Despierto con el brazo de alguien alrededor de mi cintura y con mi cabeza en el pecho de esa misma persona, al principio me asusto luego recuerdo que ayer Brandon vino a disculparse aunque no creo que fuese necesario pero disipó cualquier tipo de duda de mi cabeza, y dejó de molestarme que no me hablara en tanto tiempo, entiendo y comprendo todo lo que me dijo anoche y agradezco de corazón que quisiese explicarse.
Siento como se remueve debajo de mi y al subir la cabeza para mirarlo, veo como me da una sonrisa de recién despertado y como sus ojos castaños brillan con el sol mañanero, ahora que los veo mejor, los ojos de Brandon no son oscuros, tiene los ojos marrones claros, podría decir que de color ámbar.
- Buenos días.- habla con voz ronca y mi barriga cosquillea.
- Buenos días.- le sonrío.
- ¿Te parece si yo voy a mi casa y me cambio mientras tu haces lo mismo y media hora pasó a por ti y vamos a desayunar?- lo pienso por unos segundos y acabo asintiendo.- Perfecto, entonces mi explosión café nos vemos en breves.
Él me aparta un poco para poder salir de mi y me da un beso en los labios que me deja paralizada, ´él me sonríe como si nada y sale de mi cuarto mientras que yo me quedo dentro de él con todas las hormonas revolucionadas, estúpido. No puede hacer este tipo de cosas y no esperar ningún tipo de reacción de mi parte.
Le mando un mensaje a Gabi porque se supone que hoy sábado iba a desayunar con ella pero por primera vez prefiero no ser la tercera y dejar que desayune a solas con su novio mientras yo desayuno con Brandon, hablando y con tranquilidad, porque en verdad él es listo, inteligente pero quiere aparentar lo contrario.
Recibo un mensaje de Gabi diciéndome que no me preocupe y que ya nos veremos esta tarde o mañana, que ella en verdad ya sabía lo de Brandon porque le habló ayer para saber cual era mi habitación, traicionera.
Salgo de mi habitación para lavarme los dientes, la cara y arreglar mi desastroso pelo, una vez que eso ya está arreglado vuelvo a mi habitación corriendo.
- Buenos días Gala.- me agarro el pecho por el susto que me da mi compañera de cuarto.
- Joder que susto, buenos días Vanesa.- digo una vez que el susto se me ha pasado.
- ¿Vas a salir?- asiento.- Yo también.
Ella vuelve a sus cosas y yo miro en mi armario, vamos a desayunar así que creo que con algo ligero estaría bien, así que opto por una camiseta básica de mangas cortas y unos pantalones vaqueros comunes, yo soy bastante normal, sin ningún tipo de excentricidad.
o'connor_brad : Estoy abajo cuando quieras bajas.
Yo: Dame cinco minutos.
Él solo me manda un emoticono y yo termino de hacerme una coleta, cojo mi bolso, mi teléfono y bajo las escaleras para salir al exterior donde la primavera ya ha entrado con fuerza.
Veo el coche de Brandon y a él fumando recostado en él, con ese aire de chico malo pero que en verdad no es, él es sencillo, si no ves la marca de sus prendas creerías que son de cualquier tienda, sino ves su coche, su solo lo ves a él puedes olvidar que es rico mientras que tu no lo eres, no sé de que forma lo habrán criado para ello pero ninguno de los tres hermanos van fardando de tener mucho dinero a pesar de que si lo tienen, vamos Brandon es modelo y su hermana lo fue y el tal Lukas ese también podría serlo.
Cuando me ve Brandon tira el cigarro, lo apaga y luego vuelve a cogerlo para tirarlo en una papelera, es la primera vez que veo a alguien hacer eso, pero estamos hablando de Brandon O' Connor, él siempre es único.
- ¿Vamos?- dice abriendo la puerta del copiloto para que yo pueda entrar.
- Claro. - le sonrío y entro.
Él da la vuelta y entra como piloto, el primer día no me fije del todo en como conducía porque estaba un poco extrañada de su comportamiento ante la mención de su madre, pero hoy que me fijo tiene un conducir elegante, sereno y sexy aunque eso puede ser también por la ropa que lleva, una camiseta ajustada de los Rolling Stone y unos vaqueros normales que se le ajustan bien a su delgada figura, no creo que pese lo normal para alguien de su estatura igual que posiblemente no lo haga su hermana, supongo que es algo de genética que yo por supuesto no entiendo.
- Llegamos.- veo la cafetería en la que nos conocimos y sonrío.
Él sale antes que yo y abre mi puerta antes de que yo misma pueda hacerlo, luego cierra la puerta del coche y él coche para que nadie se lo robe y entramos en la bonita cafetería, tengo entendido que la dueña en francesa, como los O' Connor.
- ¿Qué van a pedir?- dice un camarero.
- Yo un café solo sin azúcar.- eso si que es amargo, ¡Dios! ¿Cómo puede beber eso?- Y un bollo de crema ¿Y tu Gala?
- Yo un café con leche, descafeinado y con azúcar por favor y una caracola normal, sin crema.- él nos sonríe.
- En breves lo tendrán.
El chico se va con nuestras órdenes y nosotros nos quedamos en silencio, pero no es incómodo, es normal, tranquilo, no tenemos prisa por hablar y eso está bien, más que bien.
Veo de lejos al chico que hace unos meses me acosaba y siento algo de miedo pero intento enmascararlo para que Brandon no se preocupe por mi, algo que no consigo en absoluto y él mira la cafetería para ver al chico.
- Gala.- él me sonríe y toma mis manos entre las suyas para tranquilizarme.- No te va a volver a acosar, se lo dejé bien claro.