Capítulo 4

Narradora.

● sueño...

En una época lejana en un pequeño pueblo junto al mar viviendo salmos conectadas por un destino invisible Cami era una joven artista pintora que encontraba Inspiración en los paisajes tranquilos a la costa y en las personas que cruzaban su camino...

Seungmin por su parte era un músico talentoso conocido por sus melodías que parecían susurrar secretos al viento ambos eran conocidos en el pueblo por su arte Pero había algo más profundo en su relación..

Cami y Seungmin se conocieron una tarde cálida Cuando el sol comenzaba a ponerse y tiñó el cielo con tonos dorados y rosados.

Cami estaba sentada frente a un Lienzo mirando como el mar reflejaba los colores del atardecer seunmin escuchaba el suave rasgueo de su guitarra se acercó a ella traído por su serenidad y su habilidad de capturar bellezas en sus obras sin decir una palabra comenzó a tocar una melodía suave como si la música fuera una extensión de lo que cami sentía al pintar ella lo miró sorprendida y comenzó a pintar lo que sentía una mezcla de las olas la brisa y la conexión instantánea que había entre ellos.

Los dos crearon juntos cada uno a su manera una hora que reflejaba algo más profundo que solo la naturaleza algo que estaba en sus corazones una conexión que ya existía desde mucho antes a medida que pasaba el tiempo sus vidas se entrelazaron.

Cami pintaba cuadros inspirados en la música de seumen y él componía canciones basadas en la luz y la paz que emanaban las pinturas de cami sin embargo no solo compartían su arte... también se entendían sin palabras como si pudieran leer los pensamientos del otro compartiendo los mismos sueños temores y deseos.

En cada Rincón del pueblo su arte se podía sentir como un susurro constante que unía las almas de aquellos que se acercaban.

Al final cami y Seungmin sabían que su vínculo era eterno que sus almas ya se conocían antes de llegar a este mundo sabían que más allá de las fronteras del tiempo espacio siempre encontrarían una manera de reunirse y crear juntos.