08 de enero de 2021
Fijo mi atención a Jason, me platica que el día de hoy tiene un partido y que le gustaría que fuera a verlo. Cuando acaba de invitarme me pregunta.
- ¿Qué dices? Puedo pasar por ti si gustas, luego iremos a la casa de Adam – dice.
- Oh, no te preocupes, puedo ir por mi propia cuenta. Te veo allá ¿vale? – le digo con una sonrisa.
- Bueno, pero al menos déjame llevarte a tu casa.
No puedo decirle que no, ya que no quiero discutir con él, aparte me parece buena idea ya que no me gustaría caminar de regreso a casa. Entonces, sin rechistar nos dirigimos a su auto, Jason me abre la puerta y después de que yo entre, la cierra y se dirige a mi casa.
Cuando Jason estaciona el carro frente a mi casa me volteo para poder verlo.
- Muchas gracias, Jae. Te veo en el partido, ¿va? – le pregunto y me acerco para darle un beso en su mejilla.
- Bien, pero sabes muy bien que te puedo pasar a traer antes – me contesta viéndome a los ojos.
- Nah, prefiero que pase Victoria por mí, supongo que irá a ver a Adam.
- Si, esos dos parecen chicles – me dice con una sonrisa.
Me rio –. Lo sé – le doy la razón lista para darme la vuelta y salir del auto.
Veo a Jason irse hacia su casa y lo despido con una mano.
Entro a mi casa con una sonrisa y saludo a mamá que veo está haciendo la comida, le comento que hoy iré a ver a Jason.
- Esta bien hija. Tal vez después de que acabe su partido puedan venir a cenar, tiene tiempo que no lo veo – me dice mientras revuelve lo que sea que este cocinando.
- No creo que sea posible, me dijo que luego iremos un rato a casa de Adam – le explico mientras me acerco para poder ver que es lo que está cocinando. Espagueti.
- ¿El novio de Victoria? – solo asiento para después subir a mi habitación.
°°°
Escucho el auto de Victoria y segundos después el timbre. Abro la puerta para ver la sonrisa de Victoria y le doy un abrazo.
- Hola, ¿estas lista? – me pregunta con una sonrisa entrando a la casa.
- Si, solo voy por mi bolso. No tardo – le digo para subir corriendo las escaleras.
Una vez que tengo mi bolso en mano bajo para ver a Victoria, le digo que estoy lista y salimos.
Cuando estaciona el auto en el campo, bajamos para buscar nuestros lugares. Vemos al equipo de Adam y Jason calentando, mientras el otro equipo acaba de llegar.
Jason me ve y no tarda en ir a saludarme.
- Hola, linda – me dice para besar previamente mis labios.
- Hola – respondí después de que nos separamos y alzo mi mano para tocar su rostro –. Te ves muy bien hoy, ¿eh?
- Gracias – me responde para darme una sonrisa.
- ¡STONE! – escucho que alguien grita. Veo atrás de Jason para encontrarme con Adam. Me separo del pelinegro para acercarme a Adam.
Le doy un abrazo rápido para después preguntarle como está.
- Bien, espero que tu estés igual o mejor – me dice con una sonrisa -. ¿Dónde está Vicky? – me pregunta con el ceño fruncido.
Volteo para buscarla, pero no la encuentro.
– Debió ir a comprar frituras – respondo volteándome hacia los chicos.
- Hoy voy a dedicarte muchos goles, ¿sabías? – Me dice Jason pasando su brazo por encima de mis hombros. Suelto una risa para negar con la cabeza y responderle.
- No hace falta que lo hagas – le digo para voltear y depositar un beso en su mejilla.
- Diablos, ustedes son tan empalagosos – nos dice Adam con una mueca.
Victoria se acerca a nosotros con dos vasos de refresco en sus manos. Le da un beso en los labios a su novio.
- Hola, cariño – le dice a Adam mientras este la ve con una sonrisa boba en su rostro.
- Hola, nena – le contesta Adam –. Estaba buscándote, casi pienso que no habías venido, eres mi amuleto de la suerte.
Ruedo levemente los ojos con una sonrisa en mis labios. Vaya, creía que nosotros éramos los empalagosos.
- Chicos, ya va a empezar el partido – nos dice un miembro del equipo de Jason.
Adam se despide de Victoria mientras Jason me dice que este atenta al partido ya que al menos un gol va a meter. Me da un beso en la frente para después alejarse de mí.
Volteo para caminar hacia Victoria que ya está sentada a unos metros de mí, pero antes de que pueda dar al menos tres pasos hacia ella, escucho uno voz diciendo mi nombre.
- ¿Madelaine? – volteo para ver quién es el dueño de la voz y cuando mis ojos lo ven simplemente no lo puedo creer. Estoy segura que mi corazón hubiera dejado de latir, si eso fuera posible, claro.
- ¿Austin? – pregunto casi en un susurro, seguramente puede escuchar los latidos de mi corazón -. ¿Qué? ¿Qué estás haciendo aquí?
- Bueno, pues sigo jugando futbol – me contesta encogiéndose de hombros y regalándome una sonrisa. Mierda -. Me da gusto verte, ¿cómo estás? Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que te vi.