eso todos estábamos seguros.

Ella asintió mientras desayunaba unas tostadas, sonreí y empecé a escribir en lo que mi madre se iba a llevarla al colegio, así tendría tiempo para hacer todo lo que tenía que hacer sin ningún problema.

Cuando terminé decidí ver si me había escrito Luke, pero no había ningún mensaje, así que solté un pequeño suspiro y seguí escribiendo un rato más, hasta que mi teléfono comenzó a sonar.

Miré la pantalla para ver qué se trataba de Nick, así que ilusionada le respondí de inmediato.

—¡Feliz San Valentín! —solté una risa por su entusiasmo.

—Feliz San Horror —le escuché reírse haciendo que sonriera.

—Ya veo que odias este día.

—En verdad no, podré decir muchas veces que lo odio, pero siempre me han gustado las cosas románticas. El problema es que supongo que a pesar de tener esa persona, pues sigo creyendo que es un día de mierda. Me he explicado horrible, lo sé —hubo un silencio donde de verdad pensé que Nick me había colgado— ¿Nick?

—¿Estás saliendo con alguien? —es lo primero que dijo una vez que dejamos el silencio.

—Sí —susurré, la verdad es que no había querido contárselo a nadie, pero al final poco a poco tuve que hacerlo.

No iba a negar que a Cassie, Hayley y Mia les había parecido una mala idea, porque según ellas no querían que sufriera por un imbécil, pero yo tenía esperanzas de que esta vez sí funcionaría. Así que ninguna dijo nada más, y estuvieron para mí.

—Wow, ¿te trata bien Lex? ¿Es bueno contigo? —susurró él causando que se me formara una pequeña sonrisa.

—Sí.

—¿Segura? En serio, puedes contármelo todo, no voy a juzgarte y voy a apoyarte en todo siempre —le conté, le conté todo y él se quedó callado escuchando todo lo que le estaba contando.

Un rato después me quedé un momento callada, antes de volver a hablar.

—Y eso es todo —susurré.

—Wow, sí que habéis pasado por cosas, pero bueno, si tú crees que esta vez es diferente Lex, pues espero de todo corazón que así sea. No me agrada mucho porque no quiero que sufras, pero si tú sientes que de verdad todo será diferente, pues adelante. Yo estaré para ti en cualquier momento y siempre que necesites hablar con alguien, yo encantado de escucharte. Ojalá todo vaya bien Lex, porque en serio te mereces lo mejor del mundo —dejé escapar algunas lágrimas mientras lo escuchaba— ¿Lex?

—Aquí —susurré a media voz mientras me limpiaba las lágrimas.

—¿Estás llorando?

—No.

—Mentirosa, ¿es que dije algo mal? Si es así lo siento, lo que menos quiero es hacerte llorar, harás que vuelva a ir ahí para pasar el día contigo —ojalá pasara eso.