La temporada de Rosa, junto a la angustia del presente y pasado 3

La mujer de anclas caderas se aproxima al elevador y las puertas se cierran. Miro a Luka recoger sus cosas, así que hago lo mismo para dirigirnos a la famosa “entrevista adolecente”, la verdad no debería de juzgar al amor solo porque yo no tuve una buena oportunidad, pero desde que ese suceso con Luka mi personalidad es totalmente retorcida.

-Alice, ¿Esta lista? – lo veo cerca de la puerta con su abrigo para el frio infernal de la ciudad – Se nos hace tarde.

-Si ya estoy lista.

Vamos de camino al tren a la otra ciudad, Luka se las ha empeñado en estar siempre a mi lado. Siento que no me deja respirar y con lo de esta entrevista estoy más tensa que nunca. Al llegar a la otra cuidad caminamos un par de calles y llegamos al hotel de los “polluelos enamorados”

-Mira Alice es acá.

-Entonces no hagamos esperar más y entremos – estoy irritada de este viaje.

-Tranquila mujer, disfruta el viaje – me da una mirada juguetona – No seas una anciana – lo mato porque lo mato.

Entramos en el gran hotel, Luka llama a el representante de los chicos y le dice que subamos al piso 4 y ahí estarán esperándonos.

-Hola editor Luka, es un gusto que este esté aquí para publicar la entrevista – un hombre de mediana edad se dirigía a Luka.

-El gusto es nuestro, le quiero presentar a mi compañera Alice Foster – tomo mi mano y me a cerco hacia él.

-Un gusto

-El gusto es mío – me dio una pequeña sonrisa.

Después de las presentaciones correspondientes Luka empezó con la entrevista a los “famosos cantantes”. tomaba nota de algunas cosas para el articulo que tenemos que publicar este mes, y de reojo veía como Luka posaba sus ojos negros en mí.

-Buenos ya nos vamos – se dirigió Luka al representante – ya tenemos que volver a la editorial.

-Estaremos esperando el lanzamiento de la entrevista, editor Luka – mi jefe asiente

-Claro, de eso me encargo, nos vemos – le da la mano al representante y se aleja conmigo

-Adiós.

Vamos de camino a la editorial en el tren, por ser ya las 9 de la noche casi no van muchas personas. Me siento incomoda, todo el día me la pase con él, tengo la cabeza echa un lio y mis sentimientos…la verdad ya no sé qué sentir.

- ¿Que te pareció la entrevista? – toma un trago de agua de su botella – Te noto muy tensas ¿Estas bien? – miro como deja caer su cuerpo hacia mi lado.

-Si estoy bien, la verdad todavía no he terminado algunos artículos y ya casi llegamos a fin de ciclo – me pongo rígida ante su tacto.

-No te preocupes por eso, es tu primer mes, yo te ayudare a terminarlo – posa su mirada que inmediatamente conecta con la mía – Tengo que ayudar a la persona que quiero.

-Jaja claro, claro – este hombre de verdad me irrita

Llegamos a la editorial, dejo los materiales de trabajo sobre mi cubículo y me dirijo hacia la pequeña sala de estar que tiene la parte de edición.

- ¿Quieres un café? – me extiende una pequeña lata negra

-Gracias.

-Alice – veo como traga saliva, se acerca y subo mi mirada – Hare que vuelvas a enamorarte de mí, hare que te vuelvas aquella niña sincera y tímida de la cual me enamore… Adiós Alice.

Después de que Luka se fue, si se fue después de esa declaración, que me dejo muy dudosa e insegura se fue de la editorial, quedando yo sola con mis sentimientos. La verdad no entiendo como en el pasado me pude enamorar de una persona que hace alterar mis cambios de humor.