Cap5

Corrió desesperada hacia él con el pecho saliéndose en latidos. El muchacho estaba pálido, sus labios morados, Valencia levanto un poco la cabeza de este y la colocó sobre su regazo, jamás habían estado tan cerca, ella podía delinear cada centímetro de su rostro, era tan lindo, pero su piel iba tornándose cada vez más gris.

- ¡No vas a moriste ahora, desgraciado, Ricky por dios contéstame! -pidió al borde de las lágrimas. Buscó rápidamente en su bolsillo el silbato para pedir ayuda, lleno sus pulmones para hacerlo sonar cuando la risita burlona de Ricky la detuvo.

- Así que te importo un poco...-Valencia se puso de pie rápidamente haciendo que la cabeza de Ricky golpeara en el suelo-. ¡Auch!, eso sí dolió-se quejó Ricky tratando de sentarse.

-Sos un tarado, me diste un susto de madre, ¿cómo podés ser tan idiota?

-No voy a negarte que me esfuerzo, porque me cuesta serlo, lo que no me cuesta es actuar ¿verdad?

Valencia apretó sus dientes para no desbocarse, si hubiese podido lo desmayaba ella verdaderamente. El grito de La Chona, haciéndole señas para que se apurara hizo que corriera. Ricky la vio irse, cuando ya no la divisó más borró su sonrisa irónica por una mueca de dolor, mientras se recostaba y tomaba aire. Buscó su tubo con pastillas y tomó una. Solo necesitaba tiempo para recomponerse, pero sentía que cada vez era más difícil.

El griterío era del grupo de 2do año de Valencia, quienes sin duda habían ganado el juego, fue con lo que se encontró Ricky al bajar de la ladera de la montaña, con eso y el enojo de Lola.

-¿Dónde te metiste?, me dejaste como una estúpida.

-Ya Lola, no tengo ganas de aguantarte.

-Bueno entonces me buscaré otro que sí tenga ganas- era sin duda una gran diva despechada cuando quería, y eso era casi siempre, algo que a Ricky no le importaba, chasqueo su lengua y encendió un cigarrillo, acercándose a su grupo y aceptando una botella de cerveza que uno de ellos le ofrecía. Lo que sí le molestaba y no quería entender por qué, era ver como Valencia hacia palmas y reía junto a Luis.

Al atardecer la fogata principal era el marco ideal para la elección de las candidatas a reinas de la primavera y el estudiante, algo que se daría al fin de la siguiente semana.

Emi estaba más que hermosa con su cabello suelto que llegaba hasta sus caderas, una simple corona de margaritas, sin una gota de maquillaje, a diferencia de las demás que emulaban a una pintura de Picasso. La música resonaba al unisonó con los gritos casi histéricos de cada curso al anunciar a sus representantes. "El Colo" era un personaje, con sus payasada y humor, era el perfecto acompañante par Emi.

A la mayoría le llamó la atención no ver a Ricky junto a Lola en la pasarela, algo que sin dudas afectaba al humor de la popular chica, la cual no podía disimular su mala cara.

-Tu prima está encantada por lo que se ve-susurro Valencia al oído de Luis el cual sonrió.

-Su príncipe la ha abandonado parece...quizás ya se convirtió en sapo-respondió Luis señalando hacia donde se encontraba Ricky riendo junto a sus compañeros sin reparar en el desfile de su chica que al querer girar fantásticamente se enredó y cayó en la improvisada pasarela, se había torcido su tobillo y gritaba de dolor.