Capítulo 16

Como se había vuelto habitual, Mus y yo comíamos con la familia Clark; por cierto, Mus ya está enorme para tener 7 meses.

Los problemas de la granja se fueron intensificando bastante, en resumen, Madison ve este lugar como su hogar, así que hará lo posible por defenderlo, la novia de Nick no se sintió a gusto con la idea de quedarse y se fue, Alicia comenzó un amorío con Jack que en mi opinión es para mantenerse al tanto de todo lo que pasa en el rancho y así.

Jack está tratando de resolver los problemas. A lo que entendí en estas tierras hay cuerpos de la familia de Walker y como es una tribu... pues los restos son importantes, esta tarde hará un trato con él, de hecho no se lo ha dicho a nadie, pero es lo suficientemente obvio como para que al menos yo lo haya descubierto.

Madison sigue con ese plan de acercarse a Troy por su punto débil, por el lado de madre para tenerlo bajo control, no me gusta y el hecho de que no me guste hace que sea la única cosa en la que me he metido porque no quiero que juegue con algo así como lo es la familia.

No digo que yo no haya estado asegurándome de sobrevivir, pero no lo hice haciéndole creer que puedo quererlo como su mamá, puedo decir que hasta cierto punto he llegado a comprenderlo, pero todo acabará pronto, he estado estudiando las posibles rutas que pudo haber tomado Kalín desde Atlanta y estoy planeando irme en una semana.

— Me gusta esta comida —decía Alicia.

— No está mal, pero Daryl hace unas ardillas asadas espectaculares, eso —los apunté con el tenedor mientras masticaba— sí es rico.

Nick alzó una ceja mirándome con diversión.

— ¿Daryl? Es tu novio o algo así, no me digas que lo cambiaste por Troy.

— ¡Nick! —lo retó su hermana.

La idea de haberlo traicionado me ha carcomido todos estos meses que me he acercado a Troy.

— Hacemos lo que tenemos que hacer ¿no es así Alicia? —hice referencia a lo que hacía con Jack. Ella desvió la mirada y luego susurré— Daryl y yo no éramos novios, hasta podría decir que debe odiarme, los abandoné a todos cuando..  yo me rompí.

Lo último lo había dicho con una voz tan tortuosa que me di autolastima.

— Nunca nos contaste tu historia.

Tomé lo dicho como.un impulso para recuperar la compostura y sonreí.

— Y posiblemente no lo haga aún —contesté burlonamente— quiero dejarles algo claro, yo —me apunté— si quiero a Troy, pero no de esa manera —volví mi mirada al plato— todo lo que vengo haciendo es por pedido de su madre.

— ¿Qué te dará a cambio?

Chicos listos...

— Información, creo que tiene datos que me pueden ayudar a encontrar a quien busco.

Al ver que no les contaría nada más sobre la persona que buscaba me hicieron otra pregunta.

— Bueno, al menos respóndenos algo.

Alicia se cruzó de brazos mirándome.

— Cuando te encontraron, ¿de dónde venias corriendo?

Completó su hermano.

— Buena pregunta amigos míos, y para su buena suerte ésta si les contestaré. —extendí mis brazos a los costados como si estuviera por abrazar a alguien— No sé exactamente de donde, pero maso menos desde Atlanta, para que se den una idea.

— No diré que no te creo porque todos en el rancho sabemos que eres capaz.

Me reí y seguimos hablando animadamente hasta que vi a Madison con su bandeja de comida en mano pasar de largo nuestra mesa he ir donde Troy.

No es como que me agradara comer con esa mujer, pero era algo que sucedía siempre.pre y se me hizo muy raro.

— Tus hijos están allá —dijo él.

Rodé los ojos.

— Lo sé —respondió sonriéndole y colocando una servilleta en su pierna.

Llamé la atención de los hermanos que también la veían.

— Sé que a ninguno de ustedes les cae bien Troy, pero a mí sí así que iré a salvarlo de Madison —no me respondieron— Mus —lo llamé para que me siguiera.

Como tenía las manos ocupadas él tomó mi bate con su hocico y me lo llevó.

— Madison —llamé la atención de todos— tus hijos te esperan —ella sabía que era lo que yo quería hacer y no estaba dispuesta a moverse— en la mesa militar no están permitidas señoras —bromeé.

Como no quería moverse aún, Mus le mostro los dientes, y bastante enojada conmigo terminó yéndose.

— Tu tampoco eres militar —dijo Cuck cuando me acerqué al lugar que ocupaba Madison.

— Soy más militar que tú intento de arquero, cállate y come.

Rió por la nariz.

— Mira lo que tengo para ti —Troy llamó mi atención.

De su costado sacó una bonita flor que creo que vi afuera del rancho.

Le mostré una sonrisa.

Sé que Troy se está aferrando, y lo entiendo, es como un indefenso animal herido, y a veces también me siento culpable por dejar que crea cosas que no son, me siento culpable por todo, y lo soy, por prestarme para estas cosas, pero al menos al hacerlas yo, me aseguro que Madison no se meta y nadie más lo haga.

— Es muy bonita —gracias.

La colocó en mi oreja y me dio un tierno beso en la frente.

Estuve dialogando con todos ellos hasta que vi a Nick, quien ya se había levantado hace un rato de la mesa, se dirigia hacia Madison.

Lo extraño fue que luego de caminar juntos hablando de lo que parecía un tema preocupante todos partieran en una camioneta, y con todos me refiero a que con ambos también iba Jeremiah.

— Los veo luego ¿sí? —con el pasar de los meses fui llevándome bien con todos, o al menos con los que debería.

Caminé hasta donde antes estaba Jeremiah y de donde venía Nick; encontré un caballo, y no era cualquier caballo, era uno de los de Vernon. Él y su familia habían partido hace unos días de aquí, luego de las declaraciones de Maic, decidieron no correr riesgos quedándose.

Definitivamente algo pasó.

Luego de un rato que me pasé vigilando, vi la misma caravana en la que se había ido Vernon, su esposa, Maic y Grashel remolcada con la camioneta en la que se fueron Jeremiah, Madison y Nick.