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Luego de decirle eso, la sujeté con mi mano izquierda en la mejilla y con mi mano derecha la tomé de la cintura y la pegué hacia mi.
Fue un besó tan inesperado pero al mismo tiempo sentía que era lo correcto y seguramente ella pensó lo mismo en su momento.
(Sí, la besé)...
Después de ese beso, entraron en juego un par de miradas por parte de ambos, donde ella miraba mis labios y yo sus ojos y viceversa. Esto se dió por algunos segundos donde no hubo ni una sola palabra.
En eso llegó mi compañero y nos encontró en esa situación tan íntima.
Mía y yo nos dimos rápidamente la espalda avergonzados de lo que habíamos hecho…
(Me sorprendió que Mia me siguiera la cuerda a pesar de que fuí yo quien se acercó a ella y tomó la iniciativa de besarla). Eso me dejó pensando.
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Ya es tarde y mañana tengo que trabajar pero quiero seguir recordando todo… Quiero recordar mi historia con Mía Buitrago. ¿Qué será de su vida hoy día?
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Por suerte pudimos encontrar el libro que buscábamos y logramos salir a tiempo.
Era hora de irnos así que acompañé a Mia a tomar el bus pero nuevamente mi compañero nos siguió hasta la estación diciendo que él también iba para esa dirección a esperar transporte ._.
Mientras esperaba la ruta de Mia, hablamos un poco sobre futuros proyectos e ideas que se podrían llevar a cabo y que probablemente serían un éxito total.
Al final llegó el bus que esperaba Mia y era hora de despedirnos…
(No podía verla a los ojos).
Mientras me despedía, Mia hizo algo que nunca olvidaré… Corrió hacia mí y me dió un beso, después corrió hacia la puerta del bus y mientras subía las escaleras me gritó…
El bus arrancó y yo me quedé atontado con lo que había pasado. Solo cubrí mi cara con mis manos.
Mi compañero solo me miraba y al mismo tiempo trataba de asimilar la situación…
(Pero qué molesto. De verdad que no se cansa).
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Llegué a casa de mis padres y me fuí directo a la cama. Estaba muy cansado y quería recapitular la tarde tan intensa que había tenido.
Mientras estaba acostado, cerré mis ojos por un momento y solo podía pensar en ese beso…
No tenía cabeza para otra cosa. Fue tanta la emoción que no podía dejar de pensar en ella.
En eso recibo un mensaje de Mia…
¡Mierda! (No le dije a Mia que ya había llegado. Me dejé llevar por mis emociones).
(Pero, ¿Cómo es posible que ella sepa eso?)
¿Será posible que yo le guste a Mia? (Eso pensé)...
(Por alguna razón me siento tranquilo y feliz al pensar en ella).
Al decirle eso, recibo una videollamada por parte de ella. Inmediatamente dejé caer mi celular de los nervios que tenía… Recojo mi celular y estando en la videollamada me pregunta…
(Pero qué es esa pregunta). Pensé que me diría cualquier otra cosa menos eso…