Versos entre Latidos y Silencios

Sombras del Pasado

Poema:

Un día, el sol volvió a brillar
sobre lo que creímos perdido,
y en la calma de un viejo amor,
tus palabras eran un refugio.
Había decidido seguir adelante,
la separación fue un pacto sincero,
pero los ecos de tu risa
resonaban como un canto eterno.

Cuando te vi de nuevo,
creí que el destino sonreía,
que los recuerdos se revitalizaban,
y que el pasado podía renacer.
Los gestos de cariño en tus ojos
me hicieron dudar,
como si el tiempo no hubiera pasado
y los sentimientos pudieran regresar.

Pero, entre risas y miradas,
había un secreto que ocultabas,
una sombra que se cernía
sobre las palabras que compartíamos.
Eras dulce, cercano,
pero en tus labios había un silencio
que gritaba verdades no dichas
y caricias que ya no eran solo mías.

El día que el mundo se desmoronó
fue el día en que entendí:
tus besos no eran solo recuerdos,
sino un eco de lo que no podía ser.
Porque en medio de esa confusión,
descubrí la amarga realidad:
tenías una nueva novia,
mientras yo jugaba a ser la única.

La traición se siente como una daga,
una herida que no se ve,
y en cada rayo de luz,
la oscuridad de tu deslealtad brilla.
Mientras me decías que me querías,
habías sellado un nuevo destino,
y tus palabras se convirtieron en cenizas
en el fuego de mi desilusión.

Y ahora, mientras intento entender,
cada risa compartida es un veneno,
cada recuerdo se convierte en una carga
que pesa en mi corazón.
Tus mentiras fueron como un juego,
y en el tablero de nuestra amistad,
las piezas se desplomaron
bajo el peso de la verdad oculta.

No quiero que me hables por mensaje,
no necesito tus palabras vacías.
Una disculpa por escrito es de cobarde,
como lo fuiste al mirarme a la cara
y callar lo que sabías.
Quiero que me mires a los ojos,
exigir la sinceridad que merezco,
porque el amor se construye
en la transparencia y el respeto.

Si tus labios robaron besos
mientras mi corazón permanecía fiel,
deberías pedirme perdón de la misma forma,
frente a frente, sin excusas.
Porque lo que rompiste fue más que un lazo;
fue la confianza, el cariño,
y la promesa de un futuro
que se desvaneció en la bruma del engaño.

Quizás algún día podré perdonar,
quizás las cicatrices sanen,
pero por ahora,
en esta confusión de sentimientos,
sólo puedo recordar lo que fue
y enfrentar lo que eres ahora.
Te miro, amigo,
y en el eco de mis palabras
hay una mezcla de amor y dolor,
un deseo de volver,
pero con la verdad que nos separa,
no sé si alguna vez podremos ser lo que éramos.



#1241 en Otros
#272 en Relatos cortos
#3389 en Novela romántica

En el texto hay: romance, amor desamor, amor lgbt

Editado: 05.11.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.