Y llegaste tú...

"Noche de gala" (parte 1)

Debido a mi trabajo no logré conversar con Nick, creí que volvería a la cafetería pero no fue así, comencé a tratar de ser más responsable en mi trabajo, ya que últimamente estaba muy distraída.

Los días pasaron rápido, faltaba un día para la boda de Bryan, era algo que realmente no debía importarme.Lo importante era seguir trabajando. 

Mientras limpiaba las mesas entro la hermana de Nick, su nombre era Giselle si más no recuerdo.

—Hola — se acercó a mi y me saludo — ¿Estás ocupada?, La verdad quería conversar contigo mientras tomábamos un café.

—Lo siento, mi próximo descanso será dentro de una hora.

— Entonces esperare — al principio creí que bromeaba, pero realmente me espero.

Cuando me dieron mi descanso me senté junto a ella, y desvíe mi mirada hacía la puerta, no me sentía cómoda estando cerca de ella debido a que no la conozco, sin mencionar que había decidido no involucrarme más con su familia.

—¿Quieres un café o alguna otra cosa? — me pregunto, volví mi mirada hacía ella para no parecer descortés.

— Un café está bien gracias.

—De acuerdo un café será. — ella sonrió y llamo a otra camarera que entró a trabajar después de mi para hacer el pedido.

Mientras esperábamos el café el ambiente se volvió aún más incomodo ya que las dos estábamos en silencio.

—¿Debes preguntarte por qué quiero conversar contigo? —dijo por fin.

— Si, la verdad tengo esa duda.

—Muy pronto será la boda de mi hermano, para ser exacta mañana.

—Si recibí una invitación, pero si lo que te preocupa es que yo asista no debes preocuparte ya que no iré.

—La verdad he venido ha pedirte que asistas.

—¿Puedo preguntar por qué?

—Supongo que sabes que Nico y Bryan últimamente no se llevan bien. Sinceramente temo que causen un conflicto entre sí.

—¿Y qué tengo que ver yo en eso? — pregunté con una mirada desafiante.

—Considero que eres muy buena amiga de Nico, tengo las esperanzas de que si llegara a pasar algo así tú lo controles.

— Lo siento pero no puedo aceptar...— se acercó la camarera y deposito las tazas de café sobre la mesa. —Agradezco que se tomará su tiempo de pedírmelo personalmente, pero como verá estoy muy ocupada con mi trabajo.

— Puedo pagarte.

—realmente no necesito dinero, como le dije antes agradezco su consideración, pero si solo necesita que una amiga lo controle puede recurrir a otra de sus amigas.

—No creo que el escuché a otra persona, en cambio a usted la escuchará.

—¿Cómo puede asegurar eso?

—Es mi hermano, lo conozco.

Solo deseo que usted asista por si se presenta la posibilidad de un posible conflicto. —dijo tomando un sorbo de café.

— Me disculpo mucho, pero no voy a aceptar, además mi descanso ya está por terminar si me disculpa.

—Puedo ofrecerte una oferta mejor. - me detení antes de irme.

—Si realmente quiere sobornarme pierde su tiempo. - dije con una mirada desafiante.

—Primero escúchame, probablemente esto te beneficie. - me volví a mi lugar para escuchar que es lo que tenía que decir —puedo ofrecerte una oferta de trabajo, puedo asegurarte que tendrás mejor sueldo que el que recibes en esta cafetería. Si cambias de opinión te dejo mi número de contacto. — dejo una tarjeta sobre la mesa, realmente no iba a aceptar pero considerando que podría darme un mejor trabajo y podría ayudar a mi mamá, mi respuesta cambio por completo.

—Esperé —la detení antes de que se fuera.

— Dime.

-—Aceptaré su oferta.

—De acuerdo, entonces coge todas tus cosas y ven conmigo.

—Pero ¿Y mi trabajo?

—A partir de ahora dejaras de trabajar aquí, mañana te asignare un puesto en la compañía, además necesitamos ir a comprar un vestido de gala para que uses en la boda. — asentí y fuí a recoger mis cosas, me disculpe con la encargada de la cafetería y le expliqué que tenía una gran oferta de trabajo que no podía rechazar, luego me dirigí hacia donde se encontraba Giselle.

Nos subimos a su auto y llegamos a una tienda de vestidos.

Había toneladas de hermosos diseños, qué probablemente debían de costar una fortuna.

—Hola Mary. — Giselle saludo a una chica que se encontraba acomodando algunos vestidos.

—Señorita Giselle ¿Necesita un vestido para usted?

— Esta vez vine a buscar un vestido para ella —me hizo señas para que me acercara — ¿Crees que tengas algo para ella?

—Echare un vistazo. — comenzaron a tomarme las medidas y luego me mostraron varios modelos, me hicieron probarme uno por uno.

—¿No tiene algo más? —le pregunto Giselle a Mary.

—Son los únicos que me quedan en su talla, hay uno que resaltará con el color de su cabello, pero es un poco más pequeño.

— quisiera verlo por favor. —luego de que dijo eso llegaron con un vestido.

El vestido se veía mejor, pero lo sentía muy ajustado, era de un tono azul celeste.

—Ese es perfecto, lo llevamos —Giselle saco una de sus tarjetas para pagar el vestido mientras que yo esperaba la entrega, cuando salimos Giselle se me quedó mirando unos segundos.

—¿Puedes caminar con zapatillas? vme pregunto.

—Puedo intentar.

—Quizas unas zapatillas con tacón pequeño te vengan bien, mañana iré a tu casa a alistarte dame tu dirección. — le di mi dirección y me llevo a casa para que fuera más fácil de aprender el camino.

Entre a casa y fuí directamente a darme un baño, para después dormir, no hable con mi madre respecto al nuevo trabajo que me ofrecieron, decidí comentarle todo cuando regresara de la fiesta, lo único que le dije fue que quería dormir ya que mañana iba a asistir a una boda.

— Mady tienes visita — escuché a mi mamá tocar la puerta, me levanté aún somnolienta y revise la hora, eran las cinco de la mañana.

—¿Mady estás despierta? — me volvió a llamar mi mamá.



#39760 en Novela romántica

En el texto hay: romance comedia

Editado: 10.08.2020

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