Capítulo 31

Los hijos de la ciudad lloran aquellos que han perdido, hijos, madres, padres, familia, seres queridos que cayeron ante la violencia de aquellos que exigían cambios y respondieron con violencia cuando fueron atacados. Ahora están indignados reclamando venganza, buscando una justicia que se ha perdido desde hace mucho tiempo sin embargo piensan que pagando con la misma moneda podrán sentirse satisfechos, los Bajos también exigen justicia pero no siguen los ideales que buscan. La ciudad empieza a fragmentarse, el ángel en medio de todo solo mira en silencio inmóvil ante lo inevitable solo escuchando el tik tak del reloj que sostiene.

Los Ministerios son rodeados por los manifestantes que buscan explicaciones y que sus exigencias sean escuchadas, los guardias se ven sobrepasados y a la vez amarrados de manos al tener que guardar sus armas, desde la presidencia para evitar más conflictos sale en pantalla un hombre cómodo en una butaca rodeado de cortinas rojas con dorado, anuncia que los Bajos no saldrán con la suya y serán gravemente castigados, se levanta un toque de queda para todo ser exceptuando los de trabajos nocturnos y deberán ir identificados, la gente parece sentirse que han sido escuchados pero solo es una simple fachada.

Me tapo el rostro evitando ver cada ser que felicita esas acciones, que esperan ver sangre, que el general encarnizado los elimine a cada uno borrandolos de la ciudad, que los bajos sean exterminados. Para esto no fue construida está ciudad, fue para unificar no para dividir, el sistema que fue implantado está destruyéndolos desde dentro, envenenando sus almas con pensamientos tan oscuros y grotescos.

Corro lejos de allí, quiero dejar este lugar podrido en malicia, cuando siento un grupo con un aura distinta, son una mezcla de emociones pero terribles, luego otro grupo con pensamientos oscuros. Empiezan a nacer partidos, unos desean derrocar el sistema, otros desean que continué, algunos piensan que son mejores para controlarlo y algunos pocos desean saber que ocultan. Esto se está volviendo una locura, deben detenerse si continúan no habrá nada para ustedes solo dolor y muerte. 

Los seres se arremolinan a mi alrededor, no me notan, como notarían a un muerto con asuntos pendientes, seres roboticos o con apariencia animales o incluso mezcla de ambos o seres mitológicos se ríen ante todo. Empiezan las discusiones por los ideales de cada uno obligando a que los separen, con una pequeña chispa empieza el fuego dando paso a las peleas. No es suficiente con palabras ahora quieren acciones, comienzan a golpearse entre si echándose la culpa, las calles se ven nuevamente rodeadas de la muerte cuando armas salen a la luz dándole fin a vidas inocentes, seres que no quieren comprometerse huyen buscando refugio, los guardianes tratan de recuperar el orden pérdido llevándose a los infractores contra su voluntad, la plaza central se ve envuelta en el rojo, mientras pelean un ser de aspecto amenazante corre buscando desesperado a alguien, grita su nombre con fuerza esperando una respuesta que nunca llega solo le responde el filo de un cuchillo hiriendole la pierna. Aún con eso sigue caminando, corriendo buscando a alguien en todo este caos nada lo detiene y lo sigo esperando que lo encuentre, debe encontrarlo porque ya se a quien buscas y si le ha pasado ambos sufriremos un dolor profundo.