Ha pasado ya tres casi cuatro semanas desde que vi por última vez a Brandon, no sé que diría pero no me volvieron dejar entrar a esa casa, entiendo su dolor, entiendo que quiera estar solo o únicamente en compañía de su familia, pero no puede alejar así a las personas. Yo lo entendí tarde y no quiero que a él le pase lo mismo que a mi, no quiero que pierda a todos sus amigos y se quede con una familia rota, des estructurada como la mía.
La señora Cavalli entra a la clase mirando el sitio de Brandon como de costumbre, no sé si habrá visto las noticias pero de haberlo hecho seguro sabe que ha pasado con la mediana de los hermanos O' Connor. Todavía estoy procesando que son tres hermanos y no dos, es decir, no hay ni una sola foto de ese chico por la casa, solo de Brandon y Eleanor.
Hace unas semanas se anunció, por fin, que Eleanor O' Connor había sido encontrada pero que se encontraba en coma por una serie de heridas. Por otro lado, hace unos días ella salió del coma hace unos días, pero todavía no sé nada de Brandon.
- Señor O' Connor.- me quedo idiota al ver pasar a Brandon.- ¿Cómo se encuentra su hermana?
- Está despierta.- contesta frío.- Se recupera.
Él ni siquiera mira en mi dirección y vuelve a subir las escaleras a su sitio de siempre.
Intento prestar atención a la clase pero me dificulta mucho teniendo a Brandon tan cerca, ¿por qué no me dijo lo de su hermana? Sé que lo presioné a coger una llamada que no debería haber cogido, el padre de ambos era el responsable de hacer saber a su hermano las condiciones en las que se encontraba su hermana pero yo no lo sabia y no creo que tenga que disculparme.
- ¿Discutisteis el día que te lleve?- niego.- ¿Entonces? Ni siquiera te ha mirado.- me encojo de hombros.
Cuando el timbre anuncia el final de la clase, recojo mis cosas despacio para intentar salir al mismo tiempo que Brandon pero mi amigo es más rápido que yo y es quien intercepta a Brandon.
- Tío.- lo llama.- ¡Cuánto tiempo!- le dice Ronan.
- Si.- resopla.
Se escucha una voz de niña pequeña llamando a Brandon y enseguida una pelinegra se lanza a los brazos de Brandon, quien con una enorme sonrisa la atrapa y la estruja entre sus brazos. Por las características de la niña puedo afirmar que es Andrómeda O' Connor.
- ¿Cómo está la niña más hermosa del mundo?- le sonríe.
- Bien, voy a ver mami.- dice emocionada.- Etá despierta tito.- veo como a ambos se le aguan los ojos.
- ¿La llevas tú?
Veo a quien le pregunta, es un chico alto, muy alto, musculado, ojos azul oscuro exactamente iguales a los de Eleanor, pelo negro y piel pálida como la de ella, y por el parecido en la cara voy a decir que es el hermano mayor de ambos.
- La llevo yo Brad.- dice con una voz profunda.- ¿De qué tienes miedo? Somos sus hermanos, no pretendo quitártela.- Brandon resopla.
- Sé que no.- se toma un tiempo.- Solo es que todo es mucho para mi, no hace más de dos años que te conozco.
- Lo sé, pero somos hermanos.- él le sonríe y le revuelve el pelo.- Recuerda siempre que estaré para ti cuando no esté trabajando.- ambos se ríen.- Deja esa cara larga y vamos a por nuestra hermana.
- Claro.- dice con una sonrisa.- Nos vemos.- nos dice a nosotros.
Ellos nos dan la espalda y salen del campus de la universidad, estoy muy confusa, enserio no entiendo nada.
- ¿Tiene un hermano mayor?- asiento lentamente.- Los de esa familia son guapísimos.
- Si que lo son.- coincide Ronan con Gabi.
Continuo el día pensando en Brandon y me pregunto, ¿y si no lo hubiese contactado? ¿hubiese seguido su “amigo” más tiempo con el acoso? ¿ Y si lo hubiese conocido en otras circunstancias? Seguramente hubiese sido solo un polvo, aunque ahora si que lo parezco, no me habla, me ignora y no me deja ir a su casa, definitivamente las personas ricas y las normales no debemos de juntarnos, no combinamos y eso está más que comprobado ya.
- ¿Por qué arrugas tanto la frente?- me pregunta mi compañera de habitación.
- Por un tío.- resoplo.- Pero voy a olvidarme de él un rato.
- Los tíos solo dan dolor de cabeza.
- Si lo hacen si.
Ella se va de la habitación poco después y me deja sola sin saber que hacer, no quiero ponerme con los trabajos un jueves a las ocho de la noche así que opto por llamar a mi abuela, hace mucho que no hablo con ella y con Rose, ellas son la única familia que me queda.
Después de tres tonos mi abuela contesta al teléfono aliviada, hace mucho que no las llamo por videollamada pero necesitaba y necesito estar alejada de ellas por un tiempo, si yo hubiese visto el mensaje de papá podría haber avisado a mi madre y él no los hubiese pillado. Siempre habrá mil y si...? de lo que pudo pasar esa noche pero al final pasó lo que yo temía desde hacía tiempo.
- Te notas cansada.- me dice mi abuela.
- Lo estoy.
- ¿Por qué?- ella me conoce demasiado bien.
- Desde hace poco tiempo empecé a hablar con un chico, es amable, un poco pícaro como a mi me gusta y es guapo – ella mes escucha con atención.- , incluso me ha puesto uno de esos tontos motes, explosión café, según porque le gusta mi tono de piel y el café.- ella sonríe, sabe de los problemas que hemos tenido ambas por el tono de nuestra hermosa piel.- Pero hace poco algo pasó en su familia y ahora no me habla, no me mira y me ha hecho a un lado.