Y llegaste tú...

¿Qué pasará con mi vida a partir de ahora?

Después de aquel día tan inesperado, llegamos a Italia, lo peor de lo peor, siempre quise viajar a otro país, pero jamás me imagine que seria de esta manera y lo peor ni siquiera se hablar italiano, aunque dudo mucho poder salir, llegamos a una villa un poco alejada de la ciudad, a pesar de eso, aquella villa o casa de campo era hermosa, había árboles, un jardín precioso, parecía tener mucha tranquilidad, adentro era como un castillo, bueno para mi parecía asi pues jamás había vivido en una casa tan grande, me quede tan impresionada estaba en un proceso de emocion pero a la vez de nervios, no sabia que pasaría con mi vida a partir de ahora.

—¿vas a quedarte ahí parada? —me pregunto Nicolás, desde la puerta.

—y ¿Que quieres qué haga?, que me ponga a echarle un vistazo, a la casa, a sonreir alegremente como niña chiquita, después de que me trajiste a la fuerza si más no lo recuerdas.

—no te traje a la fuerza hice un trato contigo.

—y te recuerdo que no tenia otra opcion mas que aceptar. Ya que tu mismo lo dijiste, o venia por las buenas, o por las malas.

—asi es —su respuesta hizo que me molestará más.

—Y todavía tienes el simismo de confirmarmelo.

—Tu habitación es la de arriba del lado derecho, te deje la vista al sol, subiré tus cosas mas tarde, además iremos a un restaurante Italiano, asi que preparate para salir.

—espera, ¿no se supone que no deberías de dejarme salir?

—no vas a ir sola, iras conmigo, además no conoces Italia asi que te seria imposible escapar, además supongo que no sabes hablar italiano —¿Qué rayos le pasa a éste chico? Aunque no estaba nada equivocado con lo que dijo.

—vaya que rápido sacas conclusiones.

—¿tu crees?

—pero ya que voy a estar aquí, preferíria no salir, y mejor quedarme a ver que tan horrible es mi vida.

—y te recuerdo, que no te pregunte si te querías quedar.

—hipócrita.

—que carácter.

—Lo mismo digo.

Después de decir eso, subí a la habitación, ya que no tenia otra opcion.

—¿estas lista? —me pregunto Nicolás al  bajar.

me quede callada y no le respondí, Nicolás  se veía raro, como si se le hubiera aparecido un fantasma tenía curiosidad pues se veía furioso, pero obviamente no le iba a preguntar.

—vámonos...

que no se supone que si esta enojado era para que me hablara con voz fuerte, sera que no esta enojado. No creo que pierda mi orgullo por preguntarle, cuando estábamos a punto de subir al auto me atreví a preguntar —¿Te pasa algo?

Nicolás solo se me quedo mirando sin decir una palabra, me abrió la puerta para subir al auto, una vez que me subí, se dirigió al asiento del conductor, se puso el cinturón y encendió el auto, seguia sin comprender la situacion, lo que mas me sorprendió fue ver el aeropuerto, estacionó el auto y me abrió la puerta nuevamente, me baje y lo mire con curiosidad —¿Qué estamos haciendo aqui?

—no lo ves, es el aeropuerto, eres libre —vaya carácter voluble.

—¿Pero que?, no entiendo, ¿libre?

—Es lo que querías, vamos —cogio mi brazo aumentando fuerza en el, llevándome a la entrada del aeropuerto.

—pero, ¿que te pasa?, primero me traes aqui, como si nada y ahora me regresas sin decirme la razón, además suéltame, me lastimas.

—Bien entonces ¿que quieres?, te estoy dejando libre, que problema hay con eso.

—claro, que quiero ser libre, pero tambien quiero una razón — llámenme tonta, tenía una gran oportunidad para regresar a casa, pero no sólo a mí se me ocurre pedir una razón.

—¿Y hace falta una razón?

—¡¡Claro que hace falta una razón!!

—no hace falta, vamos.

—por favor, dime.

—Bien sabes ¿por que?, porque todo este tiempo he sido engañado, todo fue parte de su plan, que tu estes aqui, ahora,todo.

—plan, ¿De que estas hablando?

—No, no hace falta que lo sepas.

—pero ¿por que?

—te juzgue mal, no eres una interesada —claro hasta ahora lo admites.

—Y hasta ahora te das cuenta.

—No, no te voy a dejar libre —lo miré extrañada.

—¿Qué pero si acabas de decir que me ibas a dejar libre?

—Aun no garantizo, si no eres una interesada —que rápido cambio de parecer.

—que voluble.

No, no puedo hacerla sufrir, más de lo que ya la hice, no puedo. —vamos al restaurante que te dije.

—Pues si no tengo otra opcion.

Después de ir a aquel restaurante y no entender nada de lo que decían, nos dirigimos a la casa, una vez llegamos decidí ir a darme un baño, pero recorde que aun faltaba mi pijama que estaba en la maleta, lo peor es que no recordaba donde la había puesto Nicolás. Fui a buscarlo para pedirla y al no encontrarlo, por ninguna parte busque en el jardín, lo encontré hablando por teléfono, me quede a esperar, por lo que veía el no se había dado cuenta de mi presencia, logre ver en su rostro algunas lágrimas, mientras se tensaba como si su cuerpo hirviera de rabia.  Preferi escuchar lo que decía, no queria ser chismosa, pero en verdad queria saber que pasaba.

♥♥♥

—Eso es lo que esperabas no es asi, te hiciste la víctima de todo esto, lograste enamorar a Madison con el fin de quitarme lo que me pertenece, ¡maldito!, sabias que traería a Madison para que se olvidara de ti, por eso hiciste ese viaje de negocios, solo eres un cobarde la enamoraste con el fin de que te dejara libre a Camila, como puedes ser tan idiota, te vas a arrepentir. —vi como terminaba la llamada y tiraba el teléfono al pasto.

No entendí muy bien aquella plática y si más no me equivoco estaba hablando con Bryan, por lo que oí Bryan sólo estaba jugando conmigo, será real lo que escuché, ¿Quien es Camila?. No entiendo nada quiero preguntarle pero quiero creer que lo que escuché no es cierto.

Nicolás se sentó a tomar aire, como si intentará calmarse, yo solo buscaba la manera de salir de ahí, sin que se diera cuenta, pero me era imposible, no lograba verlo bien, debido a que estaba de espaldas, me acerqué un poco a el; dude un poco si hablarle o mejor alejarme pero mi boca hablo por mi. —Hola...



#39772 en Novela romántica

En el texto hay: romance comedia

Editado: 10.08.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.