Virgen Embarazada

Capítulo 9.

Capítulo 9.

Sebastián


—Lola, ¿Qué haces aquí? — cuestione mirando a la chica pelirroja frente a mí.


—El Sr. Liam quiere que le llevé algo de comer a la Srta. Miller. — dijo mientras se paseaba despreocupadamente por la cocina.


—Entonces vamos a averiguar qué quiere. — dije con una sonrisa mientras la tomaba del brazo.


─Te interesas demasiado en esa chica...─ Comenzó a decir con un tono que yo ya conocía muy bien.


─Cariño, no empieces. ─ La corte luego de darle un pequeño beso para seguir subiendo las escaleras.


Mientras más nos acercábamos al pasillo del tercer piso más se escuchaban unos gritos, por lo que ambos apresuramos el paso para encontrarnos con una escena sorprendente.


—¡Él es mío! — gritó Keisy, quien estaba sentada a horcajadas sobre Miley.


—¡Eso quisieras! — espetó Miley devuelta mientras tiraba de su cabello con fuerza.


—¡Zorra! — chillo Keisy mientras enredaba sus manos en el cabello de Miley.


—¡No más que tú, perra engreída! — gritó Miley mientras tiraba con más fuerza de su cabello, haciendo que Keisy chillara de dolor.


—¡Paren! — grité mientas me acercaba para tratar de quitar a Keisy de encima de Miley, quien en este punto ya había comenzado a perder el dominio sobre Keisy.


Lola se acercó para ayudar, o eso creía hasta que vi lo que hizo. ¿Qué les pasa a estas chicas hoy?


—¡Suéltame! — chillo Keisy al ser arrastrada por el cabello por una Lola furiosa.


A este paso va a quedar calva.

Aunque no me molestaría en lo absoluto. Es una odiosa sin remedio.


Por mi parte me dediqué a tomar a Miley de las caderas al ver que se dirigía hacia Keisy con las manos en puño. Pataleo, me insultó, gritó, chillo, pero aun así no dejé que se soltará otra vez porque recordé que estaba en el hospital ayer, así que muchas fuerzas no tenía.


Por un momento me quede observando a Lola sobre Keisy dándole piñazos, su cabello rojo haciendo contraste con su cara, que en estos momentos competía con su cabello, me hizo ver lo hermosa que es; aún enojada. Y es que Keisy ya le hacía hecho muchas, que se cobrara unas cuantas no sería problema.


O al menos eso pensé hasta que unos momentos después, todos los gritos, insultos, chillidos, golpes y demás fueron detenidos por el grito furioso de alguien.


—¡¿Qué rayos está pasando aquí?!— el grito de Liam hizo que las chicas quedarán aturdidas.


Y por el rostro que pusieron todas, puedo asegurar que no me gustaría estar en sus zapatos.


Liam


Fijé mi vista en Miley, quien lucía con el cabello y la ropa alborotada, las manos en puño y era sostenida por el cocinero. Luego en Lola, quien recién había soltado el cabello de Keisy.


—¿Qué fue lo que pasó? — cuestioné apretando los dientes, ninguna de las chicas parecía tener intenciones de hablar, así que dirigí mi mirada a Sebastián, quién suspiro antes de hablar.


—Keisy estaba golpeando a Miley. — murmuró mirándola molesto.


—No es cierto, ella me pegó y Lola la ayudó. — acusó Keisy con lágrimas en los ojos.


—No seas mentirosa, tu estabas encima de ella. — casi gritó Lola mirándola con reproche.


Y así comenzaron a discutir todos, Miley, Sebastián, Lola y Keisy. Suspire frustrado antes de ponerle fin a esta estupidez.


—Los quiero a todos fuera de mi casa ¡Ahora! — grité haciendo que todos enmudecieran, incluso Miley.


—¡¿Que?!— chillo Keisy, odiaba eso de ella, era muy chillona y si le agregamos a eso el hecho de que estoy molesto su tono de voz no ayudó en nada a su situación. Al contrario, la complicó.


—Liam, no tomes decisiones apresuradas…— comenzó a decir Miley.


—¡Cállate! ¡Están todos despedidos! ¡Los quiero fuera de mi casa a los tres! ¡Ya! — grité exasperado.


—Liam, escúchame...— trató de intervenir Miley luego de observar cómo Lola era consolada por el cocinero.


—No te metas Miley, y ustedes me voy a encargar de que no consigan trabajo nunca, ¡Ahora, largo!— grité al tiempo que escuche como Keisy y Lola comenzaban a sollozar más fuerte.


—Liam, por favor...no...no los..despidas...— escuché a Miley murmurar al tiempo que se tambaleaba, trate de llegar a ella, pero no alcance a sostenerla antes de que golpeara el suelo de manera estruendosa.


—Miley... ¿Qué te pasa? ¿Miley? ¡Miley!



#45552 en Novela romántica

En el texto hay: embarazo enredos amor

Editado: 05.08.2023

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